La tímida e introvertida Kara Danvers es la odontóloga más profesional y segura en sí misma cuando está en su consultorio. Hasta que aparece Lena Luthor, una enigmática e impulsiva paciente que dará vuelta su mundo.
Supercorp AU
Escrito en colaborac...
Sentía alivio en mi corazón tras esa horrible noche donde me pase la madrugada llorando y creyendo que Kara me dejaría. Así que esas palabras me curaron el corazón y lo revivieron. No pude evitar decirle que la amo, que me enamoré de ella. Y escuchar ese te amo de sus labios fue mágico. Corté el beso que nos estábamos dando para mirarla.
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—Dímelo de nuevo. —Le pedí y sonrió con ternura.
—Te amo, Lena.
La miré mordiendo mi labio sin poder evitarlo. Me acerque a su rostro y apoyé mi nariz contra la suya con ternura. Estiró sus manos hasta mi rostro, lo tomó y le dio caricias.
—¡Pero si es la tramposa! —Dijo la voz de Stephanie y suspiré molesta—. ¿Lista para que te expulsen por meterte con una profesora, Lena?
Miré hacia donde estaba Stephanie y detrás de ella estaban varios de nuestros compañeros que salían de clase. No contesté y Kara no dijo nada, solo la miró muy mal.
—Hoy aprendimos muchísimo en la práctica, fue interesante. —Dijo ella y sonrió divertida—. ¡Oh, lo siento! Olvidé que no pudiste estar presente por estar dando una prueba para probar que no compraste tu nota.
—¡Ya, George! —Dijo una chica—. Déjala en paz, demostró que decía la verdad.
—¡Compró su nota acostándose con la profesora de práctica! —Dijo señalando a Kara y esta se tensionó en medio de mi abrazo—. ¿Por qué no vas a acostarte con el profesor de cirugía dental, Lena? Esa es la especialidad que elegiste, ¿verdad?
—¿No tienes nada más que hacer? —Le dije y sonrió.
—¿Y tú? Ella se aburrirá de ti en tanto sepa lo aburrida que eres en la cama. —Kara apretó su puño, tomando parte de mi ropa y sabía que se estaba conteniendo—. Sigo recordando aquella vez que lo hicimos en ese salón de clase vacío y no lograste ni hacerme llegar a un orgasmo. ¡Pero yo sí te hice llegar a uno! ¿Lo recuerdas?
Eso había sido muy ofensivo y una falta de respeto, ya que ella sabía bien que Kara es mi novia ahora.
—¡Supéralo, George! —Habló un chico—. Lena es alérgica a las perras.
—Todos ustedes son unos imbéciles. —Dijo y me miró—. Y tú, bastarda. Tienes ese apellido por lástima. La pobre de tu madre debe sentirse horrible con tener una hija como tú, tan zorra.
Iba a decirle algo cuando Kara se alejó de mí y se acercó a ella lentamente. Nunca vi a Kara tan seria, tan enojada. Su rostro estaba oscuro, daba miedo siquiera mirarla. Y Stephanie lo sintió, porque dio un paso atrás y la miró con atención.
—Sé quién eres, George... Sé quiénes son tus padres porque son colegas míos y grandes amigos, su número está entre mis contactos. —Le dijo Kara y Stephanie palideció—. Tú no estás aquí por méritos propios y lo sabes perfectamente.
