Evie Branwell es una de las mejores shadowhunters del Instituto de Nueva York, siempre sigue las leyes y hace bien su trabajo. Pero, ¿qué pasará cuando un familiar suyo del pasado venga a provocar muchos problemas? ¿podrá superar los obstáculos? ¿qu...
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Estaba investigando sobre un nido de demonios en Brooklyn mientras Alec leía un reporte, cuando una Izzie totalmente furiosa entró a nuestro despacho.
-No enviarás a nuestro hermano pequeño al campo - dijo Iz ni bien entró, Alec suspiró y se paró viendo a su hermana.
-Sabes mejor que nadie lo bueno que es Max - dijo Alec, apoyando sus manos en la silla donde me encontraba - sus simulaciones son excelentes.
-Eso es una simulación, hablo del mundo real - dijo Iz, furiosa.
-Max ya tuvo su Ceremonia de Runas, es estándar recibir órdenes después, como nosotros a su edad - dijo Alec.
-Era diferente, no íbamos contra Valentine - replicó mi Parabatai - no estabas allí la noche con Kaelie, estuvo cerca de morir.
-Max es un soldado, es hora de que comencemos a tratarlo como tal - dijo mi esposo, calmado, para luego volver a sentarse a mi lado.
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-Deberías ir a dormir - dijo Alec, mientras yo estaba acostada en el sillón.
-Te dije que no me iba a ir hasta que termines todo para que vayamos a dormir juntos - repliqué.
-Amor... - empezó a decir.
-No me vas a hacer cambiar de opinión, Alec - interrumpí volteando a verlo con una sonrisa. Él sonrió y se levantó de la silla para acostarse conmigo en el sillón, enredé mis manos en su cuello - te amo - dije viéndolo a los ojos.
-También te amo - respondió para dejar muchos besos cortos en mis labios - ¿vamos a acostarnos?
-Vamos - dije para levantarme con él e ir a nuestra habitación. En cuánto llegamos, me acosté, él se cambió su traje por el pijama y se acostó al lado mío dejando su cabeza en mis pechos y sus manos en mi vientre. Sonreí ante la escena y empecé a acariciar su cabello.
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