¿Somos Dos?- Avatar La Leyenda De Aang/ AangxOc

Capítulo 30

Holaa, esto, estoy de vuelta, solo di

-Justo te fijas en la campeona- le contesto.

-¿Estará ciega de verdad?

-Sus ojos.

-¿Qué?

-Mira sus ojos- le contesto.

-¿Que le pasan?

-No mira a nadie, mira a la nada. SI, es ciega- concluyo.

-No hay que ser un cerebrito para averiguar eso- se une a la conversación Sokka. Yo le saco la lengua como respuesta.

Vuelvo mi mirada al rin, donde la pequeña chica está levantando ese cinturón que parece pesar el doble que ella con orgullo. Todo el mundo comienza a corear su nombre mientras esta parece prepararse para la pelea.

-No puede ser ciega, es parte de su personaje, ¿no?- pregunta esta vez Katara sin haber escuchado nuestra anterior conversación.

-Yo creo que lo es- contesta Aang sin quitarle los ojos de encima.

-Eso ya lo habíamos averiguado nosotros- añade Hiro con sorna.

-Yo creo que va a perder, sea ciega o no- habla Sokka.

-A la Roca le da cargo de consciencia luchar contra una chica joven y ciega- dice el luchador enorme hablando en una voz super grave y en tercera persona.

-A mi me parece que solo tienes miedo, Roca- le contesta con seguridad la pelinegra.

El hombre para un segundo antes de volver a hablar.

-La Roca ha superado sus sentimientos conflictivos y ahora está listo para enterrarte con una avalancha de piedras- concluye mientras sigue hablando en tercera persona.

-¡Cunado tu digas, piedrita!- le responde con falsa emoción su contraria y seguidamente se pone a reír descontroladamente.

-Es un creído- le juzga Hiro inmediatamente.

-No deberíamos asumir nada...pero concuerdo totalmente- le contesto con una risa.

Sokka nos hecha una mala mirada antes de devolver su completa atención a donde se esta desarrollando el espectáculo.

-La chica me cae bien- añade el menor.

-También concuerdo en eso.

Miro a Aang por el rabillo del ojo y le veo mirar a la nada con cara de sorprendido.

"¿Todo bien?" Le pregunto con un pensamiento para no alertar a los demás. Mis palabras le sacan del ensimismamiento y solamente asiente sin siquiera mirarme. Un sentimiento de ya haber oído la risa de esa chica me llega de repente.

Ignoro el sentimiento al darme cuenta de que la pelea comienza. El hombre comienza dando un brusco pisotón al  suelo, pero antes siquiera de que su pie llegue al suelo la niña ya ha reaccionado y le ha enviado un movimiento de la tierra por el suelo que hace que el pie del musculoso se desvié,  consiguiendo que este se abra de piernas. Todos parecen quedarse atónitos y yo no puedo evitar reírme. La cara de sufrimiento del hombre lo dice todo.

La pelea continua y acaba en cuestión de segundos. La bandida ciega le ha dado una paliza a el hombretón el cual le sacaba al menos un metro de altura y unos sesenta kilos de peso en menos de dos minutos.

La chica sonríe despreocupadamente ante su victoria.

-La ganadora, y todavía campeona, ¡La Bandida Ciega!- anuncia el presentador.

Sokka se lamenta ante la situación mientras Hiro y yo chocamos los cinco. Es niña definitivamente es genial.

-¿Cómo ha hecho eso?- pregunta Katara.