Una historia jamás contada del cáliz de fuego

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-No llores Lerry, no llores -Me dije a mi misma -No vale la pena -Respiré profundamente -Tu padre es Sirius Black y tu abuelo es Albus Dumbledore; dos magos fuertes y tú también eres fuerte.

-Lerry ¿Estás bien? -Me preguntó Hermione y se sentó en mi cama -Asentí

-Tienes razón, no vale la pena seguir llorando por él -Sonreí -Además debemos ayudar a Harry a averiguar lo del huevo, así que tenemos cosas que hacer, no podemos distraernos -Hermione me sonrió y salimos de nuevo.

Pasaron las semanas y estábamos desesperados por no saberlo. Estaba segura de que los otros campeones ya lo habían descubierto a estas alturas. Iba caminando por el pasillo con Harry cuando Cedric nos llamó.

-Hola Cedric -Saludé - ¿Necesitas algo? -Pregunté

-Hola -Miro a Harry - ¿Has logrado descifrar lo de tu huevo? -Harry suspiró y negó -Tal vez deberías relajarte -Lo miramos -Quizá un baño te ayudaría, hay un baño para prefectos en el quinto piso, lleva tu huevo y tal vez las burbujas te ayudaran a pensar.

-No creo que pueda usar ese baño, yo no soy prefecto -Le dijo

-Puedes usar el baño a las 3 de la tarde, no entra nadie -Sonrió, nos guiñó un ojo y se fue.

-Eso fue bastante extraño -Me dijo Harry y asentí

-Pero no tenemos muchas opciones -Hice una mueca -No pierdes nada con intentarlo -Él asintió

Caminamos al gran comedor donde nos encontraríamos con Ron y Hermione para almorzar. Cuando llegamos, Harry se sentó junto a Ron y yo junto a Hermione, frente a ellos. Comencé a contarles lo que Cedric nos había dicho y ambos asintieron.

-Bueno, tampoco tenemos muchas opciones -Le dijo Hermione al igual que yo se lo había dicho.

Después del almuerzo teníamos clase de transformaciones con la profesora McGonagall. Está clase la tomábamos junto a Hufflepuff. Cuando terminamos, los estudiantes de Hufflepuff se fueron y los de Gryffindor nos quedamos.

-Les comento que tendrán una clase especial -Comenzó la profesora Minerva -Será clase de pociones con el profesor Snape y tomaran la clase junto a los alumnos de sexto curso.

-Genial -susurré y respiré profundamente

-La clase será mañana después del almuerzo, es necesario que participen ya que es esencial para sus TIMOS del próximo año y a los de sexto curso les ayudará con sus EXTASIS.

-Eso es bastante interesante -Sonrió Hermione

-Pues creo que solo a ti te parece interesante -Le dijo Ron y ella hizo una mueca.

Salimos del salón, dejamos nuestras cosas y caminamos a la biblioteca. Hermione, Ron y yo nos fuimos para allá mientras Harry iba al quinto piso con su huevo.

-Espero que funcione -Le dije y él asintió

Después de un par de horas, Harry volvió a la sala común donde ya estábamos nosotros y se acercó corriendo.

-Lo he descubierto -Lo miramos -Tenía que sumergir el huevo en agua porque es un canto de sirenas.

-Claro -Dijo Hermione -No sé cómo es que no me di cuenta antes, lo leí en un libro, los cantos de las sirenas no se escuchan fuera del agua -Lo miro - ¿Y qué es?

-Pues básicamente la segunda prueba será en el lago negro; "nos hemos llevado lo que más valoras y para encontrarlo tienes una hora" eso decía y también que, si no lo encuentro en ese tiempo, habrá malas consecuencias.

-O sea que tienes que conseguir una manera de aguantar la respiración bajo el agua por al menos una hora -Le dije y él asintió.

- ¡Eso es imposible! -Dijo Ron -Vamos a tener que pasar todo el día en la biblioteca