ELA
Jack me ataco con un sinfín de preguntas y yo no sabía por donde iniciar, los asesinos de Adam siguen sueltos y eso me llenaba de ira.
—Llegaron en el momento justo, —les dije a los chicos. Uno de ellos se llamaba Mateo y el otro Pablo. Jack hizo las presentaciones, al parecer los conocía y venían también al apartamento de H, no me dieron mala pinta, pero no era ignorante, tenían pinta de estar en bandas callejeras del lugar. Estaba muy agradecida con ellos, no sabía cómo hubiera terminado si ellos no hubieran llegado.
—Estoy muy agradecida con ustedes, —comento
—No te preocupes, entraron a territorio Harlem Crips, no permitiríamos este tipo de atropellos, cuidamos a la gente del territorio.
Sus palabras me causaron curiosidad Harlem Crips, pero no era el momento, Jack quería hablar conmigo y hacerme preguntas, pero en este momento solo quería estar en unos brazos fuertes, que me hacían sentir segura y plena Max, estaba tan lejos de mí y de paso furioso, nunca le contesté las llamadas, ni tampoco se las devolví.
—¿Ela? —me llamo Jack, sacándome de mi nube de pensamientos.
—¿Quieres entrar o quieres ir a otro lado? —No me había planteado que hacer, después de ese atropello que tuvimos.
No sabía qué hacer, no estaba de humor para ir al apartamento de H, mi animo no era de fiesta.
—Creo que esta vez voy a pasar de la fiesta, ¿podrías llamarme un taxi? Iré a mi apartamento.
—Yo te llevo, —dijo Jack, no tuve ni fuerzas para negarme, era mejor estar acompañada.
Me despedí de los chicos, me comentaron que debía pasar por el lugar y comentarles lo que ocurría, que ellos me ayudarían, no saben como sus palabras me inflaron el corazón, yo era una desconocida para ellos y estaba poniéndose a mi disposición para ayudarme.
***
No me di cuenta en qué momento estábamos llegando al campus, mi mente estaba tomando cada parte de lo sucedido y hacia un análisis detallado "Algo" ¿a que se refería ese tipo con "algo"? me hacia esa pregunta sin llegar a alguna respuesta.
—¿Ela por dónde?
Estaba tan sumergida en mis pensamientos que se me había olvidado que Jack no sabía donde vivía. Le indique y nos aparcamos en el estacionamiento que había.
—No se como lo vayas a tomar, pero, ¿puedo pasar la noche contigo?, y no hablo de dormir contigo, puedo dormir en cualquier lado, es que no podre estar tranquilo dejándote sola, —y tenia razón, no debía quedarme sola, así que accedí.
Al entrar un aroma familiar llego a mí, Max, ¿Dónde estás? ¿Por qué no estás aquí conmigo? Dijiste que me protegerías. Recuerdo sus palabras y se me arruga el corazón, pero debo ser fuerte lo que se viene seguramente no será fácil.
—Podrías contarme que esta sucediendo, que tu silencio me esta matando.
—Ni yo lo sé, —confesé. —No te imaginas las vueltas que le he dado al asunto y no entiendo. Siempre pensé que fue una casualidad encontrarnos con esos tipos, pero después de hoy, todo ha cambiado.
—¿a qué te refieres?
—El día que asesinaron a Adam, pensé que estábamos en el lugar y momento equivocado, pero ¿si fue premeditado? El tipo quiere algo de Adam, y ni yo sé a que se refiere, Adam jamás tuvo contacto con tipos así, de eso estoy segura. Y ahora ellos piensas que yo lo tengo, —dije, mientas una lagrima salía de mis ojos.
Jack escucha cada palabra, tratando de analizar.
—¿Recuerdas algo importante que te haya dado?
Nada se me viene a la cabeza, no encontraba algo que a esos tipos podrían interesarles.
—No, —dije en un susurro.
—Tranquila, lo resolveremos, por el momento vayamos a descansar, lo necesitas, yo puedo dormir en este sofá.
—¿No estarás muy incómodo?
—Estaré bien, solo necesitaré algo con que abrigarme, —Asentí y fue a buscar algo para él.
Algo
Esa palabra daba y daba vueltas en mi mente, ¿Qué podría ser? Ellos deben estar muy seguros que yo lo tengo.
Deje a Jack una colcha suave, —espero que puedas descansar, si necesitas algo, no dudes en buscarme, —el asintió y de repente sentí su abrazo, era cálido, pero no lo suficiente, no era lo que necesitaba en un abrazo. Me dio un beso en la mejilla y se acomodó en sofá.
***
Golpes en la puerta me despertaron, la noche anterior no había podido dormir bien, tuve pensadillas toda la noche, como si me faltara algo más y las ojeras que tenían no se podrían ocultar ni con una masa de maquillaje.
—¿Ela? —escucho mi nombre a lo lejos, aún estaba somnolienta, poco a poco estaba volviendo a la realidad, —¡¿Ela?! —esta vez el llamado era de preocupación y como agua fría cayendo sobre mí, recordé la voz que estaba escuchando «Max».
Abro la puerta aun con los ojos cerrados, no salgo por completo de mi mente dormida, pero antes de que pudiera abrir por completo mis ojos, tenia unos brazos a mi alrededor y aquel aroma que tanto me gustaba me hizo abrir los ojos, y era él. Aun no entendía como estaba allí, si había sido muy claro que llegaría la semana próxima.
—Hola pequeña, —me dice mientras besa mi cabeza, y no saben lo feliz que me hizo escucharlo, tenerlo ahí conmigo, en serio que lo extrañaba y no me había dado cuenta cuanto lo extrañaba hasta ahora.
Mi voz se había perdido en el camino, las palabras no salían de mí, solo quería seguir en ese abrazo. Lo necesitaba. Él me guía a la cama de mi habitación, mientras cierra la puerta detrás de él.
—¿Estas bien? Jack me conto lo que paso anoche, pero quiero que me digas si estas bien, si te tocaron, si te hicieron daño, —había odio en su voz, lo notaba, estaba furioso.
—Estoy bien, les dieron a esos tipos lo que se merecían, —comento para tranquilizarlo, el se aleja para confirmar que no me hicieron daño.
Luego de un rato letermino contando todo lo ocurrido la noche anterior y escucha atentamente cadapalabra, pero su mirada denota rabia, odio, miedo y lo entiendo, las cosas hancambiado demasiado, ya no son cajas, ni mensajes a mi puerta, ahora es unaclara amenaza a mi vida y ellos parecían que nunca me dejarían en paz.
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CAMINO A LA LUZ
Teen FictionHace un año que su vida cambio, Ela ya no es la misma, después de que su vida tuvo un giro de 180 grados. No sabe como volver a retomarla, solo espera ir poco a poco, encontrarse así misma y volver a sentirse viva. Después de lo sucedido solo creé...