Capítulo 14

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Las semanas siguientes prosiguieron de forma "normal". Al menos todo lo normal que pueda considerarse el hecho de que sea una vampira y esté aprendiendo acerca de los de mi especie. Algunos días voy por las tardes al despacho de Margot para seguir con las lecciones sobre la Comunidad de Vampiros, pero no hemos vuelto a hablar de ningún otro tema que no fuese ese, ni de lo que pasó aquella noche que nos encontramos en el parque, ni nada por el estilo.

- Te veo muy pensativa - me dice Lukas mientras coge palomitas de un cuenco. Le he invitado a ver películas y series en mi residencia. Ya se ha convertido como en un hábito: los viernes por la noche él viene a la habitación de mi residencia y pedimos pizza, sushi o cualquier comida que repartan a domicilio, hacemos palomitas y ponemos alguna película o serie en la televisión mientras vamos hablando de nuestras cosas y rayadas mentales.

- Me siento rara - le respondo dando un sorbo a mi refresco - No sé, es como si estuviese conociéndome a mí misma cada vez más, ¿sabes?

- A ver, es normal, nunca dejamos de conocernos a nosotros mismos - contesta encogiéndose de hombros - Además de que eres joven, estás en la flor de la vida y te replanteas muchas cosas.

- Eso es exactamente lo que me pasa. Pero bueno, continuemos con nuestra sesión de los viernes - le respondo sonriendo y cogiendo el mando de la televisión para poner otra película, pero Lukas me detiene.

- Creo que tengo una idea mejor... - dice poniéndose en pie y extendiéndome una mano.

- Sorpréndeme - contesto levantándome con su ayuda de la cama.

- Primero cámbiate, yo voy a mi habitación y en media hora más o menos vuelvo a buscarte.

- ¿Y a dónde se supone que vamos a ir?

- No seas impaciente - me responde poniendo los ojos en blanco - Tú hazme caso.

- Voy voy... - digo empezando a sacar un conjunto del armario y ropa interior para a continuación ir a ducharme.

No sé qué diablos le habrá picado a Lukas y qué idea tendrá en mente. ¿Qué ropa se supone que tengo que ponerme para esta ocasión? Ni siquiera sé a dónde vamos a ir. Aunque la verdad es que mi ropa es bastante similar y no tengo nada para eventos especiales, suponiendo que este sea uno, pero lo dudo. Decido ponerme un jersey negro con escote de pico, con una camiseta por debajo, unos pantalones vaqueros negros "wide leg" y unas botas altas tipo militar con plataforma. Justo cuando termino de prepararme, alguien llama a la puerta. Supongo que será Lukas, así que cojo mis cosas dispuesta a salir.

- ¿Está lista, mademoiselle? - dice Lukas haciendo una reverencia mientras cierro la puerta detrás de mí.

- Yo siempre, monsieur - le respondo cogiéndole del brazo.

Nos dirigimos hacia la salida de la residencia y sigo a Lukas a donde sea que se le haya ocurrido llevarme. Paseando nos adentramos en la zona de los bares y restaurantes de la ciudad, un sitio con mucho ambiente nocturno y repleto de personas. Es lo que tiene salir un viernes por la noche.

- ¿A dónde vamos? - le pregunto tras un rato caminando por esa zona.

- Elige un sitio, el que más te guste.

- Veamos... - digo pensativa. Mira a mi alrededor en busca de algo que me llame la atención. Y ahí está, una vez más - Ya lo tengo.

- ¿Cuál?

- Ese de ahí - respondo señalando el local con el dedo.

- Así que Fangs, ¿eh?

- ¿Lo conoces? - digo mirándole sorprendida.

Lo que Esconden las AlmasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora