Loto azul (Drarry)

Capítulo 15 - La culpabilidad es objetiva

Capítulo 15 — La culpabilidad es objetiva

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El regreso a Hogwarts había sido tranquilo. Como estudiantes de quinto año, ahora algunos de ellos tenían el privilegio —u obligación para varios— de ser prefectos. Andrey había sido seleccionado como el prefecto de slytherin. Scorpius, aún con sus buenas calificaciones, no había sido tomado en cuenta debido a su prematuro retiro, sin embargo, a él no le importaba, porque lo único que se sentía como un logro para él era seguir vivo.

Habían pasado algunos días desde su regreso a la escuela, pero él aún no hablaba con sus amigos sobre lo que había vivido.

En esos momentos todos comían tranquilamente en el gran salón. Albus, como siempre, estaba a un lado de él; Edwin y Andrey estaban sentados frente a ellos.

Scorpius aún no se sentía recuperado de la experiencia cercana a la muerte; más que cansancio físico era cansancio mental el que sentía.

—Scorpius, ¿recuerdas lo que hablamos cuando estabas en cama? —susurró Albus, dejando su desayuno a un lado.

Scorpius volteó a verlo —No lo sé, ¿de qué hablas? —respondió.

Albus apretó los labios, pero luego sonrió —No importa, después te lo digo —respondió con calma, luego regresó a su desayuno.

Scorpius tomó otra cucharada de cereales. Claro que recordaba lo que Albus le había dicho, pero no quería hablar de eso ahora; aun dudaba si se lo había dicho por el momento en que estaban o porque realmente sentía algo por él, necesitaba comprobarlo. Antes de que él cayera enfermo, Albus no sentía nada por él, por eso era extraño para Scorpius pensar que sus sentimientos habían cambiado de un momento a otro.

Las lechuzas comenzaron a entrar por las ventanas. Scorpius levantó la vista. Era probable que alguna trajera una carta de su papá. Pero ninguna llegó. Scorpius sintió un poco de abandono al darse cuenta que no había recibido nada. Albus lo miró con atención y luego intentó animarlo.

—Aún estaba demasiado cansado, tal vez no tuvo tiempo de mandar la lechuza. Seguro la recibirás pronto.

Scorpius asintió, dispuesto a confiar en sus palabras.

De pronto, sintió una mano en su hombro, por lo que volteó para ver quién lo llamaba. James Sirius se encontraba tras ellos con un periódico en la mano.

—Draco está arrestado —dijo este con preocupación, mostrando la portada del periódico.

En el encabezado se podía leer con letras grandes: "Los exmortífagos Draco y Lucius Malfoy secuestran y torturan a auror" seguido de una enorme foto de su papá siendo llevado por dos aurores.

Scorpius tuvo un enorme sobresalto. No podía ser. Acababa de dejar a su papá solo y ahora su familia estaba arrestada.

Los murmullos comenzaron a crecer por el gran comedor, Scorpius notó a todas las personas volteando hacia él.

"¿No es ese un Malfoy?" y "Maldito mortífago" fueron unos de los tantos murmuros que pudo entender.

—Vámonos de aquí —apuró Albus.

Edwin y Andrey se pusieron de pie, demostrando que irían con ellos.

Scorpius decidió que salir de ese lugar era lo mejor por ahora. Cuando iban hacia la salida Bulstrode se paró frente a ellos.

—Sabía que los Malfoy eran unos mortífagos, siempre lo fueron —dijo con saña.

—¡Draco no es un mortífago! —gritó James—. ¡El que se atreva a decir lo contrario que venga a decírmelo en la cara!