Situación: Cuando se enteran que matas por dinero.
🐢Hyungwon:
—No lo entiendo, no entiendo porqué.
—¡Es que no quieres entenderlo, Hyungwon!
—No, no es que no quiera. No puedo entenderlo, simplemente.
—¿Por qué? ¿Por qué no puedes entenderlo?
—¿Porque quién te crees que eres para decidir quién vive y quién no?
—No lo decido yo, cariño, lo decide el dinero —soltaste con una sonrisa cínica.
—¡Eso no justifica nada! —dejó caer su mano en la superficie de la mesa, haciendo que dieras un pequeño salto en tu lugar.
Hyungwon había encontrado las dos armas que solías guardar entre tus cosas por si surgía alguna emergencia o en caso de que te llamaran de imprevisto. Claro, no le pareció la idea de que guardaras armas en su casa, y menos si era a escondidas de él.
Tuviste que confesarle de dónde habían salido las armas, en dónde guardabas más y por qué las considerabas herramientas de trabajo, cosa que alarmó a tu novio.
—¿No justifica nada? —murmuraste y él te dio la espalda, pasando la mano por su cabello oscur— Hyungwon, si tan solo me escucharas, si me dejaras explicarte...
—¿Cómo me vas a explicar eso?
—¡Déjame hablar, por favor!
Volviste a alzar la voz, harta de no ser escuchada y de que tu novio comenzara a creer que eras una maldita psicópata que mata por diversión.
—Mi trabajo no es lo que esperabas. Nadie espera escuchar eso, mucho menos de una mujer. He estado involucrada en este trabajo desde mucho antes de conocerte, pero no te dije nada por obvias razones —Hyungwon te miró detenidamente—. Sí, lo admito, hago estas horribles cosas por ganar un poco dinero y no estoy para nada orgullosa de lo que me hacen hacer. Mancho mi nombre y hago a un lado mis principios morales para tener algo de solvencia y ayudarnos a permanecer juntos y vivir debidamente.
Esas palabras comenzaban a dañar a Hyungwon de cierto modo. Él nunca quería que sintieras una presión por aportar algo económico en su relación, él ganaba lo suficiente para poder estar bien por este pequeño tiempo que habían comenzado a vivir juntos. Ahora no sólo estaba molesto contigo, sino con él mismo por nunca hacerte sentir cómoda en ese aspecto.
—Y sí, tienes razón. Nadie decide quién vive y quién no, pero tampoco considero justo que las personas que son en verdad malas sigan desperdiciando oxígeno para quienes sí lo merecen —el chico te miró curioso y algo confundido por esa última aclaración—. Sólo me encargo de desaparecer gente mala, muy mala. Nada más.
Un silencio invadió el comedor y Hyungwon sintió cómo sus nervios desaparecían y sus músculos se relajaban un poco después de tu confesión. Sabía que había un gran "pero" en esas horribles acciones que hacías, pero necesitaba escucharlo de ti para poder estar tranquilo.
—Entonces, supongo que es todo.
Lo miraste alarmada y con el ceño fruncido. Después de un largo silencio, era lo último que querías escuchar por parte de él.
—¿A qué te refieres?
—A que será todo lo que me dirás —tu cuerpo se relajó un poco y lentamente volviste a bajar tu mirada, asintiendo con la cabeza a lo que él decía—. Bien.
Hyungwon tomó asiento en la silla que estaba continua a la tuya, apoyando los codos en sus rodillas y dejando su rostro muy cerca del tuyo.
—Eres una tonta —las palabras salieron tan frías, tan secas de sus labios que tus ojos se posaron en los de él, mirándolos atentamente con una expresión entre confusión y dolor—. Eres una tonta por creer que nunca me iba a enterar y por ocultarme esto por mucho tiempo. Las mentiras tarde o temprano son descubiertas y los secretos siempre son revelados, y yo no puedo creer que me hayas creído tan ingenuo como para pensar que yo jamás me iba a dar cuenta de eso.
Las palabras de tu novio retumbaban en tu cabeza y poco a poco pudiste sentir su pesar, aquel dolor que provocaste al no confiar tan importante información de tu vida con él.
Hyungwon mantenía su postura, analizando tu cara y tratando de descifrar ese sentimiento que estaba a punto de aparecer en tus ojos.
—Nunca creí que fueras ingenuo y tampoco esperaba menos de ti, Wonnie —tomaste sus manos y juntaste sus frentes—. Comprende que simplemente te estaba tratando de proteger de todo... de mí.
Sentiste cómo él comenzaba a acariciar el dorso de tus manos con sus pulgares, como si estuviera jugando suavemente con ellas.
—Tienes razón, fui una tonta al pensar que te estaba protegiendo de las personas del exterior, cuando en realidad, quien todo el tiempo pudo estar más cerca a lastimarte, dormía junto a ti todas las noches.
Las largas manos de Hyungwon subieron a tus mejillas rápidamente para terminar con la casi nula distancia que había entre sus labios. Un beso extraño, a tu parecer, pues no sentías más que su lástima y dolor. La lentitud de ese beso no era como los que se daban después de un día agotado o cuando estaban en la intimidad, sino que ahora podías sentir su perdón en este.
Ya se habían dicho de todo esa noche, y justo en ese momento, no hicieron falta las palabras para compartir lo que sentían.
Después de un largo baño y una vez dentro de la cama, con las sábanas y el brazo de tu novio sobre tu figura, viéndose fijamente hasta que alguno de los dos cayera en el sueño, decidiste volver hablar para tratar de arreglar las cosas.
—Si quieres, mañana mismo me deshago de las armas.
—Sólo quiero que tú estés bien y que nada malo te llegue a pasar —dijo él, pegando aun más su cuerpo al tuyo y quedando dormido al instante. Probablemente sólo hablaba durante el sueño.
No supiste cómo interpretar eso último, así que le restaste importancia y decidiste aclararlo todo de una vez al día siguiente.
![](https://img.wattpad.com/cover/190975268-288-k965364.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Imaginas con Monsta X
Fanfiction•IMAGINAS: Pequeños imaginas (algunos) basados en canciones de Monsta X y algunas propias. •REACTION: Situaciones random donde se describen las reacciones de los chicos. •BE LIKE: "Los chicos como...", describiéndolos en otros roles. ✨¡E...