Evie Branwell es una de las mejores shadowhunters del Instituto de Nueva York, siempre sigue las leyes y hace bien su trabajo. Pero, ¿qué pasará cuando un familiar suyo del pasado venga a provocar muchos problemas? ¿podrá superar los obstáculos? ¿qu...
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Llegamos al Instituto, y fuimos a nuestro cuarto.
-Te hiciste muy amigo de Magnus - dije mientras buscaba ropa en el armario.
-Si, me cae bien - dijo y sonreí, me acerqué y lo abracé, cuando nos separamos, nos miramos y lentamente fuimos acercando nuestros rostros para unir nuestros labios. El beso se empezó a tornar apasionado, y Alec me alzó, poniendo sus manos en mi trasero, y estrellando mi espalda contra la pared.
Yo enredaba mis dedos en sus cabellos, mientras sus manos se deslizaba por mi espalda hasta mi trasero y lo masajeaba. Luego empezó a sacar mi remera y lo tiró en algún lado de mi habitación, caminó hasta nuestra cama y me tiró para posicionarse encima mío, yo saqué su remera y pase mi mano por su tonificado abdomen, él paso sus manos por mi espalda y desabrochó mi sostén, para luego despegar sus labios de los míos y bajar hasta mis pechos, haciendo círculos alrededor de mi pezón con su lengua, mi pecho libre era amasado por su mano. Una ves que atendió ambos, subió nuevamente a mi boca y yo empecé a desprender su pantalón, y con su ayuda, lo saqué de su cuerpo. Sacó mi pantalón, y empezó a refregar su miembro contra mi centro cubierto con mi ropa interior, él quitó ambos impedimentos y se introdujo rápidamente en mí en una estocada, provocando que mis uñas se entierren en su espalda, empezó un vaivén lento. Su rostro se escondía en mi cuello mientras succionaba la piel de esa zona, haciendo que suelte pequeños jadeos suaves, sus manos se aferraban en mi cintura.
-Alec - jadeé cuando empezó a subir el ritmo, el sonido chocante de nuestro cuerpo se empezo a escuchar, y el calor se empezó a sentir - ah, ah - gemí al sentir que una de sus manos abandonó mi cintura para empezar a estimular mi clítoris - Alec - grité sintiendo mi liberación, él dió unas estocadas más y se liberó también dentro de mí. Sacó su rostro de mi cuello y puso su frente sobre la mía.
-Te amo - dijo con el poco aire que tenía.
-Te amo más - dije y lo besé nuevamente, pero Jace ingresó a la habitación y Alec se apretó contra mi cuerpo intentando que no vea nada.
-Demonios - dijo el rubio dándose rápidamente la vuelta - Evie, vístete y búscame, necesito ayuda tuya - dijo para luego salir, con Alec reímos y nos empezamos a vestir.
-Jace - dije una vez que lo encontré en la sala de control - ¿que necesitabas? - pregunté.
-¿Puedes hablar con tu hermano para que le pida a Magnus para quedarme unos días en su departamento? - preguntó.
-¿Qué paso? - pregunté.
-Aldertree - dijo y suspiré.
-Quedate tranquilo, yo hablo con Isaac - dije para luego retirarme.
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