14.- Decisiones importantes

2.8K 231 52
                                    

Volvieron a la casa como si nada hubiese pasado. La cena que preparo Inosuke consistía en bolas de arroz con pescado asado, nada muy elaborado, pero increíblemente estaba todo muy bien preparado. Era obvio que no era un gran cocinero, pero de todas formas todos alabaron su comida, haciéndolo sentir muy cálido.

Aoi terminaba de ayudar a Nezuko a tomar un baño y la dejo junto con su hermano y Zenitsu. Ya se sentía mucho mejor, su fiebre había desaparecido por completo, pero su cuerpo aún estaba un poco débil.

Paso la tarde tratando de no pensar demasiado en lo que había pasado en el río, pero no podía evitarlo. Finalmente creyó que había malentendido todo y prefirió fingir que no se había decepcionado por lo que pensó que sería un beso.

- Estaba deliciosa la cena... no sabía que pudieses cocinar – le dijo Aoi a Inosuke que acababa de tomar un baño. 

- Es algo que Nezuko me enseño – respondió levantándose de hombros, pero con tono presumido, estaba orgulloso de haberla impresionado.

- Zenitsu me dijo que ella te tiene muy mimado – le conto sonriendo, que tuviese esa extraña relación madre-hijo con ella era algo inesperado pero tierno a la vez

- Es un envidioso, eso es lo que es – dijo molesto.

- Creo que tienes razón en eso, él la quiere mucho – le explico.

- Y ella también lo quiere - Aoi lo miro sorprendida.

- Quizás si lleguen a estar juntos después de todo.

- Si Nezuko es feliz... creo que ni siquiera Ponjiro se molestaría por eso - dijo con sencillez.

Al día siguiente Nezuko pudo levantarse sin mayores problemas y se encontraba mucho mejor. Desayunaron todos juntos, por lo que Aoi decidió que ya era hora de volver a casa. Inosuke se ofreció a acompañarla y ambos partieron al medio día.

- ¿Recuerdas esa vez que hicimos dibujos? – le pregunto Aoi mientras caminaban, esta vez a paso calmado.

- Claro que lo recuerdo – ese día había sido uno de los más felices y divertidos para él, quizás nunca lo olvidaría.

- Esta es la primera vez que me alejo tanto de la finca en mucho tiempo – le explico algo avergonzada.

- ¿Te gusto venir? – pregunto curioso y expectante.

- Si... y me alegra haber sido de ayuda para Nezuko.

- Yo nunca dude que tu podrías curarla, ese tonto médico del pueblo no sirve para nada – bufo molesto.

- Sabes... cuando trabajábamos para los cazadores de demonios yo sentía que no tenía ningún valor, porque no era capaz de pelear – explico algo triste.

- Que tontería, habríamos muerto varias veces de no ser por todas ustedes y sus cuidados – Aoi lo miro sorprendida, eso era algo que el Inosuke de hace un tiempo no habría podido admitir.

- Ahora me doy cuenta de eso – le dijo sonrojada, recordó vagamente una conversación con Tanjiro sobre lo mismo, las cosas habían cambiado rápidamente.

- Supongo que puedes ser bueno en diferentes cosas – dijo levantándose de hombros.

- Pero era tan cobarde... - él rio.

- Conocí a algunos cazadores que si veían heridas grandes se ponían a llorar, no eres cobarde y pocos saben de sanación como tú.

- Todo se lo debo a Shinobu nee-san – oprimió su pecho recordando a su querida sensei.

Somos familia || InoAoiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora