◇ Oh My God - Lisrene ◇

IV

───── ◎  • ❖ • ◎ ─────

JooHyun terminó de entrar al bar, sintiéndose un poco abrumada a causa del ambiente.

Ya se había arrepentido.

El fin de semana había llegado y después de la llegada de Yerim, la chica había querido salir a algún lado para celebrar su regreso, además de tener otra cosa que evitó decirle en su momento.

Estuvo frente a la entrada durante un rato hasta que finalmente logró divisar la mesa donde todas las chicas se encontraban ahí.

Se acercó entre zig zags hasta llegar y se sentó de un golpe gracias al empujón de algún desconocido.

JooHyun, respira.

— ¡Unnie, no pensé que vendrías!

—Me amenzaste, Yerim. — Dijo entre risas.

—Shhhh. — Colocó el dedo índice en el medio de sus labios en un acto divertido. —Vamos, disfruta, pide lo que quieras que lo llevo a la cuenta de SooYoung.

— ¡¿Qué?! ¿Cómo que a mi cuenta? — Exclamó la mencionada, causando que un pequeña risa saliera por parte de la mayor.

— Cariño, lo mismo que puede gastar Yer aquí, lo gastas tú en cualquier tienda. — Roseanne sonrió divertida y depositó un tierno beso en la mejilla de su novia, quien había colocado su ceño fruncido junto a un puchero.

—Pero es porque es para mi, para ti o para nosotras, yo no quiero gastar mi dinero en una borracha.

— ¿Disculpa? Park SooYoung, he estado sobria durante meses y ahora que puedo darme el gusto, te quejas, te está pegando la vejez. — La castaña sacó la lengua, a lo cual la otra se ofendió.

—La misma vejez que pasarás tú. — Se defendió.

Después de todo, no podía negar que extrañaba aquello.

Mantuvo su sonrisa y dirigió su atención a la menor, quien la había vuelto a ver.

—Dentro de un rato vendrá Jen y SeulGi, puede que venga también NaYeon, pero no estoy segura, ahora espérame aquí que traeré algo de comer, mi estómago requiere de alimento.

—Pase con cuidado, bella dama. — Respondió con ironía y a su vez, entre risas.

Aunque se sentía un poco fuera de lugar por el hecho de que ya no estaba acostumbrada a estar en ambientes de esa manera, se obligaba a sí misma el intentar disfrutar de esa noche, tanto por Yerim como por ella.

Siguió charlando con la pareja deslumbrante que formaba Roseanne y SooYoung, llenándose de alivio al saber que al menos no era la única cuerda que quería mantenerse sobria por el resto de la noche.

Otros cuantos minutos después, los brazos de Jennie rodeaban su delgado cuerpo.

—No pensé verte aquí, Joo.

—Yo tampoco lo veía. — Se aferró un poco más al abrazo. —Me alegra que estés aquí. — La castaña respondió con una sonrisa y luego de saludar a las demás, fue un busca de su chica.

—Entonces, nosotras estamos aquí reunidas, ¿pero para qué?

—Que te lo diga Yer, nosotras estábamos de paso, Joo fue amenazada, es normal que Jen quiera verla y tú, pues llegaste también... La verdad es que no sé. — Dijo Roseanne, a lo cual SeulGi asintió convencida de su respuesta.

Y casi al instante, las dos chicas faltantes habían llegado con dos bandejas llenas de aperitivos, dejándolas sobre la mesa redonda y sentándose nuevamente en sus lugares.