About last night.

Capítulo 21

Hudson Downs.

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— ¿Por qué me ayudaste? —dice Hannah.

Desde que salimos de la casa de la bruja, no ha dejado de preguntarme el por qué la ayudé.

— Hannah, ya te dije el porqué. —suspiro y humo blanco sale de mi boca y nariz.

— Esa explicación no me gusta. —se cruza de brazos. — Necesito una más completa, no como las respuestas de reina de belleza. —rueda sus ojos. Paso mi mano por mi cabello rubio.

— Hannah, por favor. —me detengo y ella me imita. — ¿Por qué quieres que repita lo que ya te dije en la casa de la bruja? —coloco mis manos en mis caderas.

Baja su cabeza con un leve sonrojo. — Porque quiero escucharlo otra vez. —alza su cabeza y me sonríe.

"No podemos resistirnos a tanta belleza".

Sonrío, la tomo de las caderas y la atraigo a mí. Me inclino como si la fuera a besar, pero le susurro en el oído. — No lo escucharás de nuevo. —la suelto y me doy la vuelta para seguir con mi camino.

— ¡Oye! -sonrío y troto al sentir sus pisadas. — ¡No puedes hacerme esto! ¡Hudson!  grita de nuevo y corro.

Ambos corremos divirtiéndonos como si fuéramos niños de primaria. Corremos esquivando ramas, animales pequeños y, por primera vez, siento que mi mate me ha aceptado. También, siento que, por primera vez, me divierto como un humano, como una persona normal.

Siento un peso en mi espalda, sus brazos rodean mi cuello y sus piernas mi cintura. La sostengo de las piernas y disminuyo la velocidad. Jadeo un poco al sentir mi corazón acelerado y la falta de aire.

— Te tengo. —ríe y la imito.

— Nah, no me tienes, sólo que... —me detuvo un segundo para tomar aire. — Quise bajar la velocidad para que no te esforzaras tanto. —digo y me pega en el hombro.

— Acepta que te atrapé. —mueve sus pies como niña pequeña.

— Ya, ya. —digo. — Me atrapaste. —ríe y achina sus ojos feliz.

Camino con ella encima de mí en un silencio cómodo, con el sonido de los pájaros cantar, el sonido del agua cayendo desde un acantilado, la brisa mover los árboles y el clima ser más baja de lo normal.

— ¿Tienes frío? —pregunto.

-—Mmmh... —niega haciendo un sonido con su garganta. Asiento y sigo caminando.

"Hudson, el clima empeora".

"Darth, lo sé. Trato de caminar lo más rápido posible, ¿sí? No quiero incomodarla".

"Pero, podemos caminar y correr a lo sobrenatural".

"No". —-,mi lobo gruñe y me ignora.
— Hannah, ¿estás dormida? —no me responde. Siento que se me cae y la subo de nuevo sosteniendo sus piernas firmemente.

— Mmmh... —se mueve y casi tropiezo con una piedra que está escondida en la nieve. — Quédate quieto. —balbucea. — Transmites calor y eres muy cómodo. —su respiración se relaja de nuevo y mi corazón se acelera a una velocidad irracional. Apoya su cabeza en mi hombro.

"Me ama".

"Nos ama, Hudson". —gruñe.

— Está bien. —digo bajo casi en un susurro. — Pero ya estamos llegando, así que no te acomodes tanto. —recibo un golpe en la cabeza. — Oye. —me quejo.