Enamorada de mi dentista - Supercorp AU (Feat. LittleLuthorr)

Capitulo 9

*Kara Pov.*

Mi hermana esta viva. Era el mejor de los regalos. Me quedé hasta tarde con Lena, Nia y Brainy pasando un buen rato y sonriendo. Al día siguiente trabajé con una gran sonrisa en mi rostro. Para cuando terminé con mi último paciente, lo acompañe hasta la puerta y me llevé la sorpresa de ver a Lena sentada en la sala de espera.

—¡Hola! —Dije y luego miré a Eve—. Dale fecha para el mes que viene. ¿Quieres?

—Por supuesto. —Respondió Eve y le hice un gesto a Lena para que entrara al consultorio.

—¿Ya terminaste por hoy? —Me preguntó y le asentí.

—Sí, ya terminé. Ven a darme un beso.

Sonrió y se acercó para darme un pequeño beso que resonó por el consultorio, haciéndome sonreír.

—¿Entonces iremos a McDonald's?

—¡Por supuesto! Me muero de hambre.

Terminé de guardar las cosas me ayudó a guardar algunas para luego esperar a que tomara mis cosas y me quitara la bata. Una vez lista salí para ver qué Eve estaba terminando de apagar la computadora.

—Ve tranquila, Eve. Yo cierro.

Me asintió y tomó sus cosas pero nos miró riéndose.

—Nunca me he atrevido a preguntar. —Dijo Eve— ¿Pero ustedes están juntas?

Lena sonrió y me miró. Asentí y jugué con un mechón de pelo de Lena que colgaba a un lado.

—Esta señorita aquí es oficialmente mi novia.

—¿De verdad? —Dijo sonriendo y Lena asintió—. Pues que alivio porque las he visto coquetear desde que se conocieron. Me alegro por ustedes. Ahora me iré, pasen lindo. Buenas noches.

—Buenas noches, Eve. —Le dije y se retiró.

Nos dedicamos a cerrar la clínica y cuando terminamos nos dirigimos al McDonald's tomadas de la mano.

—Te extrañé. —Dijo y la abracé por la cintura.

—Yo también te extrañé. ¿Hoy comeremos en el McDonald's o quieres ir a casa?

—De hecho, tengo una idea. ¿Te gustaría que cocine algo?

La miré sorprendida y asintió sonriendo.

—Quiero decir, amo la comida chatarra pero podríamos comer algo más sano por una vez.

—¿Qué vas a cocinar?

Pregunté y la arrastré hacia el camino que llevaba a casa, haciéndola reír.

—¿Qué te gustaría comer?

—Mmmm déjeme pensar... —Dije y la miré sonriente—. ¿Si te quiero comer a ti?

—Oh, eso lo podemos arreglar fácil.

La vi arrastrarme hasta un callejón y apoyarme sobre la pared de ladrillo. Se acercó y me besó. Me dejé acariciar por esos labios en color rojo, sintiendo el sabor del pintalabios en mi boca. La abrace por los hombros y ella me tomó de la cintura por debajo de mi sobretodo. Su lengua se abrió paso a mi boca y su saliva comenzó a mezclarse con la mía, dándome una sensación de sed. Quería tener esa increíble sensación de tener el sabor de su boca en la mía. Tenerla de esta manera, con su boca devorando la mía mientras me tenía acorralada contra una pared de ladrillo en medio de la oscuridad de un callejón era excitante. Comencé a sentir la necesidad de tenerla más de cerca e incluso de animarme a tocarla. Pero no podía hacerlo en la calle.