Después de la guerra contra Norman Nix y aceptar su nuevo destino, Severus Snape viajará lejos de Hogwarts para aprender los estatutos y obligaciones que le corresponden como nuevo príncipe heredero de los reinos de Serpent y Altaride al lado de su...
"In the Gardensof The Citadel" de David Arkenstone. Todos los derechos reservados al compositor original del soundtrack. Me pareció adecuado para ambientar este capítulo.
Al oír cómo el pregonero había anunciado a la realeza de aquel lugar, cómo un rayo penetró en mi mente una vieja conversación conocida y sentí que me trastabillaba por las escaleras de entrada:
Flashback:
"-¡No oses nombrar el apellido Prince con su nombre! ¡No después de todo lo que ha hecho! ¡Por sus acciones nefastas al unirse con Voldemort mi hermana Maia lo pagó muy caro y Eva estuvo a unos centímetros de seguir ese destino de no ser por tu padre, Christopher!....-Ni me lo menciones... él es la razón por la que no puedo mirar a Severus Snape a la cara sin odiarlo. Pero por ti y por Eva, Maia y Betsabé haré lo posible por convivir mejor con él.-"
Fin del Flashback
Cuando ví a la autora del nombre que me había rondado por la cabeza tuve que reconocer que era como ver a mi madre en un espejo. Su marido, Magnus Willis, era una copia fiel de Christopher ,con una túnica escarlata y dorada con una corona dorada fina, pero más maduro y con una barba blanca larga igual que la de Dumbledore, pero ella...¡Por Merlin! Era igualita. Tenía la piel lechosa y blanca como nácar, cabellos lacios negros y sedosos (mejor cuidados que los míos o los de mi madre) peinados en una corona de plata fina, sonrisa angelical y tierna. Lo único diferente era que poseía ojos verdes de esmeralda a diferencia de mi madre que eran negros.
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No sé cómo le hice para hacer una reverencia al rey Einar (quien vestía una graciosa túnica de oro y plata con una gran corona de oro y rubíes con un cetro de oro) y a Magnus y su esposa, después de que los Guardianes lo hicieran y toda mi familia, la esposa de Magnus al verme, me sonrió cariñosa (cómo solía hacerlo mi madre cuando le entregaba las notas del colegio) y me dió la bienvenida junto con su marido quien para mí sorpresa, me abrazó con calidez, el rey Einar anunció a todos:
-Sed bienvenido querido amigo de la lejana Hogwarts y heredero legítimo de mi corona... está noche festejaremos su entrada al reino de Altaride con un gran banquete y fiesta para todo el reino.-
La gente vitoreaba y lanzaba sus pañuelos y papeles de colores al aire pero yo me sentía conmocionado por tan caluroso recibimiento al igual que mi familia.
-Por cierto, ¿Quién es la nueva integrante?- preguntó el rey Einar curioso al ver a Kaia. -Una amiga nueva del pueblo del mar, una princesa, su Majestad, se llama Kaia. Sin ella, no habríamos podido llegar hasta aquí- dijo Septimus con ceremonia y gentileza. -En ese caso, sed bienvenida querida Kaia, espero que podamos darte unos aposentos dignos de tu linaje- Ella sonrió con dulzura y le correspondió con una reverencia. Después de un rato, mi nuevo "¿amigo y padre?" nos invitó a dar una vuelta para conocer nuestros nuevos aposentos mientras los Guardianes se ofrecieron a ayudar con el banquete de esta noche. Mientras paseaba, tuve que darle crédito a todo el inmobiliario, los jardines recordaban a los hermosos de Versalles en Francia o los Países Bajos, con especies mágicas y muggles de plantas y flores de todas las formas y colores revisando de buena salud y vigor adornadas con estatuas de sirenas, tritones, ninfas, hadas, centauros, muggles y magos de mármol con expresiones pacíficas y felices. -¿Eso es un ciervo de verdad?- preguntó Augustus emocionado y señalando tímido hacia unos rosales. -No hijo, son estatuas, aunque no es raro que unicornios, caballos voladores, hadas, knarls, diricawls, mooncalfs, gnomos y hadas lleguen por aquí- dijo Einar divertido.
