Layla.
— ¿Dylan siempre ha tenido ese jodidamente ardiente trasero? — escuché que le preguntaba a Sawyer en un "susurro".Puse los ojos en blanco. ¿En serio?
— Si, West, siempre ha estado ahí — Sawyer le contestó, escuchándose algo fastidiado — Créeme, siempre ha estado.
El sonido de mi teléfono me saca de mi amada lectura She is of on the boys. Cierro mi libro no sin antes marcar dónde he quedado y me levanto para agarrar mi teléfono de la cama, veo la llamada entrante, es Maya, mi mejor amiga. Me siento en la cama y contesto.
— "Oye zanahoria, estamos llegando a tu casa así que mejor sal si no quieres que grite como loca y despierte a tus vecinos."
¿Pero qué...?
Cuelga sin dejarme siquiera responder, veo la hora en el teléfono, son las 11:35 PM.
Suspiro profundamente y me levanto para buscar un suéter y hacer lo que dice, no quiero lidiar con vecinos gruñones a esta hora. Escucho la bocina del Mustang de Maya, así que me apresuro a tomar mi teléfono, mis llaves y bajar. Mis padres no estaban en la casa por trabajo así que no tuve que escabullirme. Ya afuera de mi casa vi a Maya con un altavoz en la mano y encima del capó del auto lista para gritar, veo en el asiento del copiloto a una Grace somnolienta con su pijama de gatitos. No pude evitar sonreír.
— ¿Se puede saber que están haciendo? — les pregunto con los brazos cruzados ya una vez que estoy enfrente del Mustang.
— Dirás... Qué VAMOS a hacer. — me corrige Maya bajándose del capó y montándose en el asiento del conductor. Mi mirada viaja a Grace, mi otra mejor amiga en busca de una explicación, pero su cara solo expresa una cosa: háblame y te mato, mi mirada regresa a la rubia que me mira desesperante, — ¿Qué esperas? Mueve ese culo y sube.
Qué dulce.
Una vez en el auto, Maya arranca hacia... ¿A dónde vamos?
— ¿A dónde iremos? Dijiste que lo dirías cuando estuviéramos las tres. — le gruñe la gatita dormilona a la loca del altavoz.
— Cambie de opinión, tendrán que esperar, es una sorpresa mis niñas. — nos dice sin despegar la vista de la autopista con una sonrisa de lado, ganándose una mala mirada por parte de las dos.
— Esto no parece sorpresa, sino un secuestro, para tu información — me encojo de hombros mirando como nos estábamos alejando de la residencia.
— ¡Si! Además estaba soñando con mi hermoso y sexy Tom Holland cuando entraste por mi ventana — reclama Grace, mientras yo tenía una duda.
— ¿Por qué entraste por la ventana? — preguntó divertida al imaginar a Maya subir dos pisos hasta la habitación de Grace.
— Porque no contestaba su teléfono. — dijo como si fuera lo más normal del mundo entrar por una ventana a mitad de la noche.
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Broken dreams
Teen FictionTodos soñamos con tener la vida perfecta, pero no contamos que con ella no viene la verdadera felicidad. Layla Price es el sinónimo de perfeccion. Hermosa, inteligente, amable y divertida; todos creen que su vida es perfecta, pero no es así. Keegan...