Sᥲbᥱr qᥙᥱ ᥒo dᥙrᥲrᥱmos dᥱmᥲsιᥲdo ᥱᥒ todo ᥱsto, mᥱ ρoᥒᥱ mᥲᥣ sᥲbᥱr qᥙᥱ ᥒo tᥱ tᥱᥒdrᥱ́ mᥲ́s; ρᥱro, hᥲrᥱ́ ᥣo ρosιbᥣᥱ ρᥲrᥲ qᥙᥱ tᥙs dᥱsᥱos sᥱ hᥲgᥲᥒ rᥱᥲᥣιdᥲd...
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[✍️] Es adaptación de mi propio libro Mikellino.
[✍️] Trataré de informarme lo mejor posibl...
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RUBIUS
Miraba aquella lista en mis manos, desde que había llegado a casa no he dejado de leer y releerlo una y otra vez. Suspiré, es que realmente no sabía que hacer, quería pensar que era una broma o algo insignificante. Pero, ¿cómo pensar eso si prácticamente trataban todos los deseos de mí? La otra posibilidad es que era un psicópata, como en aquel juego de Yandere Simulator donde la chica está locamente obsesionada por un tipo que acaba de conocer y le ofreció solo la puta mano para que se levantará al haber chocado.
Bien, mi mente ya está divagando y creo que debería hacerle caso a Mangel cuando me dijo que ya no debería de jugar esa cosa... ¡Eso es! ¡Mangel!
Él conoce a aquel chico ya que se habla con uno de sus amigos, deberá saber algo sobre esto ¿verdad? Es mi única opción. Aunque, no, capaz me crea puto loco al decirle esto...
Miraba mi celular al frente de mío, meditaba si debía agarrarlo y marcar el número de mi mejor amigo, miré nuevamente la lista y el rostro de aquel chico pasaron por mi mente. Si realmente todo es cierto, necesitaré ayuda.
Al querer tomar mi celular, este empezó a sonar, lo que me asustó y luego me relaje al ver el apodo de mi... Novia.
Me sentí nervioso, joder, ¿cómo es que me pude olvidar de Nieves? Sentí una punzada en mi cabeza, joder, si sigo pensando de más me vendrá un dolor de cabeza horrible como los últimos días.
Decidí contestar— Hola.
— ¡Osito! Pensé que ya no ibas a contestarme, eso de hacerme esperar me pone mal, ¿todo está bien? —la escuché, solo miré la lista y la dejé en mi escritorio.
— S...Si, todo bien Nieves —cuanto odio tartamudear.
— ¿Y los apodos cariñosos? No eres de llamarme por mi nombre —mordí mi labio inferior no tan fuerte, ya la cagué— ¿Osito?
— ¡Es la tarea! —grité, ¡¿por qué coño he gritado?!— Eh, digo —carraspeé, para así rascar mi mejilla un poco por los nervios— estoy un poco estresado y ya sabes cómo me pongo cuando eso sucede. Por eso me demoré en contestar, andaba con los dolores de cabeza otra vez.
— Oh, entiendo, entonces es mejor que descanses osito, nos vemos mañana en la uni. Te amo —tragué en seco, para asentir como si ella estuviera frente a mí.
— También yo...—dije, para luego despedirme y cortar la llamada, apoyé mis manos al costado de aquella dichosa hoja, lo miraba serio— ¿Cómo es que algo tan simple me hace pensar demasiado? —suspiré rendido— Primero conocernos, bueno, al menos si piensas en conocer primero a la persona que te gusta. Esto ya parece un anime cliché romántico —solté unas risas, para llevar mis manos a mi rostro y pasarlos para ya parar, con una leve sonrisa en mi rostro— Bien lindo, desde ahora seré el genio de la lámpara para tí, cumpliré tu segundo deseo.
