Estado de animo: 5 minutos miserable 5 minutos feliz.
- ¿Marinett-Su madre ingreso en la habitación mientras ellas aun estaban en ese momento amoroso. Y el ambiente se deshizo mas rapido que tu mazapán.
- mam-
- ¡lamento interrumpir continúen!
Cerró la escotilla de nuevo y se escucharon sus pasos rápidos al bajar. No se había dado cuenta que Kagami ya la había bajado en su cama ya que únicamente pensaba en la posibilidad de que su queridísima madre haya mal interpretado la situación.
Mientras su pareja se hundía en la desesperación de la posibilidad de haber arruinado la buena imagen que tenia su suegra de ella con su cabeza entre sus manos que enredaban su cabello.
- debería hablar con ella después...
Dejo ese asunto de lado en su mente para agarrar las manos de la japonesa y separarlas.
- tranquila Kagami....
Bajo con sus dedos hasta su labios en una velocidad algo tortuosa que tejía el ambiente con perfección y teñía las mejillas de la esgrimista.
- ....todo va a estar bien.....
Su respiración se detuvo al ver el rostro de su novia acercarse mas hacia ella. Sus pupilas se agrandaron mirando aquellos hermosos ojos azules cerrándose.
Fue un lindo beso algo candente, manos provocativas iban por todos lados sin atreverse a quitar prendas o avanzar mas allá. Solo un beso apasionado que no buscaba mas que dar y recibir el amor de ambas.
Hasta que un sonido se escucho en la ventana del cuarto asustando momentáneamente a ambas azabaches que se separaron cuan rayo. Después de bajar su sonrojo se encaminó hacia la ventana.
- ¿quien podría-
- my prrrrinces~ good night!
- Chat?
El chico se asomaba sonriente por la ventana. Entro al cuarto para besar la mano de Marinette.
- Chat noir?...
El se detuvo para mirar a su costado solo para ver a Kagami mirándolo de una forma no tan feliz.
- señorita Tsuguri? Que hace aquí?
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Ella es mía princeso.
FanficMarinette y Adrien llevaban un año de relación, entonces Lila dijo que se había acostado con el, Adrien siendo alguien difícil de entender no lo afirmo, pero tampoco lo negó públicamente. Ahora la azabache de ojos azules tenía un corazón roto y una...