Si le preguntarán a Cancer cual es su peor miedo el respondería: le tengo miedo al pasado. Las personas pensarían cosas absurdas, que su miedo es patético, ¿Quién le puede tener miedo al pasado? Si ya pasó. Pero si tan solo hubiesen vivido la mitad de cosas del chico, los demás responderían lo mismo. Tener que ir al psiquiatra todos los días, escuchar las charlas incomprensibles de aquel doctor. Tener que soportar medicamentos que lo dejaban prácticamente inconciente en su cama.
¿Acaso si tenía una maldición en realidad?. Delante de él en las afueras de su habitación, se encuentra los cuerpos de una mujer y un hombre que parece que en vida eran pareja. Sus manos están entrelazadas sosteniendo un cartel escrito con sangre. ¿En serio los HADES fueron sus profesores?. Delante de aquella escena no solo se encontraba Cáncer a punto de volver a sus ataques de pánico.
También hay un niño que parece de unos diez años. Su cabello es castaño con ondulaciones y algo despeinado, sus ojos no se podían ver por culpa de que se tapa su rostro con sus manos intenta do ocultar las lágrimas mientras lloraba la muerte de los cadáveres.
Cancer luchó para no entrar en pánico y fue a por el niño apartandolo de esa horrible vista. Se arrodilló y abrazo al chico contra sus pecho. Logró ver el cartel mientras abrazaba al chico.
"El primero en desaparecer será quién hijos tenga
HADES"
Cancer miro confundido el cartel, ¿Hijos?, Que el supiera ninguno tenía hijos. Aún son lo suficientemente jovenes como para pensar en eso. Cargó al niño aún este lloraba desconsoladamente pero no se apartaba del reconfortante abrazo de Cáncer. Entró a la habitación y vio a Virgo. Virgo miro a Cancer algo confundido, no sabía si por el niño o el rostro de confusión del chico.
– ¿Que pasó Can?- pregunta Virgo aún mirando al niño que traía el pelirrojo en sus brazos.
– ¿Tienes algún hijo Vir?- Cáncer había dejado su pánico a un lado aún con esa pregunta en la cabeza.
– No...¿Que pasó Cancer? Me estas asustando.
– Los HADES vinieron, nos dejaron los cuerpos de los padres del niño afuera...tenían un cartel de ellos...intentarán desacerse primero de quien tenga un hijo.
–¿Hijo?, Pero si aquí ninguno tiene hijo.
– Es lo que pienso.
– Mamá...papá...- se escuchó las palabras del niño a duras penas, seguí llorando desconsoladamente.
– ¿Que hacemos con el niño?- pregunta Virgo. Él sabía muy bien que no tenía paciencia para los niños y no se creía en la suficiente capacidad de también cargar del cuidado de un niño y esperaba que Cancer no dijera que se lo debían quedar.
– No podemos dejarlo, el niño ahora está en el mismo peligro que nostros y no confío en las autoridades por mucho que nos estén "protegido".
– Cáncer no quiero que digas que nos lo vamos a quedar.
– Nostros no. Pero alguno de los chicos si podrán- Cáncer baja al niño y se arrodilla delante de él. El niño se destapó la cara y abrió sus ojos, que son de un tono gris plata– ¿Como te llamas?.
– Luke...Luke Boldway- susurro el niño aún con sus ojos llenos de lágrimas y a penas podía hablar.
– Luke, yo me llamo Cancer. Se que la muerte de tus padres es algo que no superarás con sencillez, pero tienes que ser un niño fuerte y confiar en nosotros- Luke solo asentía a las palabras de pelirrojo– Ahora vamos a ir con mis amigos y te quedarás con uno de ellos, ya que mi compañero y yo no tenemos condiciones.
Luke seguía llorando pero más contratadamente. Seguía siendo un hecho traumático ver a tus padres muertos, pero el niño muy bien sabía que no podía hacer nada por ellos, que solo le quedaba sufrir por esa perdida eternamente.
Se hizo una reunión en la oficina de Ofiuco. Más parecía un déjà vu el volver a estar todos sentados en una mesa para hablar y votar sobre las decisiones. En la punta de la mesa como costumbre se encuentra Capricornio, aunque él no se considera digno de que lo sigan conciderando el líder.
– ¿Que hacemos con el crío?- cuestionó Leo mirando a Luke quién tiene la mirada agachada esperando la decisión de los hombres.
– ¿Y si quién se quede con el niño será el primero en morir?- pregunta Libra observando el cartel que habían dejado los HADES.
– No lo creo. En la nota se refieren a hijo no a adopción- le explicó Acuario como si fuese algo evidente.
– Yo me quedo con el niño- dijo Tauro sorprendiendo a todos, principalmente a su novio– Ningún niño debe de pasar por lo que ha pasado él.
– Tau cariño, ¿No quieres pensarlo un poco más?- intentó convercerlo Géminis con una sonrisa forzada.
– No, quiero ayudar al crió y no me importara que me abandones. Está dicho y está hecho.
– Entonces el otro punto a aclarar- siguió hablan Capricornio antes de que comenzara una pelea matrimonial– ¿Alguno de nosotros tiene hijos?.
La sala quedó en un silencio absoluto. Todos se miraban la cara esperando una respuesta. Escorpio levantó la mano, no tenía el valor de decir la palabra yo. Sagitario miro a el alacrán, no sabia como describir cómo se siente. Preocupado, porque será el primero al que quieren matar. Dolido por no haberle dicho de aquel hijo. Traicionado porque quizás solo lo haya utilizado. No sabría cómo describir sus emociones exactamente.
– Entonces. Ofiuco pon más seguridad cerca de la habitación de Escorpio. Escorpio sabes que no puedes salir solo o dejar a Sagitario solo. No sabemos exactamente si va a por tí directamente o atacarán a el compañero. Ya hemos lideado con HADES y son muy difíciles de entender. Los demás eviten salir de sus habitaciones- concluyó Capricornio. Esperaba esta vez estar tomando las decisiones correctas.
Los chicos como de costumbre solo asintieron y se retiraron para hacerle caso a las órdenes de Capricornio confiando en él.
Sagitario al contrario del primer iba en silencio mirando al frente intentando ignorar la precensia de Escorpio, quién para su defecto intentaba hablarle.
– Sagitario, ¿Quieres dejar de hacer la ley del hielo?- se escuchó la voz de Escorpio cansado de que el arquero lo ignorara.
– Yo no estoy haciendo ninguna ley del hielo.
– Me estás ignorando desde que salimos de la sala esa.
– Estoy pensando que no es lo mismo.
– ¿Es por lo de que tengo hijo?
Sagitario frena en seco al escuchar esas palabras. ¿Cuántas veces Escorpio le iba desilusionar?. Al final si debía de haberse quedado con Capricornio, aunque el tampoco estuvo cuando despertó. ¿Acaso alguien se preocupaba por él?. Escorpio lo miro sorprendido y se le acerca limpiándole la mejilla. Sagitario retrocedió tocándose su mejilla notando que están húmedas. Está llorando. Al final sus emociones explotaron en un llanto que no quería terminar.
– No llores, déjame explicar las cosas- suplicó Escorpio, ahora él maldecía a esos HADES más de lo que hacía en el pasado– Sagitario eh cometido muchos errores en mi pasado, entre ellos fue dejarte en el hospital y seguir la petición de mi padre. Vayamos a la habitación y te explico todo...
– ¿Cuántas veces me desilusionaras?¿Cuántas veces me harás desear ser atrapado por los HADES y que me maten?. Escorpio padezco de depresión, tengo que tomar pastillas por estrés
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Misterio en Dubai
Teen Fiction¿Acaso tenían algún tipo de maldición?, esa es la pregunta que se repetían los chicos una y otra vez sin creer que volverían a pasar lo mismo de su adolescencia. Pero con la diferencia de que sería en un hotel bajo del mar. No eran los mismo o quizá...