17. the storm

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Me acerco a Josh, pero deseo correr lejos, y desaparecer.

Él sostiene una hoja en sus manos y yo solamente quiero que la tierra me trague. No hay ruido, sólo se escucha la lluvia intensificada luego del trueno que abajo escuchamos.

Pongo un pie en la habitación y Josh voltea, algo asustado. Sus ojos transmiten una rara mezcla de emociones. Pero es él quien corta el contacto visual, volviendo su mirada al retrato, su retrato.

—Josh y-yo —suelto como puedo, pero soy interrumpido mientras coloco las tazas de café en un estante. Por el contrario, el temblor de mis manos acabaría por tirarlas.

—Es hermoso —dice casi en un susurro. Yo detengo mis palabras, pues las pocas que iba a decir, no encajarían con su reacción— ¿Lo hiciste tú?

Asiento con la cabeza mientras trago saliva y me acerco.

—Tengo que decir que —no termina la frase—. Wow.

—Yo...

—Tyler se te da muy bien el dibujo, pero ¿Por qué a mí?

Como aquella vez, quiero hablar, pero las palabras no salen de mi boca. De pronto, un fuerte trueno logra asustarme.

Todo está oscuro.

—¿QUÉ ROMPIERON? —grita mi padre, lo suficientemente fuerte como para que se escuche hasta aquí. Y eso deja en claro que nos quedamos sin luz. Mi ventanal lo confirma, ya que sólo se ven las estrellas a través de este.

—¿Tienes algo para iluminar, Tyler? —pregunta Josh. Respondo sacando el teléfono de mi bolsillo para prender la linterna—. Genial.

—Josh, déjame e-explicar.

—Tranquilo, en serio —alerta antes de que pueda seguir hablando. Una extraña figura, localizada en la puerta, logra hacernos saltar del susto.

—Chicos ¿Todo en orden?

—Si, ma —respondo tranquilo al darme cuenta de que es ella—. E-estábamos por comer los brownies y se fue la luz.

—Si, comenzó a llover fuerte y hay mucho viento —menciona ella.

—Que mal —agrega el tintado.

—En un rato comeremos ¿Te quedas Josh?

—Eh —duda el peliteñido y me mira, buscando ayuda.

—Eso es un sí —vuelve mi madre con una sonrisa.

—Con gusto —confirma Josh devolviendo el gesto.

—Tyler ¿Por qué no buscas una de las luces de emergencia? Tu padre necesita también —aconseja mi madre, pero no llego a responder ya que ella deja la habitación.

—Voy contigo —ofrece Josh luego de que yo lo mire.

Comenzamos a caminar, no es mucho trayecto. En el ático tenemos unas lámparas largas que iluminarían una habitación entera. Espero que estén recargadas.

A él no parece importarle lo recién vivido, pero a mí sí, no aguanto esta tensión. Josh vio que lo retraté, sabe que fue dibujado por un chico con el que tuvo problemas hasta hace una semana. No creo que sea algo muy normal.

—El dibujo, Josh —me esfuerzo por abrir las escaleras del ático.

—Es muy lindo, Tyler.

—No quiero que, que p-pienses mal.

—No te preocupes, en serio. Hasta podría decir que subió mi autoestima, verlo —dice bromeando, creo. Yo río un poco por eso, de forma nerviosa—. Ya vi un dibujo tuyo, solo falta que me escuches tocar la batería.

prove me wrong; joshler.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora