Debilidad

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El camino de regreso se me hace más largo, tal vez sea porque en la ida estuve dormida casi todo el viaje

Llevamos apenas dos horas de camino

—Oye Naru, necesito ir al baño

—Tenía que ser, espera un poco pesada pronto buscaré algún autoservicio

La verdad era que estaba a una nada de orinarme no sabía cuanto más aguantaría y después de unos minutos que me parecieron horas por fin nos detuvimos

Salí corriendo sin mirar atrás en cuanto salí del auto, por lo cual al querer entrar como una bestia al baño choqué con una chica que iba saliendo

El impacto fue tan fuerte que termine en el suelo pero ella lucia como si nada

Tenía el cabello rojo y los ojos de un azul espectacular, casi hipnótico

Siento que ya había visto unos ojos así pero ¿donde?

Vestía con un vestido negro, con mayas a rayas, junto con unos tacones negros

—Lo siento, estoy que me hago encima no fue mi intención—le dije sobando mi trasero y levantándome

Una ráfaga de viento sopló y fue hasta ese momento que note que había dejado la chaqueta en el auto, por lo frío me abracé a mi misma

Ella dirigió su mirada a mis brazos desnudos pero lo disimulo mirándome a la cara con una sonrisa

—Oh, no te preocupes querida ¿tú no te hiciste daño?

—Pues no, estoy muy bien

—¿Viajas sola? Deberías cuidarte, estar parte de la carretera es peligrosa

—Oh no te preocupes vengo con—A la mierda el ni va a escucharme ni voy a explicarle a esta chica toda la situación—Con mi novio—Dirige su mirada a la tienda donde se encuentra Nagaru y juraría que vi sus ojos brillar

—Bueno tengan cuidado entonces, debo irme que tengas lindo día—cuando paso por mi lado para salir, note un fuerte escalofrío que me recorrió toda la columna vertebral

lo ignoro y entro al baño ya que recordé que estoy a una nada de hacerme encima

Cuando salí Naru estaba recargado en el auto esperándome

Odiaba admitirlo, pero ese maldito era tan atractivo que seguramente le dolía la cara por ser tan guapo

Cuando sus ojos se toparon con los míos no lo sé, tuve unas ganas tan tremendamente grandes de lanzarme sobre el, me entro mucho deseo de sentir sus labios, sus caricias, su...

—Carajo ¿podrías darte prisa?

Sacudí la cabeza ¿en qué mierda estaba pensado?!

Lo que tiene de guapo lo tiene de idiota

Subo y cuando él sube me extiende la mano, tenia una golosina en ella

—Supuse que tendrías hambre, ten mientras encontramos algún restaurante

Tome lo que tenía que era una especie de mini pan de chocolate

—Oh, vaya gracias

—No hay de que...—luego se inclinó para dejar un beso en mi mejilla cosa que se me hizo demasiado linda para venir de él

—Ah y también ten esto

Pero cuando volteé para ver de qué hablaba recibí un pequeño golpe en la frente de su parte

—Ah! ¿Pero qué carajo te pasa?

—Hoy he estado siendo muy lindo contigo, necesito mantener el equilibrio—Respondió encogiendo sus hombros

Atados [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora