Sed Sádica - KTH +18

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Su piel desnuda, su suavidad al tener contacto con su piel, su cuerpo barrido en mi sangre y su jodida mirada lujuriosa vuelve a mi mente una y otra vez haciendo arder mi cuerpo por completo.

Me frustro al notar lo excitado que estoy por recordar aquellas escenas que no logro olvidar.

Jamás me tuve que masturbar porque jamás me quedaba con las ganas.

Si quería follar, iba directo a follar, sin necesidad de decir ninguna palabra cualquiera me habría sus piernas pero esa faceta de tener sexo todo el tiempo paso de mí después que me centre en otras cosas más importantes.

Al centrarme tanto en mí y las mierdas que tenía que hacer, al paso del tiempo ninguna me llegaba a satisfacer y eso me frustrada como la mierda entonces busque por otros rumbos.

Primero recuerdo ir a esa maldita discoteca gay que me habían recomendado.

Era como un juguete nuevo y atrayente allí adentro, todas las miradas curiosas estaban en mi y aunque era conocido por ser un asesino, criminal, mafioso, corrupto y mil mierdas más que habían inventado, no me miraban como si tuvieran miedo de mí sino con un deseo notorio.

Claro que sonreí con arrogancia al ver que con cualquiera me podía meter.

Y lo hice, sin esperar tanto yo no era alguien que daba vueltas al asunto.

Me folle a un chico con cabello negro, ojos oscuros y una sonrisa encantadora, era el único que me había llamado la atención.

Desde que había ido a la barra de tragos sentí su mirada clavada en mí y voltee a mirarlo con una ceja alzada pensado que iba a correr su mirada pero no lo hizo, mantuvo la mirada fija en mí.

Así que tome mi trago y di pasos lentos hacia él que por suerte se encontraba solo.

Th: Al baño -le susurro en su oreja y paso por su lado con las manos en los bolsillos-

Sentí sus pasos atrás mío, siguiéndome.

Por suerte no había nadie en el baño y si lo había me daba literalmente igual.

X: Hola, yo me llamo...

Th: No me interesa solo vamos a follar pero antes.. eres sumiso?

X: No

Th: Que lastima -murmuro yéndome pero me detiene sujetando mi brazo-

X: Pero puedo serlo esta vez por tí.

Le sonreí encantado, porque las personas no podía ser así? Obedeciendo mis ordenes sin hacerme enojar en vano.

Th: Perfecto

Bueno después ya sabrán lo que sucedió en aquel baño.

Aunque no era sumiso, accedió a mí porque no le deje otra opción sino buscaría a otro y listo pero él rápidamente me dijo que si, sin dudarlo.

Sonreí con suficiencia elevando mi puto ego, como siempre.

No puedo decir que no me gusto follarlo estaría mintiendo sino.

Con las mujeres siempre tuve que ser mas delicado porque se rompían fácilmente en cambio con este chico aunque le estaba a follando con cierta brusquedad, me pedía más casi lagrimiando.  

Pero aunque me la pase bien no se me hizo tan interesante y excitante como pensé que sería.

Así que no volví hacerlo, ahí en ese bendito antro también conocí a Cristian pero ni siquiera lo registre hasta que en varias salidas lo vi mirándome mucho,  sin disimular.