CAPÍTULO 19: De vuelta en casa.

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Estamos en la sala de urgencias de un hospital enorme, no puedo ni si quiera mirar a Harry. Estoy enojada, decepcionada, triste y a la vez preocupada por Rachel y su bebé.

- Ali... - dice Harry acercándose a mí.

- ¿Familaires de Rachel Mitz? - dice un doctor saliendo por una puerta doble.

- Sí, aquí. - responden Dave y Harry al instante.

- La señorita Mitz está fuera de peligro aunque el producto tiene solo un cincuenta por cierto de probabilidades de seguir con vida.

- ¿El producto? - cuestiona Dave.

- El bebé. - dice el doctor y todos abren los ojos como plato ya que ellos no habían escuchado esa parte.

- Necesitamos tenerla en observación porque lo que acaba de pasar fue una amenaza de aborto, si la dejamos ir podría tener ahora si un aborto y su vida también estaría en riesgo.

- Está bien, doctor. - responde Harry.

- Cualquier cosa se les va a avisar, con permiso. - dice el doctor y se va.

- Monsse, ¿podemos irnos? - digo y ella asiente.

- Buah, ¿ese bebé es tuyo Dave? - cuestiona Imanol y yo siento que mete una daga en mi corazón.

- No, es tú sobrino, ¿o no, Harry? - hablo tratando de que mi voz no se quiebre y mirando con rencor a Harry.

- Ali... - dice pero yo comienzo a caminar para salir de ahí.

Harry me sigue mientras dice mi nombre pero yo no me detengo, lo último que quiero es ver su cara.

- Allison. - vuelve a decir pero esta vez ya estamos fuera del hospital.

- ¡¿QUÉ?! ¿QUÉ CARAJOS QUIERES HARRY?

- Ali, te tengo que explicar.

- ¿QUÉ MIERDA ME VAS A EXPLICAR? ¿QUÉ ME MENTISTE? ¿QUÉ TE LA COGISTE HACE DOS MESES PERO QUE NO LO RECORDABAS? - grito valiéndome que la gente me mire.

- Ali...

- Deja de decir mi nombre Harryson, no quiero verte, no quiero escucharte, te quiero lejos de mí. - comienzo a llorar.

- No te mentí, te lo juro que no lo hice. No entiendo porque Rachel...

- Sí, porque ella es la culpable, ¿no? ¿Por qué siempre culpas a los demás cuando la cagas?

- Escúchame carajo, las cosas no son como crees.

- ¿Entonces, como son?

- Allison, ese hijo no es mío, te lo juro.

- ¿Te puedo pedir algo? - doy unos pasos hacia él y lo apunto con el dedo. - Desaparece de mi vida, no quiero volver a verte. - digo y sin más camino hacia la calle, no sé hacia dónde debo ir, hasta que siento la mano de Monsse que me toma del brazo y me lleva hasta un auto.

- Ali. - dice mirandome.

- Soy una estúpida, carajo, soy una estúpida. - digo apretando los dientes y llorando sin parar.

- Te voy a llevar a casa. - dice comenzando a manejar.

Durante el camino sigo llorando hasta que creo no salen más lágrimas y solo miro fijamente a través de la ventanilla del auto.

Llegamos a las cabañas y lo único que hago es ir a la mía y tomar una ducha. Ducha en la cual no puedo dejar de llorar ni un instante.

Estoy tan enojada conmigo por haberle creído, por ser tan estúpida y confiar en él a pesar de lo que ya había pasado.

MATRIMONIO POR CONTRATO 2: Caminos entrelazados.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora