Las vacaciones se estaban terminando. La clase 1A había decidido hacer una pequeña reunión con el propósito de despedir los días de verano.
Iida no estaba especialmente emocionado por ello. O eso quería aparentar, porque en realidad se moría por ver a cierto pelirrojo, después de esas semanas había logrado comprender y aceptar mucho mejor sus sentimientos. Pero eso también tenia ciertos contra, ya que desde que estaba totalmente consciente de que se había enamorado de su compañero comenzó a notar todas las reacciones vergonzosas que podía tener cuando se trataba de algo referido a él. Por lo que decidió hacer una lista mental de todos los posibles problemas que sus sentimientos podrían llegar a causarle, es mejor estar siempre preparado.
Era insultante que fuera tan fácil para su hermano darse cuenta de cada pequeña emoción que pudiera pasar por su rostro. Aunque tampoco es como si fuera tan difícil notar sus sonrojos, risitas y suspiros del clásico adolescente hormonal enamorado. Era como una pecera, totalmente expuesto a los ojos de los demás.
Pero al igual que emocionado, estaba aterrado por la reunión. No podía hacer ver a sus compañeros ese lado tan humillante de sí mismo, lo conocían por su clásica seriedad y forma correcta de actuar. Solo imaginar que Kirishima llegara a saberlo... le ponía los pelos de punta, era totalmente imposible que le correspondiera, todo indicaba a que el pelirrojo lo ve como un amigo más, ni siquiera es tan cercano al pelirrojo como lo eran Mina o Bakugou, incluso Denki.
Aun así, cada noche sus pensamientos lo llevaban a imaginar como seria si el y Kirishima estuvieran juntos ¿Cómo se sentiría estar entre sus brazos? ¿y su voz hablando en un tono bajito diciéndole que lo quiere? Si sus manos se tocaran ¿se sentirá la electricidad que siempre describen en los libros románticos?
Todo aquello solo se quedaría en su imaginación, solo deseos de un inesperado primer amor. Que tragedia que ese primer amor deba permanecer como un secreto.
Llego el tan esperado día. Denki había ofrecido su casa, pero finalmente se decidió que seria en la de Todoroki, quien insistió mucho en que usaran la casa de su padre. Iida conocía perfectamente la razón de su insistencia, la cual era molestar a su padre, pero no se esperaba que reaccionara tan encantado de tener a sus compañeros de visita. Iida ya conocía a Endevar antes de entrar a la UA, no era raro encontrarse con el en cenas o reuniones donde permitían que los héroes llevaran a sus hijos o pupilos, se habia encontrado con el menor de los Todoroki algunas veces, pero jamás habían cruzado muchas palabras antes de entrar a la academia.
Iida estaba preparándose para salir cuando su hermano entra en la habitación con una cara muy seria, eso lo asusto un poco, no es muy usual ver a Tensei usando esa expresión, no para él. Lo examino con una mirada que le causo escalofríos.
-Ni pienses que te dejare ir así. – dijo seriamente señalando la ropa que traía puesta.
-¿Qué tiene de malo? Es nueva y me pareció adecuada.
Llevaba una camisa gris, con unos pantalones azules y zapatos negros. Estaba consciente de que era algo aburrido y simple, incluso un poco ridículo para el tipo de junta, pero no era alguien con sentido de la moda.
Su hermano se mantuvo pensativo unos segundos, conocía esa boca torcida a la perfección, solo podía significar que estaba a punto de decir algo que probablemente no le gustaría.
-déjame elegir tu ropa.
Tal como sospechaba, ridículo.
-por favooor, solo hoy. Tengo una caja con ropa vieja, seguro que te quedan.
-no.
-no seas así, tienes que probar cosas nuevas a esta edad.
No entendía como siempre terminaba por convencerlo, quizás tenia un segundo quirk de manipulación mental o algo similar.
Después de mandar todo su closet al diablo, Tensei trajo una caja llena de ropa de su habitación. Había playeras de bandas, croptops, camisas demasiado traslucidas, pantalones anchos, ajustados, con muchos bolsillos o sin ellos, incluso faldas de las cuales sus padres probablemente ignoraran su existencia. Comenzó a rezarle a todas las divinidades existentes para que su hermano no eligiera una falda o esos pequeños shorts que vio, pero Tensei oculto. Sus plegarias parecían haber funcionado, más o menos. Frente a él, extendidos sobre su cama estaban unos jeans negros que afortunadamente eran suyos, una chaqueta de mezclilla clara y un crop top rojo con líneas negras.
-estas loco, seria impensable que use esas prendas.
Intento hacer cambiar de opinión a su hermano, pero no hubo caso, además de que ya había accedido a usar lo que le escogiera su hermano, no podía echarse para atrás.
Así que se puso la ropa y se miro en el espejo del baño. La única ropa con la que se le veía el abdomen era con traje de baño, esto era nuevo para él. Intentaba con todas sus fuerzas hacer como si no le agradase, pero estaba encantado. Incluso con la chaqueta era mucho mas fresco que lo que el pensaba llevar y sentía como le daba más movilidad. Y por sobre todo, se veía bastante bien, no era un sentimiento muy usual para él, se miraba en el espejo y veía un chico atractivo.
Tensei intento peinarlo y quitarle los lentes que le daban una apariencia un poco mas seria y recta de lo que quería lograr, pero Iida se negó. No quería hacer muchos cambios, con la ropa era más que suficiente.
La casa de Todoroki no estaba muy lejos, caminando apenas se demoro 20 minutos. Aunque se había retrasado un poco por el tema de su hermano, cosa que lo estreso solo un poco, un poco bastante. En la puerta lo recibió Fuyumi, era muy fácil darse cuenta de que era ella por todas las veces que su amigo la mencionaba. Lo invito a pasar, sus compañeros estaban en la sala comiendo y riendo mientras se escuchaba música de fondo.
Se gano la mirada de varios, pero afortunadamente nadie le dijo nada con respecto a su ropa, bendijo a las nuevas generaciones por no darle tanta importancia.
Se reunió con Uraraka, le pareció extraño verla sentada comiendo sola.
-Hola Iida-kun, me gusta tu crop top.
-buenas tardes, aprecio el comentario ¿estás sola?
-no, Deku y Todoroki-kun fueron a buscar más bebidas.
Ella comenzó a contarle de sus vacaciones, había ido al extranjero por primera vez, sus ojos brillaban mientras le relataba su experiencia buceando y haciendo castillos de arena blanca en la playa tropical de Brasil. Él estaba poniendo atención a lo adorable que se veía mientras hablaba tan feliz, pero a la mitad otra cosa capturo su total interés. Kirishima y Bakugou habían llegado juntos, el pelirrojo llevaba su ropa normal ¿Cómo podía verse tan atractivo? Tenia el brazo pasado por sobre los hombros del rubio mientras ambos saludaban a todos los que estaban allí.
También aparecieron Todoroki y Deku, quienes venían cargados con botellas de bebidas fantasía de distintos colores. El de cabello bicolor no dejaba de alabar su atuendo, le hizo prometer que le presentaría a su hermano para le escogiera ropa a el también. Más tarde también llego Tsuyu, quien adivino enseguida el porqué del repentino cambio de estilo.
Mientras el grupo conversaba, Iida no dejaba de lanzar miradas hacia donde estaba el pelirrojo. Después de haberlo observado unos segundos que le habían parecido prudentes, el peliazul volvió a girarse hacia sus amigos para unirse nuevamente a la conversación. Pero se encontró con los ojos de los cuatro puestos sobre él, había sido super obvio.
-eres super obvio.
Dijeron sus amigos al unísono.
***
Hola.
Jajaja, creo que este capitulo lo hice solo por el fancervice. Pido perdón.
Espero que te haya gustado el capitulo, si es así no olvides votar. Recuerda que si ves una falta de ortografía me puedes dejar un comentario para que pueda corregirlo, la idea es ir mejorando.
Gracias por leer.
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Un amor no correspondido
FanficIida es un estudiante modelo y el presidente de la clase 1A. El alumno perfecto. Pero todo se le sale de las manos cuando comienza a tener extraños sentimientos por uno de sus compañeros.