𝓔𝔁𝓽𝓻𝓪 4

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Había pasado tanto tiempo desde que Soobin y YeonJun empezaron una relación más seria. Con esto me refiero a que las madres de ambos estaban al tanto de esto igual que sus familias enteras puesto que los dos habían decidido contarles de sus futuros planes.

— ¿Casarse? — la madre de Soobin parecía atónita pero muy feliz por su hijo que viéndolo ahora ya era un hombre totalmente adulto. No el joven universitario ni el adolescente de antes, ya no, podía verlo en su expresión seria y decidida al contarle algo de gran valor para él.

— Sí mamá — dejó los platos limpios a un lado para mirar a su madre con una sonrisa — le he propuesto matrimonio a YeonJun y en este momento estamos planeando la ceremonia. Quería decírtelo en nuestra anterior visita pero nuestros trabajos se interpusieron, perdón. — espetó avergonzado pero su progenitora sólo negó y lo abrazó fuertemente.

— No puedo creerlo todavía — acarició los cortos cabellos del pelinegro quien también la abrazo como el niño pequeño de años pasados. — Apenas hace una semana Jin vino a decirme que tendría un bebé con NamJoon, tu hermanito Kai me llamó por videollamada desde Hawái para presentarme a su novio y ahora tú — con su desgastada mano tomó la mejilla de su niño para mirarlo con lágrimas de dicha en los ojos — mi hijo Choi Soobin va a casarse.

— Es lo que más quiero junto a YeonJun.

— Lo sé cariño, él ya ha demostrado un millón de veces que te ama sin segundas condiciones y eso como tu madre me hace pensar que no tendré que preocuparme por ti, tan sólo desearte mucha felicidad junto a él. — volvió a abrazarlo dejando un beso en su frente — cuídalo, respetálo y ante cualquier situación no dejes que aquello impida que se arreglen. Ya no serán más dos, van a ser uno igual que un equipo — lo miró y con una gran sonrisa su madre exclamó emocionada — ¡Felicidades mi niño! ¿Ya decidieron la fecha? ¿El lugar? ¿Será de mañana, tarde o noche? ¿YeonJun necesita algún catálogo para los arreglos de mesa o flores? Tengo un conocido buenísimo en arreglos de boda. Si quieres reservo un apartado para ambos.

Soobin rió por la horda de preguntas.

— Por el momento un amigo de YeonJun nos habló de un lugar con buen espacio para todos nuestros invitados. No hemos decidido todavía la hora exacta o el diseño de los arreglos de mesa, pero YeonJun quiere celebrarlo por la tarde con muchas rosas blancas y rosadas.

— Entiendo y...¿La luna de miel? — sonrió y Soobin bajo la cabeza riendo nervioso por la cuestión.

— Eso...hum...— aclaró su garganta para calmar sus nervios — estuve pensando varios lugares mamá, pero ¿Dónde crees que podría ser un buen lugar memorable? Quiero que sea sencillo pero significativo también. Algo que recordemos los dos.

— Pues tu padre me llevó a caminar por la playa cuando el sol ya iba metiendose por el horizonte.

— ¿La playa?

— La playa durante los atardeceres es muy hermosa y pacífica — suspiró recordando su época dorada — Pero sólo es una sugerencia, quizás incluso se te ocurra algo mejor en el camino.

— Lo tendré en cuenta, suena bonito.

— Lo es.

El teléfono de Soobin sonó y su madre salió de la cocina para darle privacidad a su hijo. Suspiró un tanto melancólica mientras limpiaba el comedor, pensar en que cada uno de sus hijos estaba creciendo frente a sus ojos era casi irracional. Apenas ayer Soobin le anunció su noviazgo con aquel pelirrosa estando en último año de su carrera universitaria y ahora, van a casarse.

— Supongo que tendré mi nido un poco solitario, no amor? — tomó la fotografía de su esposo y plantó un beso en ella. — ojalá pudieras ver este gran paso en la vida de Soobin y acompañarlo. — delineó la silueta de la foto — algún día volveremos a estar juntos, espera por mí cariño.

FILLE IDIOTE, IL EST À MOI © ║SooJun║✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora