Wrapped in blood

Capítulo 10 : Mira de nuevo!

Estaba cambiandome de ropa por una más abrigada, se acercaba el invierno la época donde siempre me enfermaba por no llevar suficientes abrigos. Mi madre volvería mañana por lo que Angela quiso pasar su última noche viendo películas y comiendo helado, para acabar de explotar escogió una de terror. Considerando lo que había pasado me sorprendía que quisiese verla, me deje caer al lado de ella arrebantadole un pote de helado de vainilla, mi sabor favorito.

- Si te vas a tapar los ojos siempre la quito, así no tiene gracia.

Estabamos viendo la segunda parte de It que habían sacado, cada vez que el payaso salía Angela se tapaba la cara con un cojín pegando un gritito. Yo seguía con la vista pegada al televisor, estaba tan concentrada en la película que no vi cuando Angela se levantó para ir al baño, pasados unos minutos regresó a sentarse con una paquete de galletas dulces, íbamos a engordar de seguro.

- Qué ?!

- Vamos a engordar por tu causa.

- Debemos disfrutar antes de que tu novio nos mate.

- No es mi novio, y ya te dije que no hará nada si no lo provocas.

- Yo no hice nada!!!

- Le apuntaste con un arma, creo que eso es suficiente.

- Tenía miedo, que querías que hicieras?

- Que corrieras en vez de cabrearlo aún más de lo que estaba.

- No sabía que terminaría dándote el tiro a ti en vez de a él.

- Por suerte, estarías muerta ya de lo contrario. Jeff no es un niño, es un asesino serial con sed de sangre que sabe lo que hace, pensar siquiera en perjudicarlo es una tontería.

- Bien dicho preciosa, que bueno que lo entiendan.

- No hagas más eso Jeffrey.

- Deja de llamarme así!!!

- Pues no la asustes más, no te tengo miedo pero ella si.

- Achlys...

- Ve a tu cuarto, no salgas hasta que yo te avise.

- No te irás !!!

Suspire cansada y me levante en dirección a Jeff. Angela subió las escaleras corriendo y cerró con fuerza la puerta.

- Deja de asustarla, no te da pena?

- No, quería estar solo contigo.

Levante una ceja en respuesta a sus palabras, era raro que dijera ese tipo de cosas tan directas. Recosté mi cuerpo contra la pared a medida que esperaba que volviera a hablar.

- Ven conmigo, demos un paseo.

Algo en su cara me resultó extraño, como si de verdad quisiera mi aprobación. Subí a mi cuarto para cambiarme de ropa, él estaba en una esquina y podía sentir su mirada taladrar mi nuca, encontré la mezcla de ropa que hice de los crepyy. Cuando me fui a poner el vestido, sus dedos fríos acariciaron las palabras que tallo en mi piel, su contacto hizo que me estremeciera. Al mismo tiempo que deseaba apartarlo algo más se mezclaba en mi cabeza, lo cual no era posible.

- Te gustan? Las hice para ti...

Me volteé para gritarle unas cuantas verdades pero cuando vi su sonrisa todo se esfumó, era un poco chueca pero era su sonrisa original, asumí que ese era su único rastro de humanidad después de haber estado años matando y oyendo los gritos de las víctimas mientras jugaba con ellas.

- Jeff... Si, son lindas. Gracias...

- Ahora esto impedirá que alguien te haga daño de nuevo.

- Creo que echaran a correr cuando las vean.

- JAJAJAJAJAJ

Las heridas a pesar de haber sanado tenían un color rojo vivo, no sangraba pero no desaparecía ese hilo fino de sangre que las volvía visibles a todo el que quisiera mirar. Jeff vestía su típico abrigo blanco marchando de sangre con los jeans negros y el pelo color negro quemado desorganizado, su aspecto era muy descuidado y supuse que no entraba en sus prioridades bañarse o peinarse un poco.

- Antes de irnos quieres bañarte? El agua te relajará un poco.

- Relajarse es debilidad, no puedo permitirme eso.

- Será un secreto, confías en mi cierto? Yo nunca te haré daño y lo sabes.

Se quedo pensativo un momento, termino cediendo y en lo que se bañaba lave la ropa para remover las manchas de sangre que siempre la pintaban. Entre al cuarto sujetando la ropa, lo encontré parado en el medio de la habitación desnudo... Mi boca de debe de haber caído posiblemente al contemplar la escena.

- Envuélvete en la toalla!!!

- Porque?

- No es un maldito juego!!! Hazlo!

Me arrodille en el suelo con la cabeza llena de recuerdos de aquel día, la sostuve con ambas manos apretando, alando algunos de mis cabellos en el proceso para que se detuvieran. Golpeé con fuerza el piso haciendo a mi nudillos sangrar, gotas saladas rodaban por mis mejillas sin querer detenerse a pesar de mis gritos y protestas.

- Shhh... Go to Sleep

- Eh?

Las lágrimas impedían que viera con claridad, solo vi su silueta agachada frente a mi aún sin ropa. Desvié la mirada con rabia sabiendo que lo hacía a propósito, levantó mi mentón con rigidez obligando a que lo mirará.

- Se puede saber que encuentras tan divertido? Acaso mi dolor te divierte?!!!

- Yo fui... Puse a todos a dormir por ti, te estaban haciendo daño.

- Qué ? Tu eras el que los desaparecía?

- Si, una vez que se iban te veías feliz pero nunca lo suficiente.

- Mataste a mi padre también?

- No se quien es, lo mató ?

- No!!! El era bueno conmigo pero ya se murió.

- La gente muere, Liu también murió y ahora quiere asesinarme.

- Tu hermano pequeño verdad? Ustedes se querían Jeff porque hiciste todo eso?

- Estuvo mal? Tu también piensas que soy un mounstro!

- No saques conclusiones!!! Solo quería saber el porqué lo hiciste.

- Mami me miento respecto a ser hermoso con mi nueva cara. Dime algo, tú que piensas de ella?

Mmm... A decir verdad no pensaba nada en particular, lo conocí con esa cara y como era la única que había visto no podía comparar como lo hizo su madre. Jeff detestaba las mentiras, sobre todo sobre su aspecto... Me le quedé mirando unos segundos, sus ojos de alguna forma eran muy bonitos si se eliminaba el factor de psicópata que le daba, su piel era tan blanca como la nieve pero áspera como una roca. Se podría comparar con el hielo, sus labios finos eran acompañado con su sonrisa cicatrizado como si de un muñeco antiguo se tratace.

- No me mientes cómo mamá ?

- No Jeff, nunca lo hago.

Le repetí lo que realmente creía cosa que lo dejo sin habla, era extraña mi forma de pensar con él pero aunque estuviera más loka que Nina no podía negar la verdad...