Reencuentro Y Accidente.

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Habían pasado ya tres meses y había regresado triunfante a las pistas como si fuera un milagro, los medios seguían de alabanciosos.
El llevaba el...no sabía si el mismo ritmo, creyó que se había hecho lento pues sus tiempos habían decaído hasta 5 segundos. "Es normal" fue lo que pensó al estar de nuevo al mando de un nuevo Porsche. "Necesito más práctica" se decía a sí mismo en un intento de autoengaño. Comenzaba a agarrar su ritmo de nuevo, faltaban menos de dos meses para el inicio de la nueva temporada que sería en Suzuka, Japón. Todos tenían la misma confianza en el que cuando se accidentó, si no es que más.

En esos tres meses que habían pasado la pelinegra seguía trabajando en la cafetería y llendo a clases a la universidad, se sorprendió al saber que tiene media beca en la facultad de danza, se esforzaba para seguir adelante aún sigue participando en las carreras clandestinas al igual que su hermano que hace poco abrió su taller mecánico y poco a poco iba agarrando fama entre los corredores.

Seguía practicando y retomando su ritmo, su vida por decirlo de alguna manera volvió a la normalidad pero algo no estaba bien, algo faltaba.
Al salir del autódromo saco de su cartera el número de la chica, lo admiro por un momento y lo guardo de nuevo. Se dijo que no los buscaría más pero debía que, tenía una deuda.

La chica aún tenia curiosidad sobre el y estuvo investigando por su cuenta, más por los medios de comunicación que informaban de la recuperación del chico, se sentía feliz por él y se alegraba de que ya regreso a su gran pasión.

Decidió pasar al menos un par de días lejos de todo el tumulto que había a su alrededor, ir a los Alpes no era mala idea y le gustaba esquiar, esa noche salió en su coche hacia allá, quería estar solo o de lo contrario hubiera llevado sus padres. Quería reflexionar sobre que hacer.

En otro lado de la ciudad, otra carrera se llevaba a cabo ahora competía el hermano de la chica que estaba listo para salir. Esta vez se jugaban los coches y los hermanos estaban juntos hablando sobre la carrera.

-Ten cuidado al pararte en las calles para detener el tráfico- le decía a su hermana mientras se subía a su coche.

-Lo tendré...te deseo suerte y ten cuidado. - se coloca el casco y enciende a su moto para ir con su otro compañero.

Dan el pitido y los motociclistas aceleran para salir primero y así poder detener el tráfico en las calles donde se llevará a cabo la carrera.

La autopista no tenía límite de velocidad así qué alzar la velocidad no era ningún problema, 330 y seguía subiendo, estaba totalmente solo y los coches que había ahí se orillaban a la derecha para dejar pasar al bólido,  el combustible aún alcanzaba para la siguiente gasolinera por lo que fue bajando el paso para repostar combustible.

Pasaban por las principales avenidas y se desviaron hacia la autopista que es un pequeño atajo que los llevará casi a la frontera con Luxemburgo. Daban lo que podían no querían perder en esta carrera, trataban de hacer que los poco coches que estaban en la autopista se hicieran a un lado para dejarles espacio.

Retomó el camino en su Porsche a toda velocidad de nuevo, pisando el pedal hasta el fondo, cambiando de velocidad y escuchando el tenido del turbo en el gearshift. Era placentero y tampoco necesitaba el estéreo para entretenerse, pilotar era lo único que necesitaba.

La carrera entre su hermano y otro compañero de ellos iba parejo...mientras que ella y el otro tipo que le hace de guardia estaban por  atrás cuidando de que la policía no los atrape pero la chica no se percató de qué casi choca con un Porsche tubo que maniobrar asiendo que el casco se moviera y le impedía tener una visión más amplia así que sin más remedio rápidamente se quito  por completo el casco botándolo en el césped y aceleró.

¿Destino?... Concuerdo contigo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora