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—A-Ah... n-no, d-dejame Soobinnie... no sigas, v-voy a c-correrme, no... ah, ah, ah, voy a... a...

Palmeó su trasero para meter sus largos dedos más al fondo.

—¡A-Ah!, Soobin, déjalo...

—Yeonjun-hyung está estrecho... —dijo con voz ronca, jadeante.

Gimió al sentir derretirse por su voz tan sexy.

—A-Ah, ah, ah, no ahí... por favor, y-yo...

Soobin lo calló besandolo, y apegandolo más a la pared hizo que Yeonjun jadeara por la profundidad.

Mientras que se oían chasquidos, Soobin manoseaba el trasero de Yeonjun, penetrandolo rápido, haciendo tijeras y dilatándolo a más no poder.

—M-Metémela, fóllame ya, bebé...

Soobin rio bajito, y besando su cuello con deseo hizo que Yeonjun ladee su cabeza para darle más espacio, gimiendo por el contacto.

Sacó sus dedos para palmearlo fuerte y luego acariciar su trasero expuesto.

Y cuando estaba a punto de desabrochar su cinturón.

—¡Hey, alto ahí!

De la nada un rubio molesto entró al club, Soobin cubrió al instante la parte baja de Yeonjun y así mismo abrazándolo y hundiendo su cara en su cuello. No sabía como saldría de esta.

—F-Félix esto...—intentó cubrirse mientras se relamía los labios.

—Esto tenía sentido... demasiado diría yo. Soobin desaparece y como no tienes a quien follarte o a alguien que te folle, vas y lo haces con el nuevo. Ahora que dejaste a Soobin y lo tengo todo grabado, cuando lo encuentre se lo mostraré, veremos a quien elige él cuando eso pase.

Yeonjun se sintió idiota, era obvio que nada bueno saldría de que ahora Steve o mejor dicho Soobin sea su nuevo asistente luego de la supuesta desaparición de este.

—Puedo explicarlo... s-solo...

—No puedes para nada, realmente pensé que eras alguien más serio, pero resultaste ser como los demás.

Bajó la mirada, no tenía una excusa, ya estaba hecho.

—Sobre ti Steve, pensé que serías otro tipo de persona... pero meterte con los que ya tienen pareja... es decepcionante.

Dijo para guardar su teléfono celular e irse de la habitación enojado, sin antes darles una mirada fulminante.

Cuando se aseguró de que se fue completamente, Soobin rió a carcajadas. Yeonjun sonrió por el sonido.

—Hyung, parece que... tendremos que decirle a Félix-hyung que le tomará un buen tiempo encontrar a Soobinnie.—rio bajito, apegando su erección a la de Yeonjun.—Pero antes tengamos sexo, ¿sí?

—De verdad tú...

—¿No es lo que querías hace unos minutos?—dijo mientras volvía a besarlo por el cuello.

—E-Estaba muriendo de miedo, no me digas que tan masoquista eres que eso te excitó.

—Creo que Yeonjun-ah lo sabe mejor que nadie. —besaba su mandíbula mientras recibía gemidos bajitos de parte de Yeonjun.

Pero sonó la campana indicando inicio de siguientes clases.

—¿Me haría el honor de manchar mi limpio historial de asistencias de estudiante de intercambio?—preguntó en un mohín.

—Soobin, te dije que no podía seguir faltando a clases...

—Pero usted nunca lo hacía ¿verdad?, ¿por qué no recompensamos las veces en que pudo haberse saltado las clases pero no lo hizo por ser un niño bueno?

ꪔ̤̮𖡂 |Conejillo de Indias ©yeonbin ¡ˏ'୭̥Donde viven las historias. Descúbrelo ahora