FBI

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La mafia de Los Gambino había robado un banco, estaban en una persecución dónde Toni Gambino estaba hasta el final procurando que ninguno se quedará atrás.

Todo estaba relativamente bien hasta que comenzó a ir relativamente mal, pues el tipo del bloqueo desapareció dejando a la mafia a merced de la policía, por lo cual Toni tomo una de las decisiones más duras que el equipo no esperaba escuchar.

-Voy a hacer tapón en la puerta, me quedó aquí.

-¿¡Que dices!? -pregunto exaltado Hai bajando del vehículo y subiendo al otro para huir-.

-Me quedó, me quedo aquí.

-¿Cómo que te quedas? ¡No te quedes!

Hai y los demás subieron rápido a los autos y se fueron volando, llegaron a escuchar unos disparos, sin duda él rubio les había dado unos buenos segundos para escapar, sin embargo, ya estaban muy lejos como para escuchar lo que pasaba....

Toni disparaba a los policías, era momento de escaparse, sin embargo un policía le disparo varias veces soltando un grito desgarrador y callendo al suelo adolorido derramando algunas lágrimas al no poder tolerar aquel terrible dolor.

Los policías corrieron a su lado y lo subieron al patrulla dispuesto a llevarlo al hospital, la verdad que se sentían un poco mal con el italiano, a pesar de disparar no le dió a ninguno, simplemente disparo para asustarlos, lastimosamente si se asustaron y aquel miedo provocó que le dispararán.

Llegaron hasta el hospital y lo llevaron a urgencias donde lo socorrieron rápidamente. Los agentes no dejaban de pensar en Toni, presenciaron como creo un tapón con un vehículo de mierda para darle tiempo a sus amigos para escapar. Sabían perfectamente quien era al que tenían, Toni Gambino, un jefe de mafia ¿Porque coño una autoridad máxima de un grupo se sacrificaría? Poco de lo que conocían al italiano era que tenía un gran corazón, ahora solo lo confirmaban.

Pasaron algunas horas en las que Greco se quedó esperando respuestas de los médicos, no hacían más que decirle que estaba delicado así que informo a Salinas, quien de "casualidad" le pregunto si sabía dónde estaba el Gambino.

Greco estaba parado frente a la puerta bastante preocupado, no conocía demaciado al chico, pero estaba preocupado, algo que no había notado, es que alguien se sentó en una de las sillas tras él, en sus manos llevaba un café el cual bebía sin dejar de ver al comisario preocupado.

-Él estará bien -Greco volteó sorprendido viendo a Gustabo García sentado tranquilamente- te preocupas demaciado por un narcotraficante.

-Es bastante leal, le tengo respeto. ¿Que haces aquí?

-El CNI infiltró a Volkov con los Gambino, teniendo los informes vine de inmediato, Horacio vendrá en unos días.

-¿Me estás diciendo que el FBI ya está en esto?

-Efectivamente. ¿Que te han dicho?

-Esta muy grave, es todo.

-Bien, en ese caso pídele a tus hombres que se retiren, solo te permito a ti quedarte hasta que esté estable, la policía ya no tiene nada que ver en esto. Lamento tener que ser nosotros quienes les quitemos el caso, pero son órdenes de muy arriba.

-Lo entiendo Gustabo, ya me lo veía venir.

Pasaron varias horas bastante tensas, la salud del rubio era muy delicada pero lograron estabilizarlo, Salinas llegó apenas unos minutos antes de que el doctor les informará el estado del chico.

-El señor Gambino está estable y fuera de peligro.

Salinas y Greco volvieron a respirar, esas eran muy buenas noticias, sin embargo, los alarmó el hecho de que el doctor no tenía buena cara a pesar de que dijo que Toni estaba "bien".

-Desgraciadamente le dispararon en un punto muy vital y.... tiene incapacidad en las piernas.

Salinas se sentía desfallecer con aquella noticia, Greco solo sintió pena por el ojiazul, no era algo que le deseara a alguien, así que solo se fue de ahí dejando al abogado solo con el agente.

-¿Puede recibir visitas? -pregunto Gustabo fríamente y el doctor solo afirmó-.

-¡Debo entrar! -Salinas estaba a nada de entrar a la habitación pero Gustabo lo detuvo- ¡Tengo que hablar con él! ¿¡Quien eres!?

-Gustabo García, agente del FBI -le muestra su identificación-.

-¿FBI? ¿García? -decidio olvidar el apellido y centrarse- ¡Soy su abogado!

-El señor Gambino no necesita un abogado, si no, un milagro.

Gustabo entro a la habitación dejando al abogado con la palabra en la boca, se acercó a la camilla de Toni quien se veía algo confundido y que no terminaba de entender su entorno.

-¿Dónde estoy? -pregunto Toni con voz débil y agotada-.

-Esta en el hospital señor Gambino, su atraco al banco salió mal y termino aquí -le dijo Gustabo quien se sentó en una silla a su lado-.

-Me duele todo...

-Si, acabo en un tiroteo, así que... -me se muerde el labio viendo cómo decirle su estado- no podrá.... -suspira- lo mejor es que descanse y no haga esfuerzos, se ve que la pasaste mal y debes recuperarte.

-¿Eres el doctor?

-No, soy Gustabo García, agente del FBI. Lamento decirte que estás en la mierda, no pienses en fianzas, ni pollas.

-Garcia.... -repite el apellido en voz baja y decide no darle importancia-. Sabía que era una posibilidad, pero no creí que llamaríamos la atención del FBI.

-Felicidades, lo conseguiste. Tengo sumo respeto por la familia, así que deberías decirle a tu abogado que tu hermanito no debe acercarse al hospital, se que debe saber tú estado, pero si mi compañero lo llega a ver no podré cubrirlo. Te estoy ayudando.

—No lo entiendo pero ¿Estaré bien?

—Si, solo tendrá que cumplir una sentencia en federal, técnicamente estará ahí toda su vida, pero estará seguro, no se preocupe, no lo sentenciaran a muerte.

—Si mi padre se entera que terminaré en federal esa es mi sentencia de muerte, si no me matan ustedes, él lo hará.

—No debe preocuparse por eso, el FBI lo mantendrá a salvó. Desde ahora no le quitaremos el ojo de encima, mientras no intente escapar de federal todo estará bien para usted.

—D~de acuerdo...

//3RR0R// [Gustoni]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora