⩩05

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Ekaterina POV


Eran las cuatro de la madrugada, mis amigos seguían bromeando y comiendo.

Algunos se habían ido ya que tenían sueño, sinceramente yo quería estar en mi linda cama sin levantarme hasta el día siguiente.

Alexis reía y comía gomitas, los chicos estaban desde hace una hora intentando llevársela a su casa, pero ella se negaba rotundamente ya que estaba cansada y de ser por ella se quedaría a dormir en casa de Agata.

- Ekaterina, dile algo ya estoy cansado, tengo sueño. - grito Nicolai frustado no sin antes volver a intentar convencer a Alexis. - Linda, porfavor ya vámonos.

Alexis negó con la cabeza para seguir comiendo.

Reí gracias a la divertida escena, no sabia que decirle, Alexis no me haría caso, ella era un espíritu libre y hacia lo que quería y le pareciera mejor.

- Déjenme sola, ya les dije dormiré aquí, Agata no me va a decir que no. - se cruzó de brazos observandolos a todos.

- Pero le prometimos a tu papá que te dejaríamos en tu casa, si te quedas nos quedaremos en su lista negra. - Iván la miraba también con los brazos cruzados.

- Yo no quiero estar en su lista negra. - hablo está vez Alik mirando a Iván. - Te dije que la teníamos que chantajear con gomitas.

Los chicos seguían planeando como sacar a Alexis de la casa, ya entendía porque estaban tan preocupados, el padre de Alexis era genial pero eso sí, tenías que ganarte su confianza.

Michelle me dio un vasito con agua y se sentó a mi lado, me dijo que se iría conmigo ya que los gemelos se habían quedado dormidos en la sala del lugar.

Pero yo estaba esperando a por todos para hacernos compañía.

Mason y Gavriel jugaban a las cartas mientras esperaban a que les dijera para irnos, eran bastante pacientes y eso era lo suficientemente bueno como para no aprovecharlo.

En un momento mientras los chicos discutían Alexis corrió dentro de la casa gritando que no se iría.

Es allí cuando comienza la verdadera carrera.

- ¡ALEXIS DANILOV, VUELVE AQUÍ EN ESTE INSTANTE! - eso repetía Iván, el cual corría detrás de ella intentando alcanzarla, sin éxito ya que esta se encerró en una habitación.

- Váyanse, aquí dormiré.

Me encogí de hombros ante la situación, si ella quería quedarse no podíamos impedírselo.

- Ya dejenla en paz, seguro hace pijamada con Agata. - les comenté llegando a donde estaban.

Agata rió asintiendo.

- Chicas, ustedes no entienden hicimos una promesa con el señor Danilov, no podemos fallarle. - Alik sonaba lo bastante serio para que Michelle lo observara levantando una ceja casi que riendo, Nikolai suspiro casi rendido.

- No puede ser ¿hablan en serio? - pregunto Michelle riendo ahora si.

Los chicos no se rendían, así que Igor sonrió.

- ¿Recuerdan la ventana que da a la habitación? - dijo sentándose junto a la puerta.

Ambos chicos asintieron.

Igor prosiguió sin ocultar su gran sonrisa.

- Entonces entren por allí. - dijo expectante a lo que harían.

Alik sonrió mientras que Iván se negaba.

- No, no, no y no, estás loco no haré eso. - Iván se cruzó de brazos otra vez para luego ver la sonrisa macabra de Alik. - No te atreverías.

[...]

- No puedo creer que estoy aquí, como mierda accedí a esto. - este era Iván el cual junto a Alik estaban intentando llegar a las habitación por la ventana del segundo piso.

- Eso, ánimo, ánimo, ánimo. - gritaba Michelle haciéndole de porrista para animar a los chicos.

Estos se encontraban casi llegando a la habitación y es allí cuando al fin Iván alcanzó entrar junto a Alik causando que Alexis pegara un grito.

Nosotros sólo observamos la escena con gracia, esto había sido de las cosas más locas que habían hecho, definitivamente la cosa era seria.

Escuchamos risas y al salir vimos a un Alik el cual llevaba encima de su hombro a una Alexis risueña y a un Iván tomando una botella de agua mineral.

- Hasta mañana chicos. - sonrió saludando Alexis la cual llevaba gomitas en su mano.

- Es nuestras señal. - Mason y Gavrel se levantaron para llevarnos a Michelle y a mi a casa.

- Nos vemos después. - sonreí a los chicos mientras salíamos.

El camino a casa era bastante calmado, le pedí a los chicos que se fueran a casa ya que era tarde y vivían un poco más alejados a mi, estos asintieron luego de decirnos mil tácticas por si alguien nos asaltaba entre otras tantas cosas.

Michelle y yo éramos prácticamente vecinas, vivíamos lo suficientemente cerca como para acompañarnos, era lindo ir con ella, se apreciaba tener esos minutos de silencio, era bastante silenciosa y dulce así que transmitía un aura muy pura y vivaz.

- Llegue a mi casita, nos vemos más tarde Ekii. - me dio un gran abrazo y entro a su casa mientras se despedía con una sonrisa.

Seguí mi camino a casa observando mi calle, solo quedaban dos casas más para llegar.

Fui a paso tranquilo mientras tarareaba en mi mente alguna canción de esas antiguas que escuchaba mi padre todos los domingos.

Suspire llegando al frente de mi casa, hasta que escuche un ruido bastante extraño detrás de mi, como pisadas.

Me di la vuelta algo confundida, no había nada así que seguí hasta llegar a la puerta y es así como por el reflejo de la puerta de cristal pude observar una sombra que al darse cuenta de que la había visto, desapareció como si de nada se tratase.

Entre lo más rápido que pude a casa, coloque el seguro y corrí a mi habitación algo paniqueada intentando que mi mente encontrará una razón lógica.

Seguro era la luz, si eso, la luz.

Me di una ducha exactamente a las 6 a.m. agradecia de que mis padres no estuvieran allí, ya que era lo suficientemente tarde como para llegar así como si nada sin recibir una gran charla del porque era peligroso salir y llegar tarde.

Revise mi celular luego de bastante tiempo, dándome cuenta de que tenía muchos mensajes, algunos de mis padres los cuales no dude en responder de inmediato contando que me había levantado para ir al baño y obviamente confiarle a mi prima que supiera que llegue "temprano"

También habían mensajes de Gavrel deseándome las buenas noches y otros de Mason con fotos de él leyendo ya que no tenía sueño.

Respondí a todo ahora si colocándome mi pijama, era hora de una gran y merecida siesta, necesitaba reponer energías, esta noche había estado lo bastante loca como para no dormir un poco.

Me recoste y observe mi techo aún sin poder creer todo, me sentía maravillada y algo asustada por lo de ese dia, cerré mis ojos deseando que solo fuera mi imaginación.

Si solo hubiera pensando un poco más esa noche. Tal vez las cosas ahora, no se desatarían de esta forma.

Pero como alguna vez me dijeron, la mente es poderosa y el ser humano al temor reacciona de formas extrañas.
























































Espero les guste muchísimo, no olviden compartir la historia, dejar una estrellita y un comentario que eso me alegra mucho el alma, lo juro.

Besitos llenos de helado para todos.

Te había extrañado tanto <3 aunque me digan que no eres bueno, para mi eres más más suficiente.

Intentaré volver a ti.

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