Capítulo 5 - Pérdida

170 19 3
                                    

Capítulo 5 - Pérdida.

Me mantuve junto a Minato-san todo el tiempo mientras él dejaba todo en orden, no entendía muy bien porque el nacimiento de Naruto era peligroso y aunque tenía mucha curiosidad por preguntar me mantuve callada porque esas eran cosas de adultos y aún era una niña, cuando Minato-san termino con todo volvimos a casa para buscar mis cosas y en silencio fuimos a la casa de Itachi, nos recibió Mikoto-san.

-Siento tener que molestarles con esto -dijo Minato-san con una sonrisa avergonzada.

-No te preocupes, Miko es una niña muy buena no tengo problemas con cuidar de ello -dijo la mujer con una sonrisa cálida.

-¡Muchas gracias! -dijo Minato-san haciendo un reverencia y luego se giró hacía mí agachándose a mi altura- Pórtate bien, vendré a buscarte cuando Naruto allá nacido -me dijo.

-Promete que regresaras pronto ¿si? -le pedí y él sonrió asintiendo.

-Lo prometo, ahora ve adentro -me dio un pequeño empujón y camine hacia Mikoto-san.

-Entra cariño, Itachi está en el patio con Sasuke -me dijo la mujer, asentí sin decir nada y entre a la casa, no me costó mucho encontrar a Itachi, él estaba sentado en el pasillo que daba al patio, cargaba a Sasuke quien parecía dormir muy cómodo sobre sus brazos, verle de esa forma me hizo sentir ternura y también pensar en Naruto, me preguntaba si sería así de adorable como el pequeño Sasuke.

-Hola Itachi -le salude y me senté a su lado, se giró para verme y me sonrió.

-Hola Miko -me dijo y cuando pensaba hablar más Mikoto-san apareció.

-Niños tengo que salir por un momento, cuiden de Sasuke por favor e Itachi muéstrale su habitación a Miko, no tardare mucho -nos dijo.

-Está bien madre -le dijo Itachi, Mikoto-san se despidió de los dos y se fue.

Itachi me mostro la habitación donde dormiría y también me mostro una parte de la casa, me explico cosas para evitar que me perdiera por el lugar era algo grande y yo tenía pésimo sentido de orientación, luego de eso volvimos a sentarnos nuevamente en el pasillo hacía el patio y observamos la luna, ya era algo tarde. Una pequeña brisa me rozo la cara y olfatee un poco, el olor que me llego fue desagradable e hizo que me levantara para moverme y olfatear un poco más, me estremecí un poco.

-¿Pasa algo, Miko? -me pregunto Itachi y lo mire con algo de preocupación.

-Huele a muerte -le dije intentando captar de donde venía ese olor.

-El ambiente se siente extraño -me dijo.

-Personas están muriendo, estoy segura de ello... es por eso que se siente esta sensación extraña -mire al cielo- es como cuando empieza una batalla -dije nerviosa.

-Tranquilízate, mis padres llegaran pronto -me dijo acercándose a mí, me tomo de la mano- todo estará bien -su voz suave hizo que mi nerviosismo se redujera un poco, me aferre a su brazo.

-Tengo miedo, ese olor se está haciendo cada vez más fuerte-murmure.

-Hay que ir adentro -asentí y los dos entramos a la casa, luego un rugido como el de un animal salvaje se escuchó y todo empezó a temblar, Sasuke no dejaba de llorar e Itachi intentaba calmarlo como podía, los dos salimos de la casa, todo el mundo corría, rocas y escombros empezaron a caer del cielo, una roca que cayó cerca hizo que termináramos en el suelo.

-Itachi ¿Estas bien? -me levante y me acerque.

-Si -me dijo levantándose- Sasuke tranquilo... ¿Te asustaste? -le dijo con una cara sonriente, intentaba calmar a su hermanito era algo muy lindo- Vamos -me tomo de la mano y no me resistí, los dos empezamos a correr, por el camino ayudamos a una niña y terminamos yendo al lugar en donde nos pondrían a salvo, Fugaku-san estaba ahí, los dos dejamos a la niña y fuimos con Fugaku-san.

-¡Padre! -le dijo Itachi, él nos miró.

-Me imaginaba que estarían bien, apúrense a la zona de evacuación -nos dijo.

-Si... -dijimos los dos y nos fuimos, no sé por cuanto tiempo tuvimos que esperar, me mantuve junto a Itachi pero sabía que afuera habían muchos muertos, podía olerlo, también podía oler la desesperación y la tristeza.

-¿Te encuentras bien? -la pregunta de Itachi me saco de mis pensamientos, ya habíamos salido de ese lugar y ahora todo parecía más tranquilo pero solo habíamos recibido malas noticias.

-Minato-san y Kushina-san están muertos... ¿Qué se supone que debo hacer ahora? -le dije aguantando las ganas de llorar.

-No lo sé pero ¿Qué quieres hacer tú? -me pregunto a su vez, fue algo que me dejo pensativa y que no pude responder, a los días siguientes terminamos asistiendo al funeral de todos aquellos que murieron ese día y la reconstrucción de la aldea.

****

-Creo que quedarte conmigo es mala idea -me dijo Kakashi-san apenas entramos a su casa, varios meses se estuvieron las reparaciones pero todo parecía estar en orden, excepto que todo el mundo parecía estar algo tenso.

-Tú me ofreciste un lugar donde dormir a estas alturas no puedes echarte para atrás -le dije y le escuche suspirar- además soy tu linda y pequeña hermana así que te toca, a menos que las palabras que dijiste frente a la tumba de Minato-san fueran mentiras -me cruce de brazos mirándole.

-Tienes que dejar de espiarme, ahora mocosa malcriada tu cuarto esta por ahí -me señalo el pasillo y fui a ver la habitación, esta era convencional, una cama, un escritorio y un lugar donde guardar la ropa, me parecía perfecto.

-Perfecto, gracias Kakashi-san -me gire y fui con él para abrazarle, me separe sabiendo que esas cosas no le gustaban mucho- ahora tengo una pregunta ¿Qué tengo que hacer para que el Hokage me deje ver a Naruto? -pregunte seria.

-No se puede hacer nada, todos aquellos que hayan tenido contacto con el cuarto Hokage no se pueden acercar al bebé -me dijo.

-Eso es injusto, le prometí a Kushina-san que sería la mejor hermana mayor para Naruto y como se supone que lo sea si no me dejan verle -me queje y Kakashi-san coloco una mano sobre mi cabeza.

-Lo siento, seguro que cuando Naruto crezca un poco más puedes acercarte a él -me dijo y le mire.

-Extraño mucho a Minato-san y Kushina-san -dije en un murmullo empezando a llorar.

-No llores, ven... Conseguí algo para ti -me limpie las lágrimas y lo seguí, me paso una caja y la abrí, en ella había una foto- la conseguí en los escombros de la casa, y le coloque un nuevo marco -era una foto de Minato-san, Kushina-san y yo, recordaba que me habían arrastrado para tomarme esa foto.

-Gracias Kakashi-san -le dije con una media sonrisa.

-También tengo una noticia para ti, resulta que Minato-san hizo los arreglos para que tuvieras su apellido -al escuchar eso me sorprendí.

-¡Pero si Minato-san dijo que lo haría luego de que naciera Naruto! -exclame.

-Pues lo hizo antes, ahora eres Miko Namikaze ¿Qué te parece? -esta vez no me pude controlar y empecé a llorar, no sabía si sentirme feliz por ello o triste, lo único que me quedaba era llorar por la pérdida de la única familia que había conocido, Kakashi-san me abrazo- Ya, ya no llores más -se separó de mí y asentí.

-Está bien -me limpie las mejillas- lo siento, yo solo... estoy feliz y a la vez triste por esa noticia -confesé.

-Lo comprendo, pero con esto espero que no te quede dudas de que Minato-san y Kushina-san te querían como si fueras su hija -me dijo.

-Nunca lo voy a olvidar, lo prometo -asentí.

-Ahora a comer -anuncio.

-¡Quiero un tazón de ramen, vamos a Ichiraku! -exclame.

-¿Ramen? ¿En serio? -pregunto perplejo.

-Si, vamos -le tome de la mano y lo arrastre fuera de la casa.

Tal vez había perdido a la que consideraba mi familia pero aún me quedaba Kakashi-san e Itachi, y esperaba que eso no cambiara con el tiempo.

****

Estuve tanto tiempo bloqueada que no sabía cuando iba a poder escribir pero he progresado un poco con eso así que espero poder publicar un poco mas seguido y acabar con todos mis proyectos. Espero les guste el capítulo.

***Zharak***

Sharingan: Secretos de Clan. {Itachi}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora