Dormir con YoonOh nunca ha llegado a ser un problema. Al principio tal vez, cuando no había tanta confianza y era de las primeras noches de películas que hacíamos, después fue común que cada cierto tiempo dormimos de forma incómoda en el sofá de la sala.
Tal vez no sea incomodidad, o sí, el tener que dormir con él ahora. Cuando mis sentimientos por él no son solo de amistad y también no estando en un lugar a la vista de nuestros padres.
Es raro.
— Jiwon. — Jay llamó haciendo que voltear mi cabeza en su dirección, los dos estábamos mirando el techo. — ¿Crees que sea bueno hacer una declaración en el día de su cumpleaños? — pregunta sin dejar de mirar el techo, sus mejillas ya están coloradas.
¿Piensa declararse en el cumpleaños de Chaeyoung?
— No lo sé, supongo que sí.
Jaehyun se queja por la forma vaga en que respondí, acomodando su cuerpo de lado para poder verme mejor. Imito su acción, quedado frente a frente.
— Si alguien se te declara en tu cumpleaños, ¿Cómo te sentirías? O, ¿Que harías? — él alcanza un mechón delgado de mis cabellos, empezando a jugar con el entre sus dedos. Los latidos de mi corazón empezaron a elevarse.
— No lo sé, si el chico me gusta sería un buen regalo. Si no, creo que al rechazarlo me sentiría mal el resto del día. — digo acercándome un poco más a su cuerpo, de forma disimulada y sin que se note tanto.
— No había pensado en eso. Gracias, Jiwon.
— No es nada, YoonOh.
Nos observamos en silencio un pequeño rato, YoonOh deja de jugar con mi cabello y noto que se acerca de la misma manera que yo lo hice. No quiero sonreír, pero las comisuras de mis labios se levantan un poco al mirar sus mejillas más rojas que antes.
— Creo que me estoy enamorando.
Mi sonrisa poco a poco va bajando. La sensación de saber que el chico que te gusta esta enamorado de otra persona es fea, dolores en el estómago o pequeños piquetes en el pecho.
Mamá dice que son celos.
Y sabiendo que él nunca corresponderá mis sentimientos, decido confesar. — Yo también.
En los ojos de Jaehyun hay sorpresa y miedo, y para no seguir mirando lo que posiblemente se convierta en una mirada de desprecio termino dándole la espalda. Siento su cuerpo tenso a mi lado.
— Buenas noches, YoonOh.
— Buenas noches, Jiwon.
Siento como Jay hace movimientos a mi lado, pero al darle la espalda no sé que es lo que hace. Cierro los ojos para tratar de conciliar el sueño antes de que mi tonta boca diga más de lo que debería.
— Tengo frío. — dijo el chico a mi lado antes de acercar su cuerpo al mío hasta quedar casi pegados, pasando su brazo por mi cintura para pegarme más a él. — Deberíamos abrazarnos, el calor que proporciona el cuerpo es el mejor, o eso dicen.
Asiento nerviosa, levantando su brazo un poco para poder dar la vuelta y quedar de nuevo frente a frente. Jung sonríe cuando nuestros ojos chocan.
Sin decir nada, mi cabeza termina en su pecho y él lleva una de mis piernas hasta estar arriba de su cintura. Los nervios incrementan más pero Jaehyun no parece sentir pena alguna, en cambio, pega más su cuerpo al mío.
— ¿Mejor? — pregunto tratando de no tartamudear.
— Mucho mejor...
(💤)
— YoonOh, dame cobija.
Jaehyun se queja sin soltar un poco de su agarre en el edredón, el chico en algún momento de la noche se adueñó de éste.
Eran las cinco y tantos de la mañana en un domingo, Jay no tenía que trabajar y mis padres tampoco así que posiblemente todos terminaríamos levantados hasta las diez de la mañana.
Con gusto me volvería a cerrar los ojos y dormir el tiempo restante, pero hace un frío de los mil demonios y Jung está más tieso que un tronco.
Suspiro haciéndome bolita y acercándome a su lado, tratando de percibir el calor de su cuerpo. Incluso pensando en meterme debajo de él para así volver a estar arropada.— YoonOh, por favor — ruego en voz baja, recibiendo el silencio por parte del chico. — Jay...
Jaehyun se voltea hacia mi lado, balbuceando entra sueño y pasando su brazo sobre mi espalda hasta estar de nuevo debajo de las cobijas.
Dios es grande.
Aunque ahora este debajo del edredón, el sueño se ha ido por completo y termino preguntándole porque hace más frío en la mañana que en la madrugada, me quejo en silencio sabiendo que papá ya no arreglará la calefacción.
— Jiwon, deja de moverte— la voz ronca de Jaehyun hace me sobresalté, el chico tiene los ojos cerrados pero hay una sonrisa en sus labios.
— Duérmete un rato, Jaehyun.
— Si te sigues moviendo no podré. — El lleva su mano hasta atrás de mi muslo, sosteniendo mi pierna hasta acabar de nuevo en su cintura, la misma posición de como terminamos dormidos. Se siente tan intimo el momento, como si no fueramos simplemente amigos. — ¿Qué horas son?
— Son las seis de la mañana, duérmete YoonOh. — sus ojos están hinchados y la punta de su nariz tiene un rastro de color rosa.
Tratando de distraerme, tomo mi teléfono del buró al lado de mi cama y me escondo debajo de las cobijas, asi no tendría los brazos fuera del edredón.
En poco tiempo, Jaehyun tiene su cabeza en mi pecho y mi brazo rodea su cuello para que sea más cómodo tener e tres mis manos el celular. Y como cambiamos de posición, es él quien ahora tiene su pierna arriba de la mía mientras que su brazo rodea mi estómago.
— ¿Quién es él?— pregunta cuando mira que le doy un corazón en la foto de un familiar lejano. — ¿Por qué le comentas que está guapo?
— Es mi primo, Jaehyun. Duérmete.
— No tengo sueño, cuéntame algo. — ruedo los ojos cuando noto el tono de voz que utiliza para decírmelo.
— No seas empalagoso, YoonOh. — el ríe y pronto mi teléfono acaba de el piso. Jaehyun me lo quito y lo tiró hacia la alfombra. Estaba lista para alegar, pero el chico termino encima de mi.
Mis piernas acabaron abierta dejándolo a el entre ellas, mientras que Jung se sostenía con sus brazos cada uno al lado de mi cabeza. Si su propósito era ponerme nerviosa, lo estaba logrando.
— Recuerdo que dijiste que te gustaban los chicos empalagosos. — dijo antes de agacharse y juntar nuestros rostros. La tensión entre los dos se podía sentir a kilómetros, solo faltaba que alguno de los dos eliminará el pequeño espacio para poder pegar nuestros labios. Sin embargo, su boca no acabó sobre la mía. — Voy al bañó. — Dijo después de dejar un pequeño beso en mi frente, separándose de mi y saliendo de mi habitación.
¿A qué mierda estás jugando, Jung?
Holaaaa, ¿Como han estado? Espero que muy bien. Aquí está la otra actualización, espero que la disfruten y que les haya gustado, las cosas se están poniendo un poco más heavy entre los dos, verdad?
No olviden q los tqm y se me cuidan mucho.
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Tall Boy · Jung YoonOh →Completa✓←
Fanfic¿Por qué todos le temen a Jung Yoonoh? Jiwon no lo entendía. Sabía que el chico es alto, casi del alto de la puerta de su habitación y también que tenia una fuerza increíble siendo esta demostrada cuando jugaba algún deporte en la clase de educació...