Capítulo 18

52 8 0
                                    

Jay y Jungwon no se quedaban atrás, el menor se encontraba debajo del rubio y este último besando sus labios como si fuera la última cosa que pudiera hacer. El mayor no podía alejarse de Jungwon, amaba la suavidad de sus labios, su sabor y la manera en la que estos encajaban a la perfección con los suyos.

Y aunque ninguno de los dos quería alejarse pero la falta de aire los obligó a hacerlo, cuando lo hicieron ambos se miraron a los ojos, sus respiraciones eran agitadas y sus labios estaban hinchados y enrojecidos.

"Jay" Jungwon rodeó con sus brazos el cuello ajeno sin romper el contacto visual. El rubio pudo percibir nerviosismo en el menor así que para calmarlo lo envolvió en sus brazos e intercambió las posiciones dejándolo arriba de él.

"Ssh ssh, intenta dormir" puso una de sus manos sobre la cabeza ajena y hundió sus dedos lentamente en el cabello del más bajito.

Jungwon al sentir el toque suspiró y se dejó llevar por el tacto tan cuidadoso y gentil. Pocos minutos después el menor se quedó profundamente dormido, Jay al darse cuenta también se dejó llevar por el cansancio.

"No..." sollozó el chico de ojos esmeralda al mismo tiempo que miraba el espejo; completamente vacío. Como era de costumbre Heeseung despertó antes que todos y fue de inmediato a su ahora lugar favorito, pero al encontrar el espejo sin rastro de Geonu comenzó a entrar en pánico. Lo llamó por varios minutos sin recibir respuesta alguna. "¿Dónde estás?" Susurró casi dándose por vencido.

En los pasillos Jay pudo escuchar la desesperación y tristeza del mayor, lo buscó por todos lados hasta que por fin se encontró con el pasadizo secreto; ingresó a este aún inseguro de su decisión pero no se detuvo. Las emociones se hacían cada vez más fuertes conforme avanzaba sin embargo estas llegaron a su punto más alto en cuanto llegó al final del túnel; ahí pudo observar el enorme espejo y en una de las esquinas inferiores estaba Heeseung, en el suelo y sobre sus rodillas a la par que se sostenía el rostro con ambas manos.

"Heeseung" dijo suavemente el rubio al mismo tiempo que caminaba con cautela hacia el mayor; este no se movió ni un solo centímetro. "¿Qué ocurre?" Volvió a preguntar una vez que pudo llegar junto al pelinegro.

El chico de ojos esmeralda levantó la cabeza y miró a Jay, sus orbes estaban totalmente enrojecidos e hinchados por llorar tanto, esto no pasó desapercibido por el menor el cuál sin esperar un solo segundo más abrazó a Heeseung, sabía perfectamente que tenía el corazón destrozado.

"Se fue" sollozó en el hombro ajeno mientras que más lágrimas inundaban sus ojos y corrían por sus mejillas.

Jay no hizo una sola pregunta, habría tiempo para ellas en un rato más ahora lo que debía hacer era tranquilizar al mayor y sacarlo de ese lugar antes de que empeorara.

"Vamos, regresemos con los demás" el rubio intentó levantar a Heeseung pero este no lo permitió, comenzó a negar con la cabeza mientras que lloraba aún más fuerte. "Está bien está bien, nos quedaremos aquí" volvió al suelo pero no soltó el abrazo, solo se dedicó a sobar la espalda contraria para así relajar al más alto. Así pasaron 10 minutos en los cuales Jay se dedicó a escuchar e intentar calmar el llanto de Heeseung; este cesó después de un rato, se había quedado dormido y fue ahí cuando el menor lo cargó en su espalda hasta la habitación del pelirrojo y lo depositó con cuidado sobre su cama. "Sunoo, Jungwon, vengan a la habitación de Heeseung" llamó a los dos menores dentro de su mente. Estos llegaron pocos minutos después, completamente confundidos por el repentino llamado.

"¿Qué ocurre?" Preguntaron al unísono mientras se acercaban a la cama.

"Heeseung no está bien, necesito que se queden con él por un rato" ambos menores asintieron para después subir junto al chico de ojos esmeralda. Cada uno se puso a un lado del cuerpo ajeno, Jungwon a la derecha y Sunoo a la izquierda. "Ya vuelvo" Jay caminó hacia la salida y dejó la habitación.

Given (Enhypen) IDonde viven las historias. Descúbrelo ahora