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Estaba casi desnudo, tan solo con una bata casi transparente que le llegaba hasta más abajo de la cintura y una manta que cubría sus piernas hacia abajo, estaba ya en la camilla mientras que su hyung terminaba de instalar lo que había traído de Taehyun.

—Bin necesito amarrarte con estas correas, abre los brazos, por favor.

—E-Está bien.—se recostó en la camilla con una almohada en la cabeza y se dejó atar por su hyung, parecía que lo estuvieran preparando para un sacrificio.

—Listo, ahora necesito atarte los tobillos.

—¡N-No puedes!...estoy d-desnudo hyung.

—Sobre eso, necesito estudiar también como reaccionas ahí abajo, Bin.—lo dijo en un tono nervioso y casi tímido, a pesar de que eso era completamente normal para completar su estudio.

—P-Pero es vergonzoso,y-yo no puedo...

No podía obligarlo tampoco, pensó entonces que si lo preparaba tal vez podría.

—Entonces haremos algo, ¿si?—se le ocurrió una idea.

—¿Qué h-haremos hyung?.

Se acercó y se recostó encima de Soobin, empezó a besarlo, pero esta vez con una mano en su pezón derecho jalándolo de arriba a abajo mientras le comía la boca, Soobin no dejaba de gemir sobre la boca de su hyung, se sentía más caliente a medida de que su pezón era estirado y manoseado sobre la tela de la bata.

Yeonjun se separó dejando un hilo de saliva y empezó a besar su cuello bajando de este hasta su clavícula, y de a poco fue desabrochándole la bata dejando expuesto su pecho mas no aún sus pezones duros, empezó a lamer la unión del cuello y hombro. Lo único que hacía Soobin era gemir, no podía hacer nada ya que sus manos estaban atadas.

—Soobin, necesito que te tomes esto.—dijo en un tono casi grave, avergonzado por lo que había hecho segundos atrás.

Le mostró un pequeño frasco transparente en forma de tubo y en su interior estaba un líquido rosado oscuro.

—B-Bien.—se lo tomó de golpe e hizo una mueca por el sabor raro de la droga.

Yeonjun siguió con sus caricias hasta que sacó al descubierto uno de sus pezones rosas al aire y comenzó a chuparlo, empezó a hacer círculos sobre la aureola y con la otra mano empezó a estirar el otro pezón, Soobin se sentía tan estimulado que no se dio cuenta de que su vientre dolía anormalmente y que sus pezones se estaban hinchando anormalmente.

Empezó a sentir mucho calor de repente y sintió como crecía una erección, su mente se nublaba y de pronto no se sintió nervioso ni mucho menos avergonzado, eran los efectos de la droga.
Necesitaba a su hyung ya.

—¡H-Hyung! y-yo n-no puedo...q-quiero y-yo ¡mghh...! n-necesito de-de...¡n-no!...—comenzó a tartamudear. No podía hablar bien por tener que aguantar que se corriese encima, sus muñecas dolían debido a que jaloneaba hacia adelante y las correas lo detenían. Y cuando pensaba que su hyung le haría caso y lo tomaría, este le ató los tobillos y Soobin no se negó, al contrario abrió las piernas mejor, no estaba pensando muy bien, toda la timidez se le había ido. Su mente estaba nublada.

La droga había funcionado y el joven científico no se pudo sentir más feliz, mientras veía a Soobin retorcerse cual animal en celo.

Apartó la mirada, Soobin tenía una clara erección y eso solo lo puso más de lo que ya estaba, por el simple hecho de ver a un Soobin suplicante.

—Tranquilo, bebé—este se quitó la bata que tenía dejando solo su camiseta blanca sin mangas a la vista, Soobin gimió.

—N-Necesito...yo-yo ¡n-no puedo Yeon-Yeonjun!—dio una pequeña embestida al aire—¡m-me voy a-a ve-venir! necesito de-de...

ꪔ̤̮𖡂 |Conejillo de Indias ©yeonbin ¡ˏ'୭̥Donde viven las historias. Descúbrelo ahora