El día se había puesto frío, parecía una tarde de finales de abril en vez de un domingo de Junio.
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Terminé de vestirme y me apresuré a ir al baño para tapar todos los chupetones.
Primero, me di una crema hidratante para que las marcas me durasen menos, y luego una base verde que me ayudaría a disimular un poco la rojez de las marcas. Terminé combinando con mi corrector y base y sonreí complacida al ver que no se notaba nada.
Mi padre, James, entro cuando estaba terminando de maquillarme.
-Hola princesa - dijo besando mi frente.
-Hola papi, ¿que tal? - pregunté abrazandole.
-Muy bien hermosa - dijo y sonreí. - ¿Ya estas lista? - pregunto y yo asentí. - Bien, pues vámonos - dijo y yo asentí siguiéndole.
Abrace a mi madre y ella sonrió.
-Estas preciosa - dijo y yo sonreí besando la mejilla de mi madre.
-Tu igual ¿donde iremos a comer? - le pregunte.
-Tus padres quieren comer comida chatarra, así que estamos decidiendo - me dijo y yo asentí.
-¿Puedo conducir la furgo? - pregunté y mi madre me dio las llaves.
-Iremos a Good Measure - dijo Killian.
-Vamos - dije y me subí a la furgoneta.
-¿Quien te ha dado permiso para conducir? - me pregunto Ian.
-Mi madre, tu mujer - le dije con una sonrisa.
El restaurante no tenía aparca coches pero tenía un parking subterráneo privado, Ian me dio una tarjeta para que pasara por el lector. Se la di de vuelta y aparque. Subimos en el ascensor hacia el restaurante.
Yo pedí una hamburguesa con queso de cabra y cebolla caramelizada y unas patatas con salsa de búfalo. En la comida hablamos de varias cosas, como una familia normal y corriente.
Luego dimos un paseo por la ciudad, vimos a Adam y a mi hermano Jack de la mano dando un paseo y sonreí. Vi a tres de mis chicos y me sonroje un poco.
-Kim, tus padres ya les conocen, pero tu no, ellos son Kevin, Antonio y Jay, chicos ella es mi cuñada - dijo Adam.
-Un placer - dije y nos dimos dos besos.
-¿Por qué no venís a casa a merendar? - pregunto Brian.
-Claro, porque no - dijo mi hermano Jack.
-Aunque no se si llegaremos vivos, conduce tu hermana la furgo - dijo Killian y yo lo mire mal.
-Conduzco mejor que tu y lo sabes - le dije.
-Vamos - dijo Jack y yo asentí.
Ya estábamos en la furgoneta y me puse rumbo a casa.
-Vete despacio, que ni Adam ni tu hermano están conduciendo, va conduciendo el chico de los ojos bonitos - me dijo Nick y yo asentí.
