Al fin viernes. No ha sido una semana muy agotadora que digamos, ya que acaba de empezar el curso. Pero lo que más temo es la cena de esta noche, donde nuevamente me encontraré con Olivia. No sé cómo se tomará que Amy me haya confesado ese secreto que tenían. Realmente no sé si esa información me ha ayudado a aclarar mis pensamientos o si por el contrario ha provocado que tenga más preguntas todavía. Todas, claro está, sin respuesta. Aún así, espero que al menos esta vez el ambiente no sea tan tenso, con eso me conformo. Por ahora.
Me dirijo hacia el punto de encuentro donde hemos quedado las tres, y ya desde lejos veo que ambas se encuentran sentadas en uno de los bancos de Central Park, serias y distantes entre ellas. "Esto me da mala espina, si es que no debería de estar aquí ahora mismo. Sabía que esto iba a pasar", pienso.
- Hola chicas – saludo con una sonrisa, intentando darle otro rumbo a esta situación.
- ¡Hola Nicole! – dice Amy cambiando su rostro de uno serio a otro más animado. Olivia simplemente se limita a asentir con la cabeza a modo de saludo.
El camino al local donde íbamos a tomar algo fue un tanto extraño, no hablamos mucho y se notaba que había cierta tensión en el ambiente a raíz de lo que pasó la última vez.
- ¿Vamos a ir donde el otro día? – pregunta de repente Olivia.
- Sí – contesta Amy – ¿Por qué?
- Sin más – dice Olivia moviendo los hombros – Simple curiosidad, ya sabes lo que pienso al respecto.
- No empieces, por favor... Además, el otro día hablé con Nicole y ya le he contado acerca de lo que somos y...
- ¡¿Que le has contado qué?! – le interrumpe Olivia.
Efectivamente, esta es la reacción que esperaba por su parte. Y no la culpo. Pensándolo fríamente, Amy me había contado algo privado sobre ella sin su consentimiento. Si Olivia quería contármelo, era decisión suya hacerlo.
- ¿No puedes mantener la boca cerrada o qué? – continúa Olivia.
- Mira, a mí no me hablas así – dice Amy.
Durante unos segundos dudo acerca de si intervenir en la discusión o no, pero finalmente me decido a no hacerlo. Si algo había aprendido en estos años, es a no meterme en medio de cosas que no van conmigo y que no están en mis manos, ya que lo único que consigo es desprotegerme, hacerme daño a mí misma y la que sale mal parada soy yo. Cuando dos personas o más están en una situación así, es mejor que arreglen lo que tengan que solucionar entre ellas.
- No me gusta que vayan contando cosas mías por ahí – empieza a decir Olivia fríamente tras unos minutos que parecieron eternos – Y lo sabes perfectamente, pero siempre haces lo que te da la gana. Coges confianza demasiado rápido con la gente.
- ¿Perdona? – pregunta Amy ofendida – ¿Pero a qué viene eso?
- A buen entendedor, pocas palabras bastan.
Ambas siguen discutiendo, al parecer la situación se ha ido un poco de las manos y algo me hace pensar que entre las dos ocurre no sé el qué. Como no podía ser de otra manera, tras un inicio un tanto tormentoso, el resto de la noche fue igual (por no decir que incluso peor). Yo me mantenía distante, al margen todo el rato.
Una vez de vuelta a la residencia, las tres subimos en ascensor hasta nuestra planta correspondiente, con un silencio sepulcral, y salimos al pasillo.
- Muchas gracias por todo, chicas – dice Amy un poco apenada – Y siento el mal rato. Espero que la próxima vez sea mejor. Lo siento.
Tras despedirnos, veo cómo Olivia se queda mirando fijamente a Amy, que se va alejando de nosotras hasta llegar a su habitación.
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Lo que Esconden las Almas
Teen FictionTras dejar atrás su tormentoso pasado, Nicole decide empezar de cero en una nueva ciudad donde nadie le conoce y realizar sus estudios de Filosofía en la universidad de Nueva York. Pero una vez allí, conocerá a una mujer que dará un vuelco a su vida...