I

938 97 40
                                    

───── ◎  • ❖ • ◎ ─────

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

───── ◎  • ❖ • ◎ ─────

— ¿Por qué debería estar contigo?

Lalisa mostró una sonrisa ladeada, haciendo que JooHyun frunciera su ceño, que si no fuese por su atrevimiento, sin duda hubiese terminado con la corta distancia entre sus labios. Ni siquiera sabía por qué se mantenía tan a la defensiva, si sabía que podía tenerla a su lado en cualquier momento, sin embargo, le parecía adictivo que la linda tailandesa jugara con su fuerza de voluntad.

Y le gustaba saber que podía con aquella tentación.

Al final, la pelinegra también terminaba siendo torturada.

─Te gusto tanto como tu a mí y sabes que no soy igual a otras personas.

La mayor soltó una risa vacilante.

─ ¿En serio dijiste algo así? Lalisa, pensé que eras más creativa.

─Sabes que no soy de palabras. ─ Su tono divertido pasó a estar serio y se alejó un poco. ─Pero me destaco en demostrarlo.

JooHyun cruzó sus brazos, pensando si era bueno darle una oportunidad.

Observó detenidamente el rostro de la chica.

¿En que momento empezó a tener tantos deseos de besarla hasta quedarse sin aliento?

¿Cuanto tiempo serían capaces de seguir soportando todo ese juego?

Finalmente suspiró, dándose la vuelta para buscar las últimas cosas que tenía sobre su escritorio y las guardó en su cartera.

─No quiero salir con una especie de fuckgirl, ambas estamos lo suficientemente mayores como para andar en ese tipo de situaciones. ─ Se acercó a la tailandesa, nuevamente dejando solo unos centímetros entre sus cuerpos. ─Demuéstrame que no estás jugando conmigo, porque no te mentiré, me gustas, pero ni loca me vuelvo a meter con alguien que solo me usará, ten buenas noches.

Le dedicó una sonrisa inocente y se acercó a la puerta para poder abrirla, sin embargo, Lalisa evitó que lo hiciera.

─ ¿Por qué te usaría? Así como quiero disfrutar estar una noche contigo, me gustaría que fueras la persona a quien vea apenas despierte.

─Lalisa...No seas tan cliché, menos palabras, más acciones.

Dejó un corto beso en su mejilla, para acto seguido, salir de la oficina, dejando a una pobre chica pelinegra frustrada.

Pasó sus manos por su melena y soltó un bufido.

Anhelaba el día en que JooHyun dejara a un lado su inseguridad. No le juzgaba, ser una exitosa gerente y posible presidenta de una empresa bien vista, podría traer la peor manada de personas, pero por eso mismo, quería demostrarle que ella no la quería por el dinero, mucho menos por imagen, para nada, Lalisa solo quería borrar esos malos recuerdos de la mejor forma que se le ocurría. Amándola.

Había estado durante años intentando formar una amistad, pero en algún punto, cuando miraba a los ojos oscuros de la mayor, solo sentía el impulso de llevarla lejos de la oficina y crear un mundo donde solo ellas dos existieran.

Le removía cada sentimiento.

El corazón se sobresaltaba siempre que se acercaba, siempre que sus pieles chocaban.

Ya le hubiese gustado borrar esa imagen que tenía de JooHyun, de solo verla y decir que es la amiga más genial que ha tenido, porque de esa forma, ninguna tendría que aguantar algo que se pudo haber hecho hace bastante tiempo.

Incluso estuvo durante semanas yendo a diferentes bares, intentando conseguir a alguien que la hiciera olvidar, cosa que evidentemente no pasó.

¿A caso había algo en ella que a JooHyun no le gustaba?

Preguntarse eso era estúpido, al fin y al cabo, la mayor le dejó claro que le gustaba.

Pero no pareciera.

Tenía que hacer algo y no se permitiría dejarlo pasar.

Salió de la oficina, yendo rápidamente al estacionamiento donde estaba su carro, subiéndose a este y manejó hasta llegar a su casa.

Se colocó algo más cómodo y se tiró sobre su cama, viendo al techo en busca de posibles respuestas.

¿Cómo podía ganar la confianza de JooHyun?

¿Cómo haría para hacerle entender que no es un maldito juego?

"Me gustas". ¿Pero en qué modo?

Por otro lado, la otra chica estaba viendo con molestia a su amiga, quien expresaba indiferencia por toda la situación que le había contado.

─Kang SeulGi, ¿podrías tener la linda capacidad de responderme?

─Yo ya te he dicho muchas veces lo que debes hacer, no pienso hacerlo otra vez y si quieres escuchar lo que quieres, no busques a JiSoo o a Jennie, porque no lo harán.

─ ¡No me has dicho nada!

La castaña suelta un quejido.

─Agradece que no eres una marioneta porque ya te hubiese controlado la existencia. ¿Cuanto más vas a alargar las cosas? Ya ha pasado mucho tiempo o hasta más desde que te separaste de SeungWan, fue un total desastre, pero conoces a Lalisa y ella a ti mejor que a nadie. JooHyun, ella dirá que podría esperar toda una vida por ti, pero el día que ella se canse, tú vas a querer estarlo y no podrás.

─ ¿Crees que lo he superado?

La expresión de SeulGi se ablandó al ver los ojos brillantes de la pelinegra. Suspiró.

─Sé que aún duele, pero debes permitirte conocer gente, debes dejar a un lado toda esa defensa innecesaria, porque hasta a mi me ha afectado. Lisa no te haría nada malo, ella no ve tu dinero, ni la empresa, ni tu casa, ni carro, nada; ella te ve y a través de ti, ha pasado días y días intentando lograr al...

─Aún no entiendes. ─ Le interrumpió y se formó un largo silencio.

Kang había sido su amiga desde la infancia, pero habían veces que no parecía entender la situación o al menos, era lo que se obligaba a entender.

Aún así, JooHyun no paraba de pensar en lo que había dicho y le molestaba profundamente que tuviese razón.

Habían pasado un poco más de dos años o tal vez más, donde habían jugado sucio con sus sentimiento y economía. Algo que le había devastado en todo sentido.

Sí, quería dejar que la tailandesa hiciera consigo lo que ella quisiera, pero su futuro valía más que una noche o una posible relación que terminase en un escándalo.

─El trabajo te ha consumido entera y no paras de alejarte de todos solo por un miedo que aún no aprendes a manejar. Lisa te quiere y yo... Quiero verte feliz otra vez.

Escuchó el golpe de la puerta al cerrar y tomó aire para mantener la poca calma que le quedaba.

Seguiría protegiéndose hasta que sus ojos vean lo que realmente significaba ser sincera.

Hasta que realmente pueda besar sin las ataduras de un terrible pasado.

───── ◎  • ❖ • ◎ ─────









!!!! ♡ !!!!

Eeeeeh, nueva historia. ♡
¿Que tal el primer capítulo? ¿Que piensan?

Como dije antes, espero que les guste esta historia y puedan disfrutarla como yo disfruto escribiendola. ♡

◇ Oh My God - Lisrene ◇Donde viven las historias. Descúbrelo ahora