Y así fue que a las seis en punto de la mañana siguiente estaba volando por la I-20 hacia el oeste en el asiento del pasajero de la enorme camioneta de Kim Minji, dirigiéndonos hacia California. Si conducíamos todo el día durante tres días, podíamos llegar a tiempo para las horas de visitas de este sábado en la prisión.
No había dormido bien. Mina había estado inquieta toda la noche, dándome la clara sensación de que quería cancelar todo el asunto. Y luego Minji apareció, calmándola con la promesa de que ella no tenía cuernos o una cola.
Me alejé del espejo lateral para no ver las bolsas bajo mis ojos. Pensé en tratar de dormir, pero no sabía si sería capaz de relajarme lo suficiente. En su lugar pensé en Dani y nuestra conversación anoche. Él había estado emocionado y a la vez preocupado ante la idea de que Minji y yo cruzáramos juntas el país. Iba y venía, atrapado entre su deslumbrada admiración por la baterista de Lascivious y su lealtad hacia mí como amigo. Tuve que callar a Daniel cuando comenzó a cantar "Yoohyeon y Minji sentadas en un árbol."
—¿Por qué estás sonriendo? —preguntó Minji.
—Um, sólo estoy pensando en cuando hablé con Dani anoche.
—¿Tu novio?
Sacudí la cabeza, sin permitir que me hiciera enojar.
—Me enseñó un chiste para ti. ¿Cómo sabes si un baterista está en tu puerta? —No esperé su respuesta—. La velocidad del golpe aumenta y él no sabe cuándo debe entrar.
—Pfff. Qué chico divertido.
El teléfono de Minji sonó.
—Creo que es tu mamá, er, quiero decir, Mina. —Me entregó el teléfono.
—¿Hola? —dije. Apenas habíamos viajado por una hora y ella ya estaba llamando. No era bueno.
—Oh, Yoohyeon. ¡Gracias a Dios! —Mi corazón dio un gran latido dentro de mi pecho.
—¿Qué sucede? ¿Pasó algo malo?
—Creo que deberías regresar a casa.
—¿Por qué? —Contuve la respiración y presioné una mano contra el pecho.
—Ésta fue una mala idea. Por favor, simplemente da la vuelta... —Estaba comenzando a divagar en esa manera nerviosa suya. Exhalé.
—Mina, me asustaste muchísimo. Creí que algo había sucedido. Mira, todo está...
—¡No! ¡No me digas que todo está bien! —Miré a Minji, que estaba mordiéndose el labio. Me llevé una palma a la frente—. No puedo creer que te permitiera ir —dijo Mina—Lo siento tanto. Soy la peor madre del mundo. Simplemente regresa a casa. Me pondré en contacto con tu padre y le pediré dinero...
Cuando comenzó a llorar, moví mi cuerpo hacia la ventana y me incliné hacia adelante, intentando pensar en una manera de calmarla. Mantuve mi voz moderada y suave.
—Por favor no me pidas que regrese a casa, Mina. Hiciste lo correcto. Necesito conocer a la Hermana Ruth y a mi padre. Es hora. Te llamaré cada hora, si eso te hace sentir mejor.
Ella estaba llorando completamente ahora. Mi corazón se apretó al escuchar su dolor, y mis ojos quemaron.
—Eres la mejor madre del mundo —le aseguré—. Por favor confía en mí en esto. Tomamos la decisión correcta.
Ella dejó escapar un suspiro profundo.
—Si algo, y quiero decir si algo te sucede —dijo—. Será mejor que me llames de inmediato. No me importa qué tenga que hacer para conseguir el dinero, pero una de nosotras estará en un vuelo inmediato hacia la otra. ¿Me oyes?
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Sweet Evil || Jiyoo ADAPTACIÓN
CasualeYoohyeon solía ser una buena chica. Hija de un ángel guardián y de un... ángel caído. Ahora su vida depende literalmente de tentar a los demás al pecado pero su alma depende de resistir la tentación. Solo tiene a Minji. Y todo lo que quiere hacer es...