Angel By The Wings ➰ || Alec Lightwood [#3]

017. Visita Inesperada.

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➰Angel By The Winds/Capítulo 17.

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          Katia se encontraba entrenando en una sala vacía. Ya era algo tarde por la madrugada, los pasillos del Instituto estaban casi completamente vacíos porque todos se encontraban durmiendo. Aunque había algunas excepciones, unos shadowhunters que les tocaba vigilar las computadoras por la noche por si pasaba algo grave mientras los demás dormían.

A diferencia de ellos, Katia no podía dormir. Cada vez que cerraba los ojos llegaban a su memoria aquellas imágenes que la habían atormentado durante el tiempo que estuvo encerrada en el cuerpo de Valentine. Y no sólo eso, regresaban los mismos sentimientos que cuando lo vivió.

Además de eso, la sensación de las lianas enrollándose en su cuerpo y subiendo a su cuello hasta dejarla sin aire llegaba junto a los recuerdos, haciéndole aún más imposible conciliar el sueño. Los brazos de Alexander envolviendo su cuerpo cuando se daba cuenta de que estaba despierta le transmitían calma, pero no siempre podía despertarse cada vez que ella se sentía de esa manera, por lo que optaba por hacer diferentes cosas para distraer su mente y olvidar todo eso.

En este caso, se encontraba practicando sus golpes contra una bolsa de arena, sólo para cansarse lo suficiente y volver a la cama y caer completamente rendida, sin pensar en nada. Con suerte, lograría conciliar el sueño antes de que Alec despertase.

Suspiró con frustración cuando su cuerpo no dio para más pero seguía pensando en todo aquello. Podría seguir entrenando, pero si sucediese una emergencia ella no estaría al cien por ciento y su rendimiento sería tan malo como el de un novato. Así que decidió parar, dando un último golpe al saco, esperando que con éste se liberase toda la frustración que sentía.

Salió de aquella sala en dirección a su habitación, sacaría su teléfono y sus audífonos para dar un paseo nocturno por la ciudad, esperando que eso lograse tranquilizar su mente. Abrió la puerta lentamente, intentando no despertar a Alec, quien dormía plácidamente en su lado de la cama.

Haciendo el menor ruido posible, tomó lo que había ido a buscar y salió de la habitación, colocándose los audífonos y reproduciendo la música a todo volumen. Antes de salir del Instituto, pasó por la sala de armas y tomó una daga, sólo por si las dudas. Una vez lista, salió del Instituto con las manos dentro de los bolsillos de su chaqueta.

Caminó con paso lento sin ningún rumbo en concreto, simplemente por caminar. La brisa fresca de la noche chocaba contra su rostro y movía lentamente su cabello. Una sensación de tranquilidad recorrió su cuerpo. Con Bird Set Free de Sia reproduciéndose en sus auriculares, por lo que comenzó a tararear sin importarle que alguien pudiese escucharla.

Sin darse cuenta, llegó hasta el edificio de Magnus. Sin pensarlo, entró y subió hasta el desván que el brujo le había regalado algo de tiempo atrás y que en los últimos días había estado completamente desocupado. Antes de abrir la puerta, sintió un escalofrío recorrer su espalda.

Fue entonces cuando recordó la sensación que había estado sintiendo los últimos días. Justo en ese momento sentía que alguien la estaba mirando, pero al girar la cabeza en todas las direcciones no pudo encontrar a nadie cerca. No sabía si estaba siendo paranoica o si en verdad la estaban observando, pero nunca podía encontrar a nadie.