¿Un momento de paz?.

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-Leo...¿lo sabe?- Le recorrió un escalofrío.- Creo que los dos moriremos...y ahora si cumple su amenaza de enviarme al polo norte a vivir.- Recordó cuando le dijo que empezaba a salir con su primer novio.

-Leo no lo sabe aún si Sou no se lo ha dicho. Además iré contigo.- Volteó a ver la ventana, todo era oscuro.- No creo que nos mate...

-Ya hemos llegado...Hanzs me acaba de decir que es maseguro esperar en el estacionamiento.- Ve que la prensa está en la entrada esperando.- No creo que nos mate...

-Si, es más seguro por que no queremos cuestionamientos, de hecho deben de entrar a la pista cinco minutos después de que aterrice en lo que subo al otro avión.- Ya estaba cerca.- Debo colgar, no falta mucho para aterrizar.

Guardó su celular e informo lo que le dijo el castaño. Inconscientemente se llevó sus manos a su abdomen aún plano. (Esto no me puede estar pasando...si en verdad estás creciendo dentro de mi, tendrás unos padres que te amarán y que darían la vida por ti por verte feliz y sano.)

Estaba a una hora de aterrizar ya, sus pensamientos se fueron mezclando con algo de sueño y café. No tenía nada claro y también el como decirle a Leo sin que lo matara. Seguía con los nervios al mil hasta que aterrizaron.

Él avión había ya aterrizado y esperaron el tiempo que les había dicho el castaño, cuando pasó se dirigieron a la zona de aterrizaje en la camioneta.

Salió del avión y un transporte pequeño lo saco a él hacía el otro vuelo, bajo y espero en la puerta de este, se acercó una camioneta y eso lo puso nervioso.

Se sentía nerviosa sin más suspiro y bajo cuando le abrieron la puerta. Al bajar lo vio en la entrada esperándola, con paso lento se fue acercando hasta subir a las escaleras hasta llegar a su lado.

Lo único que hizo inconscientemente fue abrazarla, después de dejarla tanto aunque fueran horas. Estaba feliz de verla de nuevo, algo con lo que realmente no contaba.
-¿Cómo te sientes?-

-Correspondió el abrazo.- Ya me siento mejor...ahora que estás aquí conmigo y por favor no me dejes sola o te pegaré.- Oculta su rostro en el pecho de él.

-No te voy a volver a dejar sola, y fue por razones de seguridad...- La abrazó un poco más fuerte, tenía el sentimiento a flor de piel.- ...nunca más te dejaré sola.

-Hay que irnos...aún tienes una carrera que ganará y yo tengo que ver a mi hermano además de Sou.- No lo quería soltar pero tenía que hacerlo.- Todo esta pesadilla ha terminado.

-Ellos ya deben de estar camino a Francia que es nuestra siguiente parada, aunque sigo sin tener noticias de Dom...- Lo último lo dijo con mucha tristeza, había entendido todo el trasfondo y logró perdonarlo.-. ..pobre chico.- La tomo por la mano y entraron al avión donde a ella la sentó junto a la ventana. Se pusieron los cinturones y comenzó el despegue.- ¿Cómo te sientes respecto a...tu embarazo?-

-Esto es nuevo...me emociona que esto sea verdad, pero tengo miedo es algo nuevo para mi.- Miraba por la ventana.- Me da un poco de miedo la reacción de Leo, no se como se lo tome...- Toca nuevamente su vientre.- Si en verdad estoy embarazada, este bebé será amado.

En toda América se hacía conocida la noticia del arresto del señor Toletto y del hijo de él, la prensa estaban al pendiente de todo lo que pasaba, en el hospital donde atendían al peli-azul se hacía lo posible para salvarlo ya que la bala se había incrustado cerca del pulmón derecho causando una hemorragia. y por esa razón los chicos ya no pudieron seguir con su viaje a Francia.

-Creeme que Sou me ha dicho como es y eso me da un poco de miedo, espero que no me asesine cuando lo sepa ya sea por ti o por Sou. Créeme que le daremos todo el amor del mundo. Será una persona de bien.- Seguía son soltarle la mano y la apretó un poco más.- Creí que pasaría hasta más adelante...

¿Destino?... Concuerdo contigo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora