La madriguera estaba siendo cubierta por el resplandor del sol.
Los hermanos Weasley estaban por esa ocasión en la madriguera. Bill estaba con Fleur quien había ido a visitar a su pelirrojo mientras Howard estaba enfrentándose a un aquelarre que amenazaba al clan, Charlie estaba más ocupado comienzo unos bocadillos de lo que pasaba a su alrededor, pero al mismo tiempo parecía que se estaba carteando con alguien, Percy estaba con Maggie quien había sido enviada allá con ellos para que no pasara nada malo, mientras que los gemelos estaban sentados bajo el árbol, leyendo sus libros de leyes mágicas.
Bill había vuelto a colgar en la rama mas alta del árbol que había cerca de la madriguera el columpio que habían hecho hacia varios años atrás, Fleur se impulsaba haciendo que su perfecto cabello rubio brillará bajo el sol, e vestido azul hacia juego con sus ojos, su pálida piel estaba llena de pecas, sus pies descalzos estaban extendidos en el aire, chillaba alegre por ser columpiada por Bill quien parecía feliz de tenerla ahí con ellos y la realidad era que ambos estaban felices de estar al lado del otro.
Las juntas en el consejo del wizengamont se estaban volviendo más entretenidas, tal vez porque las cosas parecían tomar un buen lugar y eso le daba paz, pues las juntas no eran tan extensas y no se volvería loco, lo que si le volvería loco eran sus hermanos.
Charlie estaba bien, siendo soltero y eso le daba tranquilidad porque su hermano por el momento no quería una pareja.
Percy, ¡Oh, Percy! Su pequeño hermanito ya estaba comprometido con Maggie y no es que se quejara, era que se negaba a ver a un adulto, para él, percy seguía siendo el niño que se abrazaba a sus piernas y pedía atención.
Los gemelos por otro lado, que merlín se apiade de él. Esos dos eran un peligro potencial, si bien estaban aprendiendo todo sobre las leyes, no quitaba el hecho de que a más de uno ponían nerviosos e incluso, podían causar paros cardiacos.
Ron era un asunto muy diferente, y vaya que lo era. Quería a su hermano, claro que sí, pero ahora no sabía que pensar. Desde que Fleur llego con él a la madriguera, su hermano no había dejado de tratar de coquetearle, de hacerle comentarios sugerentes ni mucho menos, de lanzar miradas pervertidas a su prometida, también estaba el detalle de la carta que Lord Gaunt le había mandado, donde se explicaba que su hermano estaba haciendo sentir incomodas a sus compañeras y eso le estaba preocupando, pues sentía que Ron no había sido "educado" de forma adecuada por su Molly; tal vez, ella pensaba que por ser hombre, todo se le podía pasar por alto.
Y la ultima era Ginny, su única hermana y la que más preocupado le tenía. Desde que su hermana nació, fue el centro de regalos y alabanzas, desde comentarios de que era la bebé más hermosa, hasta que tenía un futuro brillante y no lo dudaba, todos sus hermanos eran inteligentes, pero Ginny estaba en una burbuja de color rosa. Entendía que al vivir en un mundo donde existía la magia, descidiera que ella debía de casarse antes de cumplir años, pero ¿Cómo explicarle a una niña de catorce años que no puede desposarse sin un dote fijo? Pero sobre todo, ¿Cómo decirle que no podía casarse con el heredero Potter? Tenía que pensar que era lo que pasaría, tenía que calmarla y sobre todo, tenía que hacerla entrar en razón para que no hiciera algo estupido.
Bill suspiró frustrado, tenía que pensar que era lo que ia hacer, pero ahora, ahora iba directo hacía la tienda de túnicas, donde comenzarían a confeccionar las túnicas que necesitaría para el viaje que realizaría con Fleur y Howard.
El viaje. Ese bendito viaje que se colaba perfectamente en el regreso de sus hermanos a la escuela, con Percy en el clna y Charlie en Rumania, podría sentir algo de paz, pero sobre todo, porque tenían que comenzar a pensar en los preparativos de la boda y no es que le incomodara, sino que realmente no tenía ni idea de como realizar una boda como era debido, por lo cual, decidió que después de las túnicas, visitaría a su abuela Walburga Black.
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𝐔𝐧 𝐓𝐫𝐢𝐨 𝐏𝐞𝐜𝐮𝐥𝐢𝐚𝐫 (𝙱.𝚆-𝙵.𝙳-𝙷.𝙳) ᵈᵒˢ
FanficBill Weasley esperaba cualquier cosa aquel verano del 94, menos que conociera a un vampiro, hermano de la chica que le gustaba a su hermano, oh sí, Percy estaba enamorado de una niña de trece, pero no era nadie para juzgar, lo que si no se esperaba...