El juicio del unicornio

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En cuanto nos vimos frente a frente, Treviranus abrió mucho los ojos cómo si hubiera visto un fantasma y tenía la boca abierta, pero pronto se recuperó y se dirigió hacia mí con una especie de baculo que le servía de bastón.

-Supongo que estoy frente a frente con mi otro nieto... Severus Snape Prince...hijo de mi amada hija Eileen Prince.- su voz era tan severa y clara pero profunda y algo melódica -el ex- profesor de Pociones, ex-Jefe de la Casa Slytherin y héroe de Hogwarts... después de haberlo perdido todo debido a nefastas alianzas con Voldemort- me estremecí, solo Dumbledore y Harry Potter lo llamaban así sin ningún tipo de temor- aunque hay algunos que dicen que el amor de una mujer lo cambió... prefiero verlo bajo mis propios ojos-
-Lo verá..lo prometo...no seguiré huyendo de mis responsabilidades hacia mi familia- respondí con todo el valor que podía sentir en esos momentos tan tensos.
Ambos nos miramos unos minutos más antes de que el rey Einar y Christopher nos insistieran en ocupar nuestros lugares en la mesa. Por ser el festejado, está vez ocupe un lugar más cercano al rey Einar, al lado de mi tía Eva y de Iliana. A mi hermano Septimus le había tocado (para su mala suerte) estar al lado de Ramsés y Treviranus y a nuestra nueva amiga Kaia y a Augustus les tocó junto a los Guardianes (suertudos, o bueno, más Augustus quien entretuvo todo el desayuno a Christopher con cada pregunta de magia que se le pasaba por la cabeza). El desayuno era un digno buffet de un rey (y de un festejado, debo admitirlo). Había frutas picadas, bacon y sandwiches para picar, ricas tostadas de pan con mermeladas de frutas, hot cakes con mieles variadas, huevos preparados en mil formas desde estrellados con verduras hasta pasados por agua con guarniciones de papa condimentadas, pan de dulce y jarras llenas de jugos y leche. Después de un rato, el rey Einar quiso proponer un brindis por mí, le estaba insistiendo que no era necesario ("¡Lo último que quiero es pasar más vergüenza!") cuando unos heraldos anunciaron:

-Se precisa a su Majestad Einar para un juicio urgente-
-¿¡Cómo?! ¿Cuál es el caso?- preguntó el rey preocupado.
Entonces dos guardias con cotas de malla duras que portaban pectorales, cascos y lanzas de oro (custodiaban las entradas) abrieron las puertas del Comedor Real mostrando a una muchedumbre pequeña pero enfurecida que gritaba -¡A la horca con ella!  ¡Ladrona!- mientras dos hombres fornidos llevaban de los brazos a una mendiga que suplicaba -¡No por el Creador! ¡Perdón para mí, por mis hijos!
Entonces la muchedumbre se dirigió hacia Einar y pidieron justicia. Vi que trató de calmar los ánimos y que le explicarán el caso. Entonces vimos que de la muchedumbre surgió un comerciante, un tendedero con aire enfurecido y bastante molesto que expresó:
-¡Majestad! ¡Estaba atendiendo mi puesto de frutas y verduras como cada día que hago y de repente ví a está mendiga robando parte de mi mercancía! ¡Según la ley de Altaride si alguien es sorprendido cometiendo robo debe ser ahorcado! ¡Exijo justicia!-
Entonces la mujer mendiga habló:
-¡Nooo! ¡Piedad majestad! ¡Lo hice para mantener a mi familia!-
-¡Yo me ganó la vida de manera honrada mujer estúpida! ¡Antes preferiría cortarme las manos antes que dedicarme al robo o otra actividad funesta para mí y para mis hijos!- exclamó el tendedero furioso.
El rey Einar pidió silencio y se dirigió a la muchedumbre.
-Antes de dictar el juicio, quisiera aprovechar que los Guardianes de la Magia  y a Albert Jule, mi maestro, quienes se encuentran aquí, me ayuden a juzgar con imparcialidad...¿Que es lo que opinan?-
La muchedumbre y los Guardianes estuvieron de acuerdo. Christopher fue el primero en escuchar ambas versiones y realizó un pequeño círculo con los demás Guardianes para deliberar con Einar la mejor solución, me acerque a ellos para ayudar pero Albert Jule me apartó diciéndome:
-¡Usted todavía es un principiante! Manténgase lejos de esto-
Molesto, menee la cabeza con desaprobación..."¡A este paso, terminaremos en Pascua! ¡Esto es muy similar a los casos de robo que atendí en Hogwarts!, solo que ahora debo ser justo de verdad y no mostrar favoritismo de ningún tipo." Entonces sentí que Treviranus y mi familia miraban espectantes la escena.

Severus Snape y los Guardianes de la Magia (Lecciones de justicia e identidad)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora