El peón de mi hermano

Padres.

-Continuamos-

-Narra Narrador omnisciente-

-Academia de Kuoh-

-Al día siguiente-

¡Esto tiene que ser una maldita broma!- Fue el grito que dio un estudiante cualquiera  mientras veía como las chicas de la academia veían a Issei jugando con su pequeña hija durante el descanso y también era extraño ver como algunas profesoras se quitaban su anillo de compromiso.

Pero claro, lo extraño es que ninguna chica o persona en general se quería acercar a ellos; por parte de las chicas sentían la presencia de una criatura que las estaba alejando de donde estaba su maestro favorito y en cuanto a los chicos, ellos solo sentían una sensación que con se acercaran a menos de 1 metro de la pequeña, ellos sufrirían mucho dolor. Aunque eso era para las personas normales, era diferente para el club de ocultismo y el consejo estudiantil, pues ellos por lo menos podrían hablar con Issei y su hija, ellos parecían ser inmunes a dicha sensación que el resto sentía. Cosa que no era cierta, pues ellos también la sentían y solo la soportaban porque sabían que se trataba del aura de una niña no queriendo que nadie le quitara el tiempo con su padre y de un padre sabiendo que en esta escuela había mucho loliconero y no quería que se acercaran a su hija.

Pasado el descanso y volviendo a las clases, en el salón del grupo 2-B, se les estaba dando el anuncio de que el día miércoles se realizaría las clases abiertas a padres, cosa que obviamente no emociono a nadie, sobre todo a un dúo de pervertidos que deberían contenerse ese día para no ser regañados por sus progenitores. Pero ese dúo no nos importa, lo importante es otro dúo.

¿Estas emocionado por la visita de los padres, Seiya?- Fue la pregunta que Asia le hizo a su primer amigo y el hombre del que se había enamorado.

No mucho, siempre en estas cosas mi madre me avergüenza o mi padre me hace competir con el hijo de un tipo que acaba de conocer y que decía que su hijo era el mejor en algo.- Asia se rio de manera nerviosa por la respuesta de Seiya. 

Una vez terminadas las clases, todos los alumnos que tenían alguna actividad o eran miembros de algún club, fueron a sus respectivas aulas, y ese es el caso del club de ocultismo, aunque ellos fueron juntos con el consejo estudiantil, pues Issei debía decirles algo importante.

Ya una vez en el club, los chicos también se reunieron con ambas exorcistas; las cuales se estaban quedando en un departamento que Sona les presto.

Bien, ya que todos llegaron, creo que podemos iniciar con esta pequeña reunión.- Fue lo que dijo Issei sentado en el escritorio con su pequeña hija sentada en sus piernas; la cual se encontraba jugando con un videojuego.

Primero debo avisarles que el día del concilio de las tres facciones bíblicas se realizara un día después de la clase abierta a padres, así que Rias, debes encontrar un lugar donde el señor Sirchez y la señora Grayfia puedan quedarse.- Rias solo asintió como respuesta a la petición de Issei. Aunque se podía ver tranquila por fuera, por dentro...

¿Cómo se entero mi hermano de la clase abierta, acaso Issei o Grayfia le dijeron? ¡Ya es malo que mi papá venga, pero con mi hermano aquí, voy a pasar la peor vergüenza de mi vida!- Rias solo soltó una sonrisa tranquila después de tener esa pequeña crisis en su cabeza.

Como segundo punto, ya casi son las vacaciones de primavera y eso significa el primer viaje para muchos de ustedes al inframundo. Así como también significa la reunión de los jóvenes demonios.- Esa última parte emociono a Randy, pues eso significaba que finalmente podría conocer al que su maestro siempre decía que era su mejor alumno. Lo primero hizo sonreír a Sona, pues ya casi era tiempo de decirle a Issei sobre sus verdaderos sentimientos.