Terminada | ❛ Nuestro pequeño amor se convirtió en un pedacito de cielo que nos hizo aún más dichosos de amar. ❜
Habían pasado los años, momentos llenos de felicidad y algunos pequeños problemas que podían ser solucionados gracias a la confianza y a...
Dime, ¿nuestro amor seguirá siendo el mismo? Porque una vida sin ti sería mi mayor tortura.
¿Puedes seguir amándome como lo haz hecho hasta ahora? Prometo darte todo de mí.
Míralo, tan pequeño e indefenso, nuestro pequeño fruto de amor.
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Tres años después...
—Es mentira.
La pareja se miró entre ellos con felicidad brillando en sus ojos, negaron a la afirmación del alfa mayor y JiMin alzó su manita para mostrar el anillo en su dedo anular, luciendo precioso en su mano con esos bonitos brillos que desprendía con la luz del sol filtrada por las ventanas.
—No, papá. Nos vamos a casar.
YoonGi espero por la reacción de TaeMin, pudo incluso esperar uno que otro gritó o reclamo y después ser felicitados al aceptar su matrimonio, pero nunca imagino que el padre de su ahora prometido se soltaría a llorar y abrazarse de su esposo para sollozar tranquilamente entre sus brazos, le partió el corazón ver qué TaeMin apretaba entre sus manos la camisa de MinHo y ahogaba sus sollozos entre la ropa y hombro de su esposo.
—Papá... —lo llamo preocupado por esa reacción, que sin duda no estaban esperando, hubiera sido más normal para ellos que TaeMin intentará sacudir a YoonGi y exigiera respuestas.
—Déjame llorar para poder darles un buen sermón —le respondió a su hijo entre hipeos y sollozos que iban de la mano, su pequeño y único hijo lo abrazo al sentir que pronto lloraría por esas palabras, pues ver a sus padres llorar era algo que le partía el alma. Si bien MinHo comenzó a llorar al darse cuenta que su hijo realmente estaba por dar otro paso en su vida y ya no era el bebé al que arrullaba entre sus brazos durante noches enteras para calmarlo, sino que ahora era un adulto al que vería crecer aún más y tal vez formar una bonita familia.
—Yo... b-bueno —MinHo río nervioso mientras sacudía su cabello y presionaba la mano de su esposo, se veía muy indeciso al elegir las palabras correctas para demostrarle a su hijo que estaban junto a él en todo lo que decidiera.
—Soy feliz, soy muy feliz cuando estoy con YoonGi, cuando pienso en un futuro con él e imagino lo bien que me sentiría siendo su esposo o lo bonito que sería tener un hijo y que pueda llamarlos abuelos a ustedes, soy feliz con la vida que tengo y que con mis decisiones pude ir dándole forma —les explico el omega y abrazo a sus padres, quienes pronto rompieron en un llanto más fuerte por la declaración de su vida, ellos claramente entendían y estaban felices, pero sin duda era difícil para ellos ver que su pequeño ya no los necesitaba tanto como antes, porque ahora tenía a una persona que estaba dispuesta a todo por él.
—¿Me prometes que YoonGi no te está obligando a casar con él? —JiMin río por la ocurrencia de TaeMin y le tomo el rostro entre sus manos para verle a los ojos con total seguridad.
—Te lo prometo papá, ambos decidimos esto.
Lo vio asentir y MinHo se levantó para abrazar a YoonGi que observaba la escena un poco alejado para no irrumpir en ese emotivo momento entre su pareja y sus futuros suegros.
—Felicidades entonces —le estrecho entre sus brazos y JiMin rio feliz, TaeMin se negaba a soltarlo y su papá MinHo lloraba mientras sujetaba a YoonGi en un abrazo que dejaba muchas emociones expuestas.
—¿Tus madres lo saben ya? —YoonGi asintió ante la incógnita de TaeMin, la pareja se vio entre ellos y YoonGi río bajito.
—Sin querer me escucharon pidiéndole matrimonio a JiMin cuando estábamos en nuestro departamento y ellas nos visitaron ese día.
—Y les dijimos que vendríamos para contarles a ustedes, por lo que seguramente llegarán pronto —explicó JiMin y lo primero que escucharon cuando terminó de hablar fue el timbre que sonaba con insistencia. MinHo se separó para abrir y vieron a un niño corriendo a los brazos de su hermano, y antes de poder siquiera entender cómo había corrido tan rápido el pequeño GeonHak vieron una melena larga y de azabache profundo correr a su hijo mientras lloraba.
—¡YoonGi! —Madre e hijo lo abrazaron entre lágrimas, el alfa más joven les abrazo y beso la frente de su madre cuando sus grandes ojos le vieron con muchas lágrimas en ellos.
—Lo lamento, siguen procesando la información —vieron a SoYeon entrar y MinHo le sonrió porque aunque la alfa quería mostrarse fuerte estaba limpiando con frecuencia sus ojos y formaba pucheros que sin duda ablandaron el corazón de su hijo ya que casi nunca se le veía haciendo eso.
—Tr-trajimos galletas —lloró SoYeon sin poder detenerse y le dió el molde a MinHo mientras se acercaba a su familia y se unía al abrazo lleno de lágrimas.
Cada familia se abrazó entre ellos con muchas emociones reunidas, algunos minutos después dejaron libre a la pareja que ahora estaba sentada frente a ellos y les explicaban sus bonitas ideas sobre cómo querían que fuera su fiesta de bodas. Algunos planes de vida y concluyendo por fin con que YoonGi pronto obtendría su título como cirujano y él fue contratado de manera permanente por una empresa de modas y diseño de buena reputación.
Se vieron entre ellos con felicidad, sus familias de fondo hablando y riendo, mientras ellos dos estaban en su propio mundo sintiendo las miles de emociones que cubrían sus corazones con el más sincero amor que pudiera existir.
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