¿Somos Dos?- Avatar La Leyenda De Aang/ AangxOc

Capitulo 21

Aang logra subirse encima de la jaula de metal del viejo, y parece intentar romper la cadena, pero yo no me quedo quieta. Las otras dos chicas nos miran con cara amenazante, una sacando cuchillas y la otra se pone en posición de ataque, pero entonces se oye un grito.
-¡No le hagáis daño a la avatar!
Era la princesa Azula desde las alturas.
La chica que lleva un peinado algo extravagante se para en seco y me mira confusión.
-¿Será que quiere acabar con esta ella misma?
-Supongo- le contesta la otra.
Aunque ellas no me vayan a atacar, yo voy a luchar contra ellas, no me quedaré mirando.

-Zu, hay que proteger al niño. Ya que no te van a hacer daño, apártate y protegerlo.
Oh, ¡venga ya! Acabo de decir que no me quedaría parada. Que impotencia, pero su plan tiene sentido, y no vale la pena rechistar. Cojo al pequeño en brazos y retrocedo unos cuantos metros.
-¡Mejor si huimos!- dice ella en el mismo instante.
Todos empezamos a correr, yo con el pequeño en brazos, siguiendo a Hiro, quien va primero.

De la nada sale una mano ¿de un agujero del suelo? Y esto provoca que el mencionado caiga, haciéndome caer a mi también al chocar me, e intento proteger al bebé de la caída.

Mientras que yo me quedo en el mismo lugar, Hiro salió con el impulso hasta el límite de la plataforma, quedando al lado de una gran caída. Del agujero de antes dale una de las chicas amenazadoras de antes, quien corre hasta mi amigo.
Katara y Sokka se acercan corriendo también mientras yo me pongo de pie, preparada por si tengo que intervenir.
Mi hermano llega hasta Hiro pero la chica del pelo corto entretiene a mi hermana, lanzando le una cuchillas. Vaya juego más divertido, pienso para mis adentros.

Katara logra retener todas las cuchillas con agua control, y empieza a pelear. Al  mirar hacia los chicos veo como Sokka está ya en el suelo, inmóvil por un golpe que le han propinado, al parecer, y el siguiente debe de ser Hiro, quien está paralizado.
Por instinto busco de donde saco el agua Katara, y consigo yo la suficiente como para hacer un látigo, y cogiéndole por la pierna la tumbo rápidamente.

El menor se levanta y arrastrando al mayor los dos bajan por las escaleras. Yo miro brevemente a mi hermana. Parece arreglárselas bien sola, así que decido seguir a los chicos. Bajo también las escaleras como puedo, pues el bebé me dificulta la movilidad.

Los chicos siguen corriendo, pero algo me dice que debo quedarme. Le entrego el bebé a Sokka y vuelvo corriendo. Cuando llego, aquella chica circense le era dando unos golpes muy extraños a Katara, quien tenía atrapada a la otra chica. Pero desde el momento en el que recibió los golpes el agua cayó al suelo.
-¡Katara!- le exclamó yo ansiosa, no entiendo lo que está pasando.
-No podras luchar sin tus poderes,¿eh?- le dice la peli negra con sorna.
Peor yo todavía sí, cuando levanto el agua las dos chicas me miran con tensión, si les han prohibido dañarme, puedo pararlas.
-Azula no ha dicho nada de que no puedas dejarla sin poderes.
-Entendido- dice la otra acercándose a mi rápidamente.
-¡Yo si puedo luchar sin poderes!- grita Sokka llegando en Appa junto a Hiro y el pequeño, lanzando su boomerang, haciendo que la cuchilla que iba dirigida a mi hermana fuera desviada.

Buena entrada Sokka, pero la frase va tarde.
Appa aterriza entre nosotras y las chicas de la nación del fuego, las cuales salen disparadas por el golpe que les da el gran animal con la cola.

-Hay que ir a por Aang.
-¿dónde está?- me contesta mi hermano.

Ya subidos en Appa sobre volamos la ciudad en su búsqueda.
-¡Allí está!- grita la castaña.

El animal enseguida empieza a descender, con intención de recogerlo.

Azula no para de lanzar azules llamaradas, y Aang por poco las puede esquivar. Con un golpe de aire, nos lanza la jaula de Bummi, pero va con tanta fuerza que no logramos cogerla y esta empieza a caer en picado, con el monje encima. Por suerte, caen en uno de esos conductos que están por toda la ciudad, y siguen deslizándose.
Un bloque de tierra parece haber bloqueado uno de los ataques, y deduzco que fue el viejo. Es impresionante que haya hecho eso con su barbilla.