SNS // Kookmin

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La habitación estaba en completa oscuridad y por esa razón Jimin no podia descifrar si era muy temprano o aún madrugaba, lo único de lo que estaba seguro era que Jungkook y él hacían cucharita, siendo el rubio la cuchara chica.

—¿Ya te despertaste?—La voz ronca del peli negro sonó en su nuca, causándole escalofríos.

El rubio se removió hasta quedar frente a frente, aún cerrando sus ojos y enterrando su cara en el pecho de su novio.

—No.— Respondió.

Jungkook rió levemente, abrazándolo más.

—Son casi las doce, mi papá ya debe haber llegado con Seokjin.

Jimin abrió los ojos en demasía.—¡¿Las doce?!

—Sí, pero no te preocupes, le avise por mensaje que no entraran a la habitación.

El rubio se sonrojo, pues ambos tenían solo sus boxer puestos, la ropa estaba esparcida por la habitación y si miraba la mesita de noche aún yacía el preservativo que habían usado previamente.

—Igual, debemos bajar ya.— Jimin se apresuró en salir de la cama.—Ah-ah ¿es normal que duela?— se quejó.

—Fue tu primera vez amor, es normal sentir incomodidad, pero puedo darte analgésicos cuando bajemos, debo mimarte mucho.— dijo mientras se ponía de pie.

—¡No! Él que debe mimarte soy yo.—Rápidamente envolvió a Jungkook en un abrazo.—Feliz cumpleaños, estoy feliz de que hayas nacido.

El peli negro podía jurar que Jimin lo hacía derretirse de amor, se sentía tan afortunado.

—Gracias, Jimin, mi amor. Estoy feliz de haber nacido también, si no ¿quién iba a ser tu novio?

—Seguro que nadie más lo lograba.— Bromeó.

Ambos se vistieron en un corto lapso de tiempo, yendo al baño para lavar sus dientes.

—¿Te importa si hago pipi mientras?—Cuestionó el peli negro.

Jimin negó, aún cepillando sus dientes.

Una vez que estuvieron listos ambos bajaron, encontrándose al padre de Jungkook y a su hermano en la cocina.

—¡Feliz cumpleaños, mocoso!— Exclamó Seokjin, dejando de lado el sartén para ir a darle un abrazo.

—Hyung, mi regalo.—Dijo Jungkook una vez rompió el abrazo.

—Ah, ni un "¿cómo estás?"— Se quejó, pero ambos sabían que bromeaban.—En la mesa. Oh, ¡Hola, Jimin!

—Buenas tardes...

—Puedes decirme hyung.— Aclaró Seokjin.

—Buenas tardes, hyung.

—De hecho no, ahora debes decirle cuñado.— Añadió Jungkook, mientras quitaba la envoltura del regalo.

—Hijo, no molestes a Jimin, hasta acá veo que se ha puesto rojo.— Intervino el padre de los Jeon, quien cocinaba aún.

—Uh, buenas tardes...no lo había visto.— Jimin le hizo una reverencia.

—No te preocupes, ¿cómo la pasaron ayer? Yoongi y un amigo de ustedes que se llama Tae-

—¡Yoongi y Taehyung!, ¿Donde están?— Jungkook preguntó, recordando la existencia de sus amigos.

—En la sala, viendo la televisión, limpiaron la casa solitos y por eso les dije que se quedarán a comer. Por cierto, tus amigos de Busan se fueron temprano porque debían tomar el primer tren— Añadió Seokjin.