La Epifanía de un pintor •KookTae•

Capítulo 27

27

"Aunque quisiera quedarme no podría"

Taehyung escucha en su cabeza la voz de jungkook repitiendo esas palabras en la conversación de hace unas horas mientras en su mano sostenía una copa de vino.

Hace unos minutos atrás había llamado a Jimin con la esperanza de tener respuestas y aunque finalmente contestó escuchar sollozar a su mejor amigo desde la otra línea lo hizo sentirse el peor amigo del mundo, lo conoce y sabe lo mucho que debe estar sufriendo por Yoongi y puede asegurar que él también.

Se sentía tan frustrado, el mismo le dijo a Jungkook que debía seguir su camino aunque el no formara parte de el pero Taehyung no lo siente en realidad, y es egoísta querer que se quede siempre a su lado sabiendo lo mucho que el menor quiere conocer y vivir su vida, pero Taehyung tiene miedo de que se dé cuenta de la realidad y lo horrible que es.

Solo quiere mostrarle a Jungkook cosas buenas, incluso que este tiempo juntos ha logrado un cambio en él.

—¿Que debería hacer? —murmuró mirando el interior de la sala.

Nuevamente todo se sentía tan vacío, desde que llegó jungkook la vibra de su hogar había cambiado llenándose de una esencia tan viva y cálida, recuerda haberlo escuchado reír un día por algo que le pareció gracioso en una película que vio mientras Taehyung cocinaba, cuando trajo a Yeontan y lo baño por primera vez quedando ambos repletos de agua y jabón.  Y aunque el menor esté en el segundo piso durmiendo imaginar que la casa en algún momento estará sin él todo volverá a ser tan monótono, sin inspiración, carente de alegria y ánimo.

Porque desde que llegó Jungkook, Taehyung había hecho creaciones muy lindas después de cinco años sin tener algo en que inspirarse, incluso jamás se arrepentiría de haberle dado uso al lienzo que le regaló su abuela antes de morir. Ese día fue tan feliz para Taehyung, nunca creyó sentirse tan vivo en cuatro paredes junto a alguien, pero pintar era su pasión y Jungkook su inspiración; eso lo llevó a juntos creas una maravillosa obra de arte.

Ese gran cuadro seguía en el fondo de esa habitación, oculta de la mirada y apreciación del mundo, Taehyung a visto en redes sociales las teorías qué hay sobre si mismo, muchas gente se pregunta qué sucedió con él, si aún seguirá pintando o simplemente abandonó el mundo del arte pero realmente Taehyung jamás podría dejar de pintar, su abuela le había dado todos sus conocimientos en aquello como para dejarlo y aunque quisiera no podría porque la única forma de tenerla aún presente en su memoria era pintando.

Suspiro tomando el último sorbo de su copa y tomó su celular para marcar un número en él.

—Dime —una voz un tanto áspera se escuchó del otro lado.

—Min —respondió— ¿donde estás?

—Por ahí, ¿por qué quieres saber?

—No es que me importes tú en estos momentos pero necesito saber si debo ir a golpearte o no —escucho su risa del otro lado.

—No sabes nada Kim, ¿necesitas algo? Estoy ocupado.

—¿Ocupado en qué?

—Tratando se sacarme lo que vi de mi cabeza quizás

—Yoongi —lo llamó— ¿que pasó?