Ya es hora de admitirlo, ese chico me tiene como loco

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HARRY

Los labios de Draco sabían a manzana y a menta, y parecían encajar a la perfección con los míos. Estaba borracho, y no quería aprovecharme de ello, pero inconscientemente, casi por auto reflejo, cerré los ojos y disfruté del beso, al menos hasta que Draco cayó dormido por todo el alcohol que había en su cuerpo en ese momento.

-Mañana tendrás una buena resaca.-Susurré con los ojos abierto, estaba estupefacto, me había besado con Draco Malfoy, y me gustó. 

Arropé al rubio y me alejé de él con la cabeza hecha un lío.

Ya es hora de admitirlo, ese chico me tiene como loco.

DRACO

Al despertar creí que mi cabeza iba a estallar. Nunca suelo beber tanto, suelo ser bastante precavido respecto al alcohol, pero creo que ayer me sobrepase.

Me senté lentamente en mi cama mientras frotaba mis manos en mi rostro. De repente, los recuerdos vinieron de golpe haciendo que me sonrojase más que en toda mi vida.

-Mierda... Le besé.- Solté un pequeño grito de frustración cuando recordé algo.- Mierda... Me lo devolvió.- No me di cuenta de que mi amiga Pansy estaba en el umbral de la puerta cuidándome desde que me desperté y en ese momento me miraba como a un loco de remate. No, no me di cuenta a tiempo.- Mierda, besé al cara rajada y me gustó.

En ese momento oí una exclamación, y al verla ahí abrí los ojos, sorprendido y aterrado por lo que mi amiga haría.

-¡BLAISE!- Grito- ¡ME DEBES VEINTE GALEONES!- Corrió escaleras abajo mientras yo la perseguí gritando, tenía una resaca que no podía con ella, pero la agarré de los pelos y comenzamos a pelear hasta que llegó Blaise y nos separó, no sin antes tener un ataque de risa y gritarme un "dale con la silla Malfoy". Mis amigos son idiotas, los amo, pero son idiotas.

Al entrar al Gran Comedor para el desayuno, el trío de oro se giró a vernos, Hermione y Pansy se saludaron al igual que Ron y Blaise, pero Harry y yo no pudimos evitar desviar la mirada, avergonzados.

-¿Tienes pensado hablar con el?- Me preguntó mi amiga comiendo una tostada. Yo asentí, intentando ordenar mis pensamientos, pero el ruido de todos los estudiantes no me ayudaban, y a mi resaca tampoco. Compartimos algunas palabras los tres durante el desayuno y luego cada uno se fue por su camino, ya que era domingo y no tenían clase.

Yo andaba a por los pasillos, rumbo a la Sala de los Menesteres, hasta que alguien me agarró del brazo. Al girarme me encontré una mirada de ojos verdes intensa clavada en mi.

-Tenemos que hablar.- Dijo Harry.

HARRY

Arrastré a Draco por los pasillos, agradeciendo que estaban desiertos, y entramos a la Sala de los Menesteres para no ser interrumpidos y poder hablar en total privacidad. Nos acomodamos en unos sofás que habían aparecido y esperó a que hablara.

DRACO

-¿Recuerdas lo qué pasó ayer?- Empezó a hablar.

-Te besé, lo siento, estaba borracho. No quería hacerlo, tampoco...-Comencé a disculparme.

-Draco- intentó interrumpirme, sin éxito.

-¡No! Espera, por favor, no quiero que esto afecte a nuestra amistad, se que tu eres hetero, y puede que me gustes, ¡no estoy diciendo que me gustes!- Genial, la había cagado, pero ya no había vuelta atrás.

-Draco- volvió a intentar interrumpirme.

-¡Bueno sí! ¡Estoy loco por ti! ¿Contento? Ay no, no quería decir eso.- Me insulté de mil formas distintas en mi cabeza.

-Draco- tercer intento.

-Lo siento, lo siento, lo siento...

-¡Draco!- En ese momento alcé tímidamente la cabeza para mirarle a los ojos, ¿en qué estaba pensando? Me acababa de declarar de una manera estúpida. Esperé que me insultase de veinte formas distintas y que no volviese a dirigirme la mirada, por eso, cuando me agarró del cuello para besarme, no pude evitar sorprenderme.- Tu también me tienes como loco, idiota.

Solo bastó esa frase para que volviésemos a fundirnos en un beso.


Besties, se que el capítulo está corto, pero como estoy de vacaciones podré actualizar a menudo >:D


Prometí no enamorarme {Drarry}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora