PROMESAS Y MENTIRAS // Yoonmin

Gracias por cuidarme

Solamente habían transcurrido dos días desde que comenzó el curso y ya todos estaban ansiosos por las vacaciones. 

Jimin y Hoseok  se encontraban en la última clase antes de salir a comer y este horario le correspondía al profesor Kim. 

El rubio  sintió sus mejillas arder de la pena en cuanto entró al salón de clases y se encontró con el profesor que lo rescató esta mañana de meterse en un grave problema. Kim compartía el mismo sentimiento de solo recordar que su alumno lo había visto con su pijama de corazones favorita. Quien diría que el profesor Taehyung tan elegante siempre, vestiría una pijama tan tierna para dormir.

Y como era de esperarse, Jimin no se pudo concentrar, pues durante toda la clase solo podía pensar en dos cosas: la noche anterior y Min Yoongi. La noche anterior en la que sufrió un ataque de pánico y fue salvado por Yoongi. En que no era la primera vez que se besaban pero se sentía como si lo fuera, porque esas cosquillas que sintió en el estómago al rozar sus labios con los del contrario ya habían aparecido una vez, en ese baño, y en esa sala. 

Solo de recodarlo se estremeció.

Jimin sabe que pensar esas cosas no son correctas, porque él es su alumno y Yoongi su profesor, aunque, la primera vez que se besaron no eran nada y la segunda ... la segunda fue para salvar a este, nada más. Aun así, el rubio no puede sacar esos recuerdos de su mente.

La clase había terminado sorprendentemente rápido para el rubio porque como siempre, gracias a sus pensamientos volando fuera de órbita, no prestó atención. Ni siquiera supo en qué momento la alarma sonó, y solo una voz fue la que lo regresó a la tierra.

-Jimin, ¿puedes quedarte un momento por favor?

-¿Ah? -Jimin había sido desprendido abruptamente de sus pensamientos y ahora el profesor Taehyung solicitaba hablar con él. -Acércate Jiminnie, yo te espero afuera. -Hoseok le susurró y haciendo una reverencia, salió del aula.

Jimin se acercaba lentamente a Taehyung poniendo su mochila en su espalda para luego bajar sus manitas y jugar con ellas. Se estaba poniendo nervioso otra vez.

-Jimin, ¿te sientes bien? -La voz del profesor Kim era tranquila y amable.

-S-Sí, profesor, todo bien gracias.

-No sé cómo decirte esto pero me siento responsable por lo que pasó ayer. -Guardó silencio esperando una reacción del contrario pero este simplemente se limitó a escuchar sin soltar algún comentario. -Verás.- Suspiró pesadamente.  -Yo le presté la tarjeta a Yoongi porque me dijo que necesitaba hablar contigo, pero ... no entiendo que fue lo que pasó. -decía mientras pasaba la mano por su cuello.

-No se preocupe. -Jimin asintió por fin. -No fue su culpa, esas cosas a veces fallan.

-Gracias Jimin. -Tae le ofreció una pequeña sonrisa. -Y dime Taehyung, por favor.

-¿Cómo?- el rubio abrió los ojos completamente.

-Sí.- rió. -Si ya me viste en mi pijama favorita, las formalidades ya no tienen lugar entre nosotros. -Se encogió de hombros y ambos rieron.

-De acuerdo, Taehyung, gracias por eso. -le dedicó una amplia sonrisa. -Y no, no fue tu culpa. -dijo mientras hacía una reverencia y salía del salón para reunirse nuevamente con Hoseok.