No eran concientes del transcurso del tiempo a su alrededor, aunque la noche había caído ellos seguían inmersos en su cápsula de amor, confiando a ciegas en el otro cuando las caricias se volvían más intensas al igual que el movimiento de sus cuerpos en esa misma sincronía de placer.
JiMin mantenía sus frentes unidas sujetando sus brazos sobre el cuello de YoonGi, el alfa teniendo sus manos a los lados de su cabeza mientras sentía las piernas de JiMin alrededor de su cintura, apretando la zona con sus tobillos para sentirlo más cerca, más profundo.
—Gi, por favor...
El alfa sabía lo que le estaba pidiendo y su gatito reaccionó de inmediato con felicidad mostrando sus bonitos y afilados colmillos que sobresalieron de los labios de su humano, JiMin le vió casi anhelando lo que se aproximaba, temía un poco del dolor, pero YoonGi estaba ahí con él y sabía que nada podía salir mal en ese momento con la danza de su cuerpos y la habitación bañada en jadeos húmedos que algunas veces eran acompañados por los sonidos placenteros que salían de lo más profundo de sus pechos.
—¿Estás seguro? —Su voz sonaba agitada y se resistía a apretar con sus manos las caderas de JiMin, no quería dejarle algún dolor ya que su pareja tenía que levantarse temprano para sus clases al igual que él, pero a diferencia suyo JiMin estaba de pie muchas horas del día.
—¿Por qué no lo estaría? Eres mi pareja, la persona que le da felicidad a mi corazón y una razón más para no rendirme —el alfa se rió bajito mientras asentía y retiraba los cabellos húmedos de JiMin para besar su frente y asentir mientras se acomodaba mejor sobre la cama y pasaba sus manos por debajo de sus brazos para abrazarlo un poco por la espalda y acercar su rostro entre su cuello.
JiMin sintió que su corazón latía tan fuerte que el contacto de sus pieles le permitiría a YoonGi sentir el latir desenfrenado que él provocaba con cualquier mínimo gesto suyo. El ritmo de sus caderas no paraba, la fuerza con la que lo acercaba a él tampoco se detenía, así que ambos estaban inmersos en ofrecer todo el placer posible a su pareja.
El omega sentía el constante y casi amenazante cosquilleo que se extendía desde su estómago hasta sus piernas llevando un temblor a sus extremidades y sentir que su agarre sobre YoonGi perdía fuerza, el alfa le sonrió y sintió los besos que esparcía sobre las diversas partes de su rostro. Sus labios, sus mejillas, frente y mentón, besaba cada parte suya que le hacía sentirse tímido y dichoso en una mezcla de raras sensaciones pero que sin duda le encantaban.
YoonGi comenzó a jadear sobre su piel, JiMin supo lo que aquello significaba y solo espero pacientemente a que sus colmillos se enterraran en su piel. Sonaba realmente doloroso al decirlo, pero sabía por la palabra de sus padres que el dolor no era como muchos lo actuaban en películas, le aclararon también que una marca no aumentaría siempre la sensación de un orgasmo ya que no dependía de la fuerza empleada al momento de hacerla, sino que podría ser más intenso si su pareja realmente lo amaba como para que la conexión fuera así de abrumadora para que sus orgasmos se fusionarán en uno solo.
—A-amor... te amo —JiMin abrió sus ojos para verlo al momento en que manchó sus pechos con su líquido, YoonGi lo beso en los labios al sentir que pronto llegaría también, así que fijo sus colmillos a la piel de JiMin y espero unos segundos besando la zona para lentamente clavar sus colmillos y evitar dañarlo.
Lo escuchó sollozar y pensó en retirarse, pero las manos de JiMin seguían firmes en su espalda y le fue casi imposible así que siguió bajando sus dientes por la piel hasta que tocó fondo y sentía el sabor metálico entre sus dientes y lengua. Su pareja nuevamente sollozó en su oído y sus brazos cayeron a sus lados, su preocupación que elevó y lentamente sacó sus colmillos pensando en que tal vez hizo algo mal, que pudo haberlo dañado o que simplemente aún no era tiempo para una marca.
Ni siquiera limpió la sangre como debía hacerlo para una cicatrización rápida, tomo a JiMin del rostro y limpió sus lágrimas mientras le pedía perdón y besaba sus mejillas y labios. El omega le sonrió y negó mientras lo acercaba a él para besarlo lentamente.
—Está bien, es normal que duela, cariño.
YoonGi sintió sus ojos húmedos cuando las palabras de JiMin tocaron su corazón al sentir todo ese amor con el que su novio le veía. Ni siquiera se sentía merecedor de tal cariño pero ver los ojos de JiMin brillar le hicieron aceptar que el amor de su pareja era lo mejor que podría tener.
—Por Dios... te amo, te amo —lo abrazó llorando y limpió las gotitas de sangre que manchan su piel, sus lágrimas caían una tras otra y profesaba su amor como susurros al alma de su pareja, su único amor.
—También te amo, pero me siento tan cansado que mis ojos se están cerrando.
Ambos rieron y YoonGi se separó para cambiar los lugares y poner a JiMin en su pecho y acariciar su espalda hasta que el lo vio dormir plácidamente murmurando cosas sin sentido pero que le hacían lucir demasiado tierno a sus ojos.
Su corazón latió fuerte, sus ojos nuevamente estaban húmedos y juro que amaría a JiMin por el resto de su vida. Pues entendió que un amor como ese jamás lo volvería a encontrar, que su bonito novio era tan único e irremplazable que no tendría nunca el valor para dañarlo ni siquiera como una broma.
JiMin se convirtió en su razón, en su día a día y la persona por la cual daba todo de sí mismo para tener esa vida que ambos vivían fantaseando por las noches luego de amarse durante algunas horas.
Al final sí pude terminar hoy mismo la segunda parte, espero les haya gustado.
¿Parte favorita?
Los amo bebés. 💜
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Our eternity³ • YoonMin;윤민
أدب الهواةTerminada | ❛ Nuestro pequeño amor se convirtió en un pedacito de cielo que nos hizo aún más dichosos de amar. ❜ Habían pasado los años, momentos llenos de felicidad y algunos pequeños problemas que podían ser solucionados gracias a la confianza y a...