4.Rompiendo las reglas

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Una locura, eso había sido la primera semana conviviendo para ambas chicas, podrían pelearse por cualquier cosa. Incluso discutían por quién debería sacar la basura con piedra papel y tijera.

Sin embargo, Siyeon había analizado cada movimiento y forma de ser de Bora, tanto que había quedado deslumbrada con su personalidad.
Bora parecía ser toda una niña mimada, pero ésta le demostró todo lo contrario con su carácter.

Por otro lado estaba Bora que no entendía a Siyeon, la hacía enojar con cualquier cosa y luego para arreglarlo le soltaba algún piropo de la nada.
No sabía mucho acerca de su familia o algo relacionado con el tema, pues parecía un tema sensible para la coreana ya que Bora no puedo evitar escuchar y ver la actitud de Siyeon después de una llamada por parte de su familia.

También Siyeon le pidió un momento para explicarle el problema que tenía entre las piernas a Bora, se mostró bastante confundida en un principio y luego fue completamente comprensiva con la coreana, algo que hizo a Siyeon sorprenderse.
Esperaba que Bora la tratara como el  "fenómeno" que era, pero no fue así y siguió tratando a Siyeon igual que el primer día; con el mismo egocentrismo de siempre.

Era por fin viernes para las compañeras de piso y pensaban salir con sus respectivas amigas. Bora estaba yendo al baño a hacer sus necesidades como de costumbre por la mañana y se encontró la tapa del inodoro subida, enfadada le gritó a Siyeon.

–¡LEE SIYEON! –gritó haciendo que la mencionada con el pelo revuelto y algo de baba en su mejilla apareciera.

–¿Ahora que hice?

–¡Deja de ser tan vaga y baja la maldita tapa! ¿No sabes mear o qué pasa? –se cruzó de brazos molesta.

–Es que con pereza no ha sido lo único con lo que me he levantado...–musitó Siyeon acercándose y arreglando su desastre.–Me es difícil porque como verás–la voz de Bora la interrumpió.

–¡Vale! ¡Entendido! ¡No quiero que me cuentes tu vida! –chilló muy sonrojada la coreana y la otra coreana rió, Bora la observó algo sorprendida, nunca la había escuchado reír.

Con el pensamiento de lo bonita que era la risa de la otra coreana, Bora volvió a su habitación para preparar su outfit como cada mañana, según ella tenía que vestirse perfecta para llamar la atención de Seoho.

–¡Ah! ¡No tengo nada para ponerme! –se cruzó de brazos frustrada, aunque la realidad es que quizás tenía una montaña de ropa en la cama.

–Ey Bora...ya preparé el desayuno y para que no te vayas enojada a la universidad te hice unos cereales riquísimos –apareció sin tocar Siyeon por la puerta y sonrió al ver a la mayor sin pantalones.

–¡Vete! ¡Me estoy cambiando! –trató de cubrirse con algo al ver a su menor acercarse a ella.

Bora totalmente avergonzada sintió la respiración de Siyeon en su cuello, su piel se erizó al sentir aquello. Siyeon con suavidad movió los labios para susurrarle.

–No sé por qué te complicas tanto por la ropa, te ves hermosa con cualquier cosa puesta.

Dicho esto, la coreana salió por la puerta con demasiada calma, dejando sonrojada a Bora por sus palabras.

–La odio, la odio, la odio –se dijo a si misma encontrando por fin el conjunto de ropa que quería.

A pesar de las palabras de la coreana, desayuno con Lee como cada mañana mientras contestaba una llamada de su madre para preguntarle qué tal se las estaba apañando para vivir "sola". Siyeon se aguantó la risa cuando la escucho decir que "de maravilla"

FOCUS ON ME; SUAYEON [G!P]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora